.・゜-: ✧ :- FALDA CORTA-: ✧ :-゜・．

04

Pueden o no poner la canción, es opcional 😊

Disfruten de la lectura 😏

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Sus labios se encontraban de manera feroz y saciando su hambre salvaje.

Los dientes de Namjoon se clavaban en su piel. Mordiendo como si fuera un trozo de fruta dulce, chupando su sangre como agua fresca en el desierto. Mientras sus manos se pegaban a su cuerpo, dejando la marca de sus dedos en cada lado de su ser, llegando hasta su trasero y apretando como si fuera un simple trozo de plastilina, deleitando sus oídos con los gemidos de Jin. Callándolo con su lengua, que jugaba con la suya.

Buscando dominarlo ante sus deseos.

Se sentían extraños al encontrarse en esa situación, pero no se iban a detener por nada en el mundo. Solo sus cuerpos.

A punto de unirse en uno solo. Un solo cuerpo y alma.

Los dedos del moreno se colaron bajo su mini falda, con malicia apretaron la carne de su muslo y coqueto llego hasta el borde de su ropa interior. En los labios de Namjoon se formo una sonrisa divertida, al darse cuenta de las bragas de encaje y sintió más curiosidad. Enredó sus dedos en la goma negra y las fue bajando lentamente, sintiendo como Jin temblaba en medio del beso, mientras le quitaba las bragas, dejando su trasero al aire.

—Ahgm...mierda..—gimió Jin al sentir su piel tocar el frio del mármol, su piel se volvió de gallina y sus labios se abrieron un poco, siendo una tentación para la boca del otro.

Lo volvió a besar con pasión.

Atrapando sus labios con los suyos, suspirando ante aquel sabor tan delicioso. Aquellos labios carnosos y rojos por la brutalidad de su beso, mientras sus dedos que iban más allá, buscando nuevas sensaciones.

Jin sentía que se derretía.

La punta del falange recorría la forma circular de su ano, apretando de vez en cuando, como si fuera un botón  y provocando espasmos en el caliente cuerpo de Jin. Sus piernas se cerraban de forma impulsiva y temblaban anunciando su necesidad de ser atendido, un bulto apareció levantando un poco su falda y es donde el moreno no pudo disimular su sonrisa llena de orgullo.

Había conseguido provocar el deseo en el castaño.

—¿Qué ocurre princesa? —pregunto Namjoon a escasos centímetros de su rostro, rozando sus labios con los del castaño y tentando con su paciencia, sin romper la conexión de sus miradas y detener el movimiento de sus dedos— Te he imaginado de tantas maneras, pero nunca pensé que terminarías así...

El castaño lo miro por unos segundos, aguantando un poco las ganas de reír, pero no podía con el ego y arrogancia del moreno.

—¿Así conquistas a tus revolcones..? —pregunto Jin levantando la ceja y riendo— ¿Diciendo que les vas a follar duro y sin piedad? Que romántico...

Namjoon rio mientras negaba con la cabeza.

—¿No te excita? —preguntó levantando la ceja de forma coqueta.

—Si supieras lo básico que es eso, hasta en el porno lo han dejado de usar.

Las palabras de Jin siempre eran navajas voladoras directo a dañar el ego de las personas, pero Namjoon no podía quejarse, le gustaba ese lado víbora del castaño y en parte le atraía. Era como un juego de quien domina a quien.

—Sabes hablas demasiado, a veces eres irritante.

—Mira algo que tenemos en común. —sonrío con malicia.