Nos conocimos por aquellas galletas, ¿por qué no continuar nuestra historia gracias a ellas?
• Historia inspirada en el manhwa "Tercer final"
• Ship principal- Minsung (Minho x Jisung)
• Capítulos de 2000 palabras
• Se encontrarán más ship
• Fluff...
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Se despertó con molestia y miró la hora en su móvil, ya era algo tarde. Con mucha pereza se levantó de la cama para asearse y comenzar a hacer el almuerzo.
Mientras colocaba los platos en la mesa Michelle salía de la habitación de invitados, estirándose y bostezando como si de su casa se tratará.
Se sentó en la mesa sin decir ninguna palabra y comenzó a comer
—Michelle, ¿cuándo te vas a ir a tu departamento?— Dijo Lee mientras se sentaba enfrente de ella —¿Me estás echando?— la pelirroja le lanzó una mirada de molestia e indignación
—Algo así, si— respondió con una sonrisa burlona —Hoy mismo me voy— dijo para luego comenzar a comer el delicioso ramen que el pelinegro había preparado
—Lo mismo dijiste la semana pasada— la sonrisa de Minho comenzaba a ser tétrica —Te recuerdo que soy tu hermana mayor, respétame— y una cuchara fue lanzada a su cara.
El silencio invadió el comedor, la pelirroja era la única que comía con tranquilidad sin cruzar palabras
—A propósito, ¿alguna vez has ido a una cita a ciegas?— preguntó el menor sin probar un bocado de su plato
—Lo preguntas como si no me conocieras. ¿Tu nunca has ido a una?— el pelinegro negó enseguida —Bueno, generalmente puedes ir a comer a un restaurante, tomar café, ver películas, beber juntos, como una cita normal. Luego si la persona te interesa mucho, tras un par de encuentros pueden acabar en un hotel, pero todo depende de las personas. ¿Por qué lo preguntas?— la chica hablaba con mucha experiencia en el tema
—Hay... Una persona que irá a una cita a ciegas— el chico se levantó levemente del asiento para sacar su móvil de uno de los bolsillos —¿Quien?¿El chico con el que has estado viéndote?— preguntó Michelle mientras se llenaba la boca de comida
—Si...— Minho escribía rápidamente mientras su pierna se movía con nerviosismo, envió un "hoy es tu cita, ¿verdad? ¿A qué hora os vais a encontrar?" Y en un par de segundos obtuvo su respuesta.
Se levantó de la mesa y salió corriendo a su habitación para poder cambiarse
—Limpia la sala y lava los platos— fue lo único que dijo antes de salir corriendo de la casa.
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