Las Brujas de Kedward: Discordia [LBK #2]

Capítulo 20: Caminos Separados

Sun Hee sabía que lo que se venía era malo. Todo había empezado a verse mal cuando Kate no había aparecido por ningún lado y tampoco podían encontrar a la Magistra para que las ayudara.

—Es una cobarde —decía Janice—. La Magistra se está ocultando para no enfrentarse a todo esto, ¡es cobarde!

Los demás concordaban un poco con ella, pero Sun Hee no la culpaba del todo e, incluso, tenía la teoría de que quizás la Magistra no estaba de su lado después de todo.

Respecto a Kate, solo tenían una teoría posible y era que había quedado atrapada en el internado. Habían esperado a Kate durante horas en la casa de verano y, debido al temor de que fueran por ellos, debieron ir a la casa del alcalde, con la esperanza de que Kate podría aparecer por ahí en algún momento.

Luego de que pasaran tres días, los seis se habían convencido de que Kate no volvería y de que, lo más probable era que hubiera muerto aplastada entre los escombros del internado. Otra teoría de Sun Hee era que sus enemigos la tuvieran capturada o la hubieran asesinado ya, pero quería pensar que esa no era la realidad. Si Kate estaba muerta, esperaba que hubiera sido a causa del derrumbe.

Chayna había estado llorando todos los días por Kate, sintiéndose culpable por haberla dejado ir sola. También sentían culpa los humanos, Adrien en particular, quien había prometido que no le sacaría un ojo de encima según el plan original.

Janice, aunque fuera muy dura, si había estado llorando encerrada en el baño un par de veces. A ratos le costaba creer que Kate ya no estuviera con ellas y cuando lo recordaba, sentía un vacío en el estómago y unas inmensas ganas de llorar, pero para no demostrar desesperación y debilidad frente a los demás, decidía hacerlo asilada.

Sun Hee había mantenido las esperanzas durante cinco días. Se había intentado convencer de que, en cualquier momento, Kate aparecería en la casa y les diría que necesitaba beber una taza de té de hojas para calmar sus nervios. Luego de esos días, se dio cuenta de que estaba intentando ignorar la realidad para vivir una fantasía, entonces, esa noche se durmió llorando y solo pudo tener pesadillas que involucraran a su amiga.

Ese día ya se cumplía una semana desde que la guerra se desatara y Sun Hee decidió que ya no podían estar más en ese lugar.

—Estarán dispuestas a incluso matar humanos —supuso Sun Hee—. Corremos peligro en un pueblo de poca concurrencia y poca población, lo mejor será que cada una vuelva con sus familias. Además, estando separadas será más difícil que nos atrapen.

Sun Hee también imaginaba que el globo mágico que le indicaba la ubicación de las brujas a la Magistra había sido destruido en el incendio y la Magistra actual no debía tenerlo en sus manos, por lo que sería mucho más fácil ocultarse.

Janice no se sentía tan mal con el plan de Sun Hee, después de todo solo volvería a su vida común y corriente en Massachusetts, pero las otras dos sabían que volver a sus vidas en sus países de origen sería algo difícil.

Después de tanta libertad en un país europeo, volver a China o Argelia no era fácil. Sun Hee sabía que su padre la presionaría a entrar a una escuela de humanos (una "escuela real" como las llamaba) y luego esperaría que estudiara una carrera y que formara una familia perfecta. Por otro lado, Chayna estaría obligada a cambiar su vestir a uno mucho más recatado y era probable que sus padres le buscaran un esposo para deshacerse de ella, sin tener oportunidad de ser una mujer independiente.

—Si no queda más opción... —Chayna tragó saliva—. Supongo que es lo que hay que hacer.

—Al igual que tú, espero que no sea por mucho tiempo —le dijo Sun Hee—. Estaremos en contacto y ahora que viviremos entre los humanos podremos tener cosas como redes sociales y eso... estaremos en contacto por ese medio.