𝙍𝙀𝘿 ; Park Joong-Gil

three

(...)

CUANDO GO RYEON volvió los demás le reprocharon sobre su imprudencia al aceptar la garantía de responsabilidad, pero la pelirosa dijo que era lo que debía hacer como emisora. Los siguientes minutos se la pasaron buscando al joven Woojin en cada rincón del hospital, estaba en riesgo y podría tomar aquella difícil decisión en cualquier momento si no lo encuentran, Eun-soo corría por los pasillos vacíos del piso siete las lágrimas recorrían sus ojos, los últimos días habían sido una tortura para la castaña quien había perdido a su mejor amiga, la compañía la había encontrado, había vuelto a ver a Park Joong Gil. Todo se había puesto de cabeza en poco tiempo, llevaba tantos años junto a los humanos pero al principio jamás convivio con ellos, solo era como ella se llamaba "una mancha borrosa" que no existe, que está viva y muerta. Eun-soo conoció a Na-young y todo eso cambio, la pequeña castaña le había demostrado a Eun-soo lo importante que eran los sentimientos humanos y cada cosa pequeña de la vida, hasta que la vio derrotada por esa fractura en su tobillo y luego Woojin iluminó la vida de Na-young.

Las personas complementaban a las personas, sabía que aunque su amiga ya había fallecido sería un recuerdo precioso que protegería con su vida. Eun-soo lo había entendido, en el pasado se había dedicado a ser parte del equipo de escolta, ser alguien fría y sin corazón una emisaria cono Joong Gil, pero ahora se daba cuenta que cuando se trataba de suicidio las personas merecían más, por eso en cuanto vio a Woojin siendo sostenido por Ryeon no dudo en correr a ayudar, la pequeña Na-young trataba de agarrar a su amado y subirlo para evitar que caiga y muerda pero no podía, por qué no era real. Go Ryeon uso sus poderes para que Woojin pudiera ver a Na-young pero era casi imposible pues al usarlos se castigaba así misma debido al anillo que la compañía le había dado como castigo por romper las reglas.

— ¡Eun-soo! — escucho a la pelirosa gritar de dolor — ayúdame.

La castaña asintió y alzó su mano. Na-young trataba de tomar la mano de Woojin pero no podía hasta que con la ayuda de Eun-soo por fin pudo estrechar la mano de su amado, quien se sorprendió ante el frío toque pero el cual reconocería dónde sea, una enorme y blanca luz iluminó el lugar durante minutos, Eun-soo supuso que Go Ryeon los había enviado a hablar a ambos, cuando todo pareció calmarse Woojin de encontraba sentado en la escalera llorando pero de felicidad, Na-young se encontraba sentada al lado de el solo que ya no podia verla.

— Ella está feliz al saber que no tomaste esa decisión, Woojin — hablo Eun-soo mientras se acercaba al joven quien parecía sostener algo en su mano.

— Me alegra poder verla una vez más aunque sea una despedida — respondió mientras limpiaba levemente sus lágrimas — ¿Que harás ahora Eun-soo?.

— Debo volver al trabajo, sobre llevar mi duelo... Na-young siempre estará presente en mis recuerdos — Murmuro mientras le sonreía a su amiga la cual estaba feliz de escuchar sus palabras — gracias por haberla hecho feliz en todo momento, espero que volvamos a vernos Woojin.

— Lo mismo digo.

Se despidió mientras caminaba en busca de los demás emisarios, detrás de ella venía Na-young ya debían estar siendo esperados por el grupo de escolta, encontró a los demás en la entrada del hospital y a lo lejos las dos chicas del equipo de escolta ya se habían teletransportado ahora solo esperaban a que la bajita se despidiera.

— Su equipo nos salvó, salvaron a ambos — agradeció Na-young mirando a los tres emisarios con una enorme sonrisa en su rostro.

— No es nada — respondió Joon Woong.

— Gracias a ustedes ya puedo irme tranquila — volvió a agradecer.

— Ve con cuidado.

Na-young comenzó a caminar hacia el equipo de escolta pero volvió a girarse para despedirse nuevamente, solo que está vez Eun-soo la sorprendió al rodearla en un enorme abrazo el cual la castaña correspondió hasta que la escuchó sollozar con fuerza.