Dos chicas miraban desde lejos como Karma hablaba con Arthur mientras Jessica jugaba en el parque con otros niños de su edad. La chica vestida con ropa de cuero negro sonrió de manera maliciosa mientras que la chica que vestía con un vestido blanca los miraba con cariño, ambas se marcharon sin decir nada, ya tendrían su turno para hablar con el espíritu de justicia.
Había pasado dos meses desde que Karma había perdido sus poderes, llegado al mundo terrenal, conocer a Jessica y a su gruñona hermana, conocer a Arthur y terminar limpiando baños en la universidad. No era como se había imaginado estar dentro de dos meses pero no podía quejarse. Durante ese tiempo ahorró bastante dinero pero no el suficiente para tener una casa propia, por lo que por ahora vivían con Arthur. Aquel chico se había convertido en su mejor amigo sin esperarlo.
Aquellos hombres que secuestraron a Jessica no volvieron a aparecer pero eso no hizo que Karma bajase la guardia, sobre todo porque desde hace unos días sentía que alguien la estaba observando. Junto con Arthur investigaron de nuevo la nave donde la pequeña fue secuestrada, pero no encontraron nada relevante.
Lo que sí recordaba con claridad fue algo de la herencia de la madre de Jessica, la cuál parecían querer aquellos hombres. Y si con Jessica no había funcionado su plan, era probable que fueran contra Sabrina para conseguir lo que buscaban.
–Debemos vigilar a Sabrina de cerca. –comentó Karma de manera pensativa.
–¿Te gusta mi hermana? –preguntó Jessica sorprendiendo a Arthur y Karma, quién la miró con los ojos bien abiertos.
–No. Me refería a que si esos hombres vinieron a por ti, es probable que también persigan a tu hermana. –explicó Karma manteniendo la calma. –Por alguna razón quieren la herencia de tu madre, y debemos impedirlo.
–¿No sería mejor ir a la policía? –sugirió Arthur viendo a su mejor amiga. –No creo que nosotros podamos hacer mucho contra ellos.
–Si vamos a la policía es posible que algunos de ellos estén infiltrados allí y así sepan quiénes somos. Lo mejor será encargarnos nosotros mismos, al menos por ahora.
–Tiene lógica. –dijo Jessica sonriendo. –Pero, ¿entonces no te gusta mi hermana?
También el segundo plan de Karma consistía en hacer este gran bien para así conseguir pronto sus poderes. Algo egoísta por su parte, pero haría lo que fuera por tener de vuelta sus poderes divinos, por mucho que le comenzara a gustar estar aquí, ya quería regresar a su lugar de origen.
Karma dejó a Jessica con Arthur mientras ella iba a la biblioteca de la ciudad para investigar un asunto que rondaba por su cabeza, y pensó que en aquel lugar lleno de libros podría tener su respuesta. Pero no fue así, todo lo que habían eran tipos de libros pero ninguno de lo que ella buscaba, antes de irse observó como un trabajador de allí llevaba en sus brazos una pila de periódicos y se acercó con curiosidad.
–¿De cuándo son? –preguntó Karma por la fecha de los periódicos.
–Son de hace un año o tal vez menos, la directora me ha mandado tirarlos ya que ya no sirven. –dijo el hombre. –Si quiere coger uno y llevárselo es libre, los vamos a quemar en un rato.
–Gracias.
Karma ojeó los periódicos buscando lo que quería saber, y después de minutos leyendo todo tipo de noticias, encontró la que buscaba. En la cuarta página de aquel periódico mostraba una foto del accidente de coche junto con una breve descripción de lo ocurrido.
"Accidente automovilístico acaba con la vida de Jennifer Moore, la millonaria conocida en la ciudad de Everfree. Ha fallecido a sus cincuenta y seis años en un accidente del cuál no se sabe aún quién fue el responsable. El conductor del otro vehículo se dio a la fuga."
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Me llamo Karma
Ficção Adolescente¿Qué es el karma? El karma es una energía que se genera a partir de los actos de las personas, también es conocido como un espíritu de justicia o equilibrio. En cada ciudad del mundo hay una energía que ejerce su justicia sobre las buenas o malas p...