Hermandad Jurada (FIN)

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En cuanto pudo Jiang Cheng regresó a Yunmeng dejando a su niños bajo la vigilancia y cuidado de Lan Zhan.

Antes de irse, fue a despedirse y los encontró conversando con los niños Nie. Sus discípulos les comentaban, con orgullo y una pizca de presunción mal disimulada, haber recibido lecciones personales de Hanguang-Jun. Solo entonces, las palabras de Jin GuangYao parecieron ser acertadas. Sin duda, los discípulos Nie estaban impresionados por eso. ¿Podría pasar los mismo con los adultos?

No quería usar la reputación de Lan Zhan en beneficio de su secta, y mucho menos que él pensara que lo había aceptado por eso. Sin embargo, no pudo evitar sentirse un poco esperanzado.

En cuanto llegó a Yunmeng, organizó una reunión con los ancianos y algunos miembros importantes de la secta.

En la reunión les informó claramente que no se casaría, y de su relación con Lan WangjI.

Una vez más comprobó que tal vez Jin GuangYao tenia razón. Para su asombro nadie parecía realmente asombrado con la noticia. Los ancianos no estaban felices, y le hablaron sobre sus deberes, sobre herederos, y lo decepcionados que sus padres estarían por su conducta. Fue muy duro oír eso porque golpeaba todas sus fibras sensibles, pero no iba a retractarse. Además, sabia que no seria útil para su secta, si tenia que vivir sin Lan Zhan. Nada seria tan difícil como tener que mantenerse alejado de él.

Algunas personas intentaron interceder por el, recordando a los ancianos opositores que su hermana era una mujer de Yunmeng sana y joven que podría engendrar más niños para que hereden su secta. Jiang Cheng no quería cargar esa responsabilidad a su hermana, y dudaba que Jin ZiXuan entregara a uno de sus hijos, pero esa posibilidad aplacó a algunos, y Jiang Cheng no los contradijo.

Finalmente algunos comenzaron a ver las ventajas de una alianza con Gusu, y cedieron un poco. Sintiéndose profundamente aliviado de que nadie decidiera dejar la secta y que no parecían listos para una rebelión en su contra, acabó la reunión satisfecho y esperanzado.

Inmediatamente le escribió a Lan Zhan para darle las noticias y fue recompensado por su valentía con una visita.

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No fue hasta que recibió la carta de Jiang Cheng que Lan Zhan se permitió sentirse completamente feliz y aliviado. La decisión había sido tomada y él fue escogido. Nadie podia hacer nada ahora.

Tras darle la noticia a su hermano y tió para que se preparen para las consecuencias de las novedades, que probablemente pronto se esparciría, se dirigió a Yunmeng. No podía quedarse, pero tenia que ver a su amante para celebrar su victoria.

Fue sorprendente y agradable ver el rostro relajado y feliz de Jiang Cheng después de tanto tiempo. No parecía demasiado ansioso por lo que acababa de hacer y eso era maravilloso.

Sin embargo, esa noche Jiang Cheng le contó con algo de culpa sobre su charla con Jin GuangYao, temiendo que el malinterpretara las cosas.

Lan Zhan no lo hizo, lo suyo se resolvió antes de eso. Además, lo llenaba de satisfacción saber que podía serle útil, y que su presencia allí no iba a causar culpa y ningún malestar a Jiang Cheng. Al contrario, podría hacer su vida más fácil y plena. Estaba lejos de sentirse molesto por eso.

Solo no estaba de acuerdo sobre la manera en la que otros veían a Jiang Cheng. Para él era inaudito que le temieran cuando era una de las personas más justas que conocía. Durante la guerra, aunque el carácter de Jiang Cheng era fuerte, siempre se preocupaba por el bienestar de los inocentes, y los cultivadores que estaban a su manos. No era justo que lo consideraran alguien mezquino y cruel, pero parecían pensar que era su influencia el que lo tenia "controlado". No le agradaba que tuviera esa reputación injusta.

IMPROBABLES (ZHANCHENG)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora