One-Shot's Gabenath ♡˙∘٭

Mascaras

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Cada que alguien invitaba a Gabriel Agreste a algún evento. Este lo rechazaba al instante o simplemente no asistía.
Pero esta noche ,con algo de insistencia de parte de su amiga Audrey ,por no decir que casi fue obligado a asistir a una "pequeña" fiesta, la cual tenía tematica de un baile de máscaras. Tuvo que ir.

Decidió invitar a su asistente para no morirse de aburrimiento en aquel lugar y de paso gastar el pase extra que tenía, bueno es lo que le dijo a ella. Aunque en parte eran sus razónes,en realidad también quería verla usar un nuevo vestido que el había confeccionado exclusivamente para verse lo puesto a ella.

Y además,como sabia que a Audrey no le agradaba su Asistente del todo, el tener a Nathalie cerca la mantendría lejos.

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Por fin llegó la hora de alistarse para poder salir y llegar temprano, y así tener irse más rápido.

- Nathalie , ya nos tenemos que alistar.

- Si, Señor , pero tengo un problema.
- No tengo nada para ponerme.

- De eso quería hablarte, diseñe un vestido que va en conjunto con mi traje.
- Quisiera que lo usaras en esta noche.

Nathalie antes de responder, un muy notorio sonrojo apareció en sus mejillas.
- Sería un placer.

Gabriel llevo a Nathalie a su taller de diseño, donde al entrar tenía el vestido rojo vino,con textura de terciopelo, un escote bastante profundo,con una abertura en la pierna y detalles dorados que hacian la textura de plumas de pavo real puesto en un maniquí y a su lado tenía unos tacones negros y varios accesorios, entre ellos collares, anillos, aretes y una máscara color vino.

- Nathalie por favor ponte lo.

- Pero, Señor es mucho para mi.

- Por supuesto que no.
- Lo diseñe pensando exclusivamente en que TU fueras la primera y única que se lo pusiera.

Esto sorprendió a Nathalie, ya que en sus años trabajando con el solo le diseñaba ropa exclusiva a su Esposa.
- Pero...

- Nada, te pones el vestido, los tacones , los accesorios y vengo por ti en 10 min.
Sin decir más Gabriel se fue.
Dejando a Nathalie sin más opción que ponerse el hermoso vestido.

Después de arreglarse completa, Nath se quedó viéndose al espejo, analizando se así misma. Este vestido hacia resaltar mucho su cuerpo cosa que no le incomodaba pero tampoco es su estilo.

El sonido de la puerta tocando se escuchó.
- Nathalie, puedo pasar?

- Este... Claro, Señor.
Los nervios se le pusieron de punta, nunca el Señor Agreste la había visto de esta manera, siempre era su traje diario o su pijama. Temia que le parecía inapropiado y que pensara que se ve mal.

- Nathalie ya estas...
La expresión en la cara de Gabriel, era enteramente de admiración, como si hubiera visto a una diosa, a un ser divino, como si un pedazo del mismo cielo estuviera usando uno de sus diseños.

- Si... Y-ya estoy... Lista.

- Eres hermosa.
El pensamiento más importante en la cabeza de Gabriel , salió de lo más profundo de su alma , regalando se lo a su Asistente , que en este instante y por el resto de su vida sería la mujer más hermosa que sus ojos hayan admirado.

- Enserio?

- No sólo hermosa si no... Maravillosa, Extraordinaria.

De inmediato la cara de Nathalie empezó arder como hoguera, sentía que empezaba a sudar y su corazón se aceleraba demasiado rápido.
- Gracias.

Antes de que Gabriel pudiera seguir alagando a Nathalie, una alarma sonó en su reloj, dando aviso a que ya se tenían que ir.
Los dos salieron rápido hacia el auto que los esperaba, entraron y comenzaron el camino, que aunque sólo era de unos 30 minutos, con ese aire de mágico romance que tenían entre los dos , fue eterno.

Por fin llegaron al lugar de la fiesta, cada uno se bajo, entregaron su entrada y un gran salón decorado como si fuera un Palacio los esperaba.
En cuanto Nathalie puso un pie en el lugar ya tenía a muchas personas a su alrededor, no sólo preguntándole si era la pareja de Gabriel o su identidad; ya que con la máscara no era muy reconocible; si no más que nada invitándola a bailar, conversar o tomar algo con ellos.
En contestacion Gabe sintió un extraño sentimiento de enojo "ella es mía, viene conmigo" esto lo quería gritar en la cara a cada una de las personas ahí, pero por suerte se contuvo sabia que Nathalie no aceptaría nada.
(Error)

Por increíble que parezca la Señorita Sancour, después de unos trajos demás estaba rodeada de personas riendo y conversando, parecia que tenía una gran carisma y sentido del humor. Y del otro lado del Salón estaba Gabriel ya ebrio enojado desde hace bastante tiempo no sabía donde estaba su asistente y solo seguía viendo a lo lejos a esa hermosa mujer que por alguna razón se parecía a ella.

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Después de unos momentos los trajos incrementaron y la fiesta también, entre  baile y baile, la Señorita de rojo y el Señor Agreste se encontraron. De tan ebrios que estaban se olvidaron que venían con el otro así que se saludaron como si fuera la primera vez.

- Un gusto Señorita.
- Con todo respeto es hermosa.

- Gracias , me lo an dicho toda la noche.

Los dos con un claro tono de ebriedad conversaron como perfectos desconocidos, hasta que por el ruido empezaron a bajar por el lugar y encontraron lo que parecía ser una sala de estar, se sentaron y siguieron pero algunas miradas que se hacían no eran un tanto amistosas si más... De deseo por el otro. Talvez era el alcohol , talvez era el destino, pero se empezaron a acercarse al punto de no poder soportar y se besaron.

El beso fue tan apasionado y lujurioso que el desierto de su alma por el largo tiempo de abstinencia fuera cubierto por un oasis de pasión. Su boca provocaba fuego en la del otro, los dedos que acariciaban su piel provocaban llagas en ella, los suspiros se sentían como si su alma parsara a la del otro.
La ropa les comenzo a estorbar, querían sentirse completamente el uno al otro, pero momento de quitarse las máscaras Nathalie se negó, quería jugar llevaba tiempo sin hacerlo y ese sexy Rubió, de increíble cuerpo , con unos ojos que la comían viva; era su única oportunidad.

Empezó a jugar con su miembro en su boca, degustando cada parte de este, mientras observaba con detenimiento con su cabeza caía hacia atrás del placer que ella provocaba.
Cuando lo sintió cerca de terminar, se detuvo en seco, dejándole bastante alborotado.

- Por que te detienes?
Pregunto Gabe acelerado.

- Por que yo decido cuando vas a terminar. Esta noche YO voy a controlar tu deseo a un orgasmo y retenerlo una y otra vez, hasta que me supliques con lágrimas tenerlo.
Una sonrisa de lo más lujuriosa se pinto en el rostro de la que esta noche iba ser dueña de alma y cuerpo de Gabriel Agreste.

Lo prometido es deuda, Nath hizo que Gabriel la pusiera en cada posision que esta quería y al momento de sentir su orgasmo aproximándose, se detenía.
Hasta que estando el encima de ella, entrelazando sus brazos y su piernas, compartiendo no sólo un beso si no más un deseo, dejó que la tortura de Agreste se acabará y le dejó tener su tan ansiado orgasmo.
Después de tanta adrenalina y muchas emociones la ebriedad se bajo, y se quitaron sus máscaras, revelando que el amante que tuvieron esa noche era el que deseabaron todo su vida.

Fin

                              『••✎••』