viii. auch

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CAPÍTULO OCHO"AUCH"

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CAPÍTULO OCHO
"AUCH"















EMMA LEWANDOWSKA
december 26th, 2022








EMMA NO SE CONSIDERABA UNA PERSONA MUY TÍMIDA, DE HECHO ERA BASTANTE SOCIABLE, pero joder que la mirada de los ojos hazel de la hermana de Pablo la hacían temblar de pies a cabeza. La menor fue la primera en llegar al punto de reunión, siendo que ella era una intensa a la que le gustaba estar puntal en todos lados no le molestó esperar unos minutos hasta que Pablo, su hermana y el novio de la hermana llegaran.

Y pudo suspirar aliviada cuando vió que no estaba vestida muy diferente a ellos. Pablo llevaba puesto lo que le dijo que llevaría, Aurora estaba vestida con colores marrones y crema y el novio de esta estaba vestido igual que Pablo pero con los colores invertidos; mientras que la rubi llevaba unas medias negras, falda color crema, polera negra y un abrigo negro.

—Y dime Emma, ¿De donde has conocido a la bestia de mi hermano? —Aurora parecía muy distraída tomándole fotos al lugar, pero la menor supo captar la peligrosa curiosidad con la que se dirigió a ella.

La polaca aclaró su garganta y sonrió —Pues nos conocimos en un aeropuerto —Explicó —. Yo tropecé con el y, vaya sorpresa, se enfadó y comenzó a decirme que era una niñata y tal por haberle hecho caer —Emma se encogió de hombros —. También es compañero de mi padre, en el Barça.

—Que sorpresa tu saltando a la mínima, hermanito —La mayor miró divertida a su hermano —. Bueno pues, todos aquí somos fans de tu padre, Emma —Sonrió Aurora mirándola con sus intensos ojos color hazel —. Y tú... pff eres increíble, estás cumpliendo el sueño frustrado de cualquier mujer.

Emma no pudo evitar sonrojarse por completo. A su lado, Pablo, suspiró y la tomó del brazo para que girase en el pasillo correcto, ya que Emma, al estar tan distraída o siguiendo sus propios pasos en el museo, podría llegar a perderse, y Pablo le había prometido al padre de la menor que no le quitaría el ojo de encima en ningún momento.

La rubia rodeó los ojos y se soltó del agarre de Gavi, muy atenta en las obras de arte que se presentaban ante ella como para pelearle que no era su padre y que ella podía cuidarse muy bien sola. No le molestaba ser cuidada pero no hacía falta que la tuviese como a una niña pequeña con una mano en el hombro para que no tomase el camino equivocado.

Pablo era un chico tan raro que la hacía confundir. Un día podía ser el chico más gracioso y carismático del mundo pero al otro día es un gruñón, enojón, odiador serial de todo el mundo que a la mínima de una mala mirada ya salta con una rabieta de enojo o te responde con la intención de herirte; otra de las cosas que le molestaban a Emma era lo egocéntrico que podía llegar a ser, era un chico demasiado guapo y el lo sabía, usándolo cada vez que podía en beneficio propio.

midnight ✩ pablo gavira Donde viven las historias. Descúbrelo ahora