HARRY
Harry está acostumbrado a escuchar los sonidos de Sarah, Niall y Mitch charlando en la cocina por la mañana, sobre todo durante el fin de semana. Es una de las cosas que le brinda más comodidad cuando pasa un largo verano en el resort por trabajo. Ha sido lo mismo desde que los conoció en su segundo verano aquí.
Es familiar.
Cuando estás fuera de casa durante largos períodos de tiempo, es esencial tener algo que te haga sentir tan seguro y cómodo como en casa. Harry tiene suerte de tenerlo todo con él.
Sin embargo, la charla cómoda y familiar se detiene abruptamente en el momento en que Harry entra a la cocina esta mañana, y lo deja expuesto de la manera más extraña. Él ya sabe que han estado hablando de él, pero la mirada en todos sus rostros lo confirma.
"Oh, mira quién está aquí", dice Sarah desde detrás de su vaso de jugo fresco después de un par de agonizantes y silenciosos segundos. "¿Como estuvo tu cita?"
"Por millonésima vez, no fue una cita", insiste Harry mientras toma una taza del armario. Siente todos sus ojos taladrando agujeros en su espalda cuando se está sirviendo una taza de café. Incluso contempla hacer el café dentro de una taza de viaje y marcharse al trabajo, lejos de sus miradas indiscretas.
Todavía está tranquilo cuando camina hacia los demás sentados alrededor de la mesa. Sacando una silla junto a Niall, Harry se sienta, casual y tranquilo.
De alguna manera, la atmósfera le recuerda el paseo de la vergüenza del verano pasado cuando tuvo que pasar no sólo entre sus amigos sino entre muchos otros compañeros de trabajo en el vestíbulo del hotel, después de una noche muy, muy salvaje.
Caminar bajo los ojos de María con chupones por todo el cuello, el cabello revuelto y los botones de su camisa arrancados lo marcaron de por vida.
Estuvo muy cerca de trepar por la ventana de la habitación en la que se quedó, con alguien cuyo nombre ya ni siquiera recuerda, en lugar de caminar por el vestíbulo para salir.
Se convenció a sí mismo de que nada podría ser tan malo. Sin embargo, extrañamente se siente mucho así en este momento, a pesar de que la situación es muy diferente.
Pasar un día con Louis, como Louis Maldito Tomlinson de Fireproof, se había sentido tan... personal. Harry haría otro Paseo de la Vergüenza o bajaría por la ventana ahora mismo, en lugar de contarles a sus amigos sobre su misterioso acompañante.
Y eso es demasiado.
No cree que a Louis le importe mucho que sus amigos lo sepan, pero mantener un perfil bajo parece muy importante para él. Harry no va a violar la confianza que Louis le ha dado, ni siquiera por accidente.
El miedo a arruinarlo, incluso si no hay nada que arruinar, es demasiado dominante dentro de su propia cabeza, lo que le impide contarles nada a sus amigos.
Nadie dice nada durante varios segundos, todos obviamente esperando que Harry dé detalles sobre algo. Con quién estuvo, qué hicieron, por qué tardaron tanto...
"¿Y se supone que debemos creer eso?" Sarah pregunta entonces, riendo con incredulidad. "Desapareces toda la noche después del trabajo, no envías un sólo mensaje durante horas, y cuando finalmente lo haces, es para decir que no fue una cita".
Harry no dice nada porque sabe que no sirve de nada. Agarra una galleta de uno de los platos y alcanza la cobertura de crema.
Sarah toma otro sorbo de su jugo. "Ni siquiera te escuché llegar anoche".
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Love Is A Word, You Gave It A Name (Traducción )
RomanceDespués de dos décadas en el brutal mundo del espectáculo, Louis Tomlinson está tratando de restaurar su tranquilidad mental en la paz del norte de Europa, donde el sol apenas se pone, el bar de María siempre está abierto y el joven Harry tiene una...