Ghost, oh, dios

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Si me tocas,
Me derrito,
Sin ti no vivo,
Amo sentir,
Como te escueces en mi piel.
-Guadap_Riley

Hoy era el día, habías estado pensándolo durante algún tiempo ya, Simon era el mejor, querías tener todo de él y que el lo tuviera todo de ti

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Hoy era el día, habías estado pensándolo durante algún tiempo ya, Simon era el mejor, querías tener todo de él y que el lo tuviera todo de ti.

El no era el hombre más expresivo en cuanto a su amor hacia ti, pero eso no significa que no te amara, solo le costaba expresarlo con palabras, en cambio, el te lo expresaba acarisiandote y besandote, cada persona expresa lo que siente de manera diferente.

Amabas como el cambiaba cuando la luz se apagaba, le encantaba acurrucarse contigo y darte muchos besos, solo eso, nunca pasaron de un par de caricias y besitos coquetos, el respetaba que nunca lo hubieras hecho, te dijo que te esperaría lo que fuera necesario.

No sabias porque aun no lo habías hecho con el, solo te ponía algo nerviosa la idea..

Habías visto su miembro y dios, eso no era normal.

Nunca te había penetrado, pero eso no quiere decir que no hubieran hecho otras cosas; cosas como tocarse mutuamente, lamerse el uno al otro, entre otras cosas.

Simon siempre estaba dispuesto a hacer lo que tu le pidieras, el amaba poder tocarte y así poder  demostrarte cuanto te amaba.

Por lo que no se nego cuando le dijiste que querías dar el siguiente paso con el:

–¿Segura amor? Sabes que no tengo ningún apuro, puedes tomarte todo tu tiempo para estar lista–  Te reitero.

Pero tu ya estabas lista, tan lista para el, desde la primera vez que te toco lo habías estado, desde esa vez habías cambiado tanto, vibrabas cada que el estaba cerca, querías más, añorabas más de el.

–Si, Simon, estoy muy lista–

Fueron con calma, no había apuro, tenían todo el día...

El se acercó a ti y te beso, mientras lo hacía se iba sacando la camisa, amabas esa parte, no pudiste evitar tocar su abdomen, siempre lo hacías, también se sacó los pantalones, solo quedó en ropa interior, tu te acercaste a su abdomen y lo besaste, lo tenia todo marcado, pero no sólo besabas, también estabas tocando su miembro por encima de su ropa interior , besabas con devoción cada parte de él.

–Es un poco injusto, yo estoy casi desnudo y tu estas toda vestida– Dijo com voz ronca.

Tenía razón, te alejaste de el, y te  sacaste todo, el solo se quedó mirando, como un cazador mira a su presa, siempre te hacia sentir así, tan caliente.

Te recostó, no, te tiro a la cama y se metió entre tus piernas, sabias que cuanto le encantaba lamerte, justo eso hizo, debía prepararte.

Primero lamio durante un buen rato y luego coloco un dedo, dos, tres, si, eso sería justo el anchor que deberías soportar.

No durante mucho, después de que el tercer dedo fuera insertado tus piernas temblaron sin parar y gemiste mucho, una excelente señal para el.

–Bueno, amor, que bonita te ves así– Te dijo mientras te veía con una sonrisa de superioridad.

No pudiste responderle nada, no podías pensar con claridad y recién estaban empezando.

Coloco sus caderas entre tus piernas y toco tus partes con su miembro, queria llenarlo de tus jugos, para que pudiera deslizar con facilidad.

Se mantuvo haciendo eso un buen rato, mientras te decía cosas al oído y te besaba, dios, parecía un mar, hasta las sábanas debajo de ustedes estaban mojadas.

Sentiste cuando empezó a meterlo, era una sensación rara, deslizó su mano hacia tu clitoris y empezó a estimularlo, de esta manera te relajarias y dejarías que pase con mayor facilidad.

Luego de unos segundos cuando logró meterlo todo, dolió, el se quedó quieto, solo tocandote y besandote, esperando que le dijieses que ya podía seguir.

Cuando moriste tus caderas en señal de que ya podía hacerlo, empezó lento, tan lento que era una tortura, necesitabas más.

–Más– y así se lo pediste.

Pero, dios, para que, empezó a ir más y más rápido, sostuvo tus caderas alzadas para que pudiera entrar más profundo, podías escucharlo gemir y murmurar cosas para el mismo.

Estuvieron mucho tiempo haciéndolo, ya habías perdido la noción del tiempo, el estaba lleno de rasguños y tu llena de el.

Habían empezado cuando el sol se estaba ocultando y terminaron cuando el sol estaba por salir.

Simon se notaba muy feliz y cansado, estaba todo transpirado, el hizo todo el trabajo, tu intentaste tomar el control, pero te cansaste muy rápido.

El se levantó de la cama y se fue, volvió con una toalla, y un baso de agua.

Te limpio y se acurrucó junto a ti, mientras tomas agua el solo te miraba, una mirada llena de amor, al acostarte junto a el, te abrazo y te lleno de besos.

–Te amo, esta noche, a sido la mejor noche de toda mi existencia– lo dijo bajo.

Pero eso basto para que tu corazón diera un vuelco y te sintieras eufórica.

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Nota:

Me siento algo avergonzada después de escribir esto, espero que este bien, no soy mucho de escribir este tipo de cosas.

😶‍🌫️

One-Shots de Ghost Simon RileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora