Un endroit qui n'existe pas

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Érase una vez un hombre que buscaba con anhelo un lugar. Un lugar que había visto en sueños. Un lugar que no existía.

Después de que Simon y su familia finalmente partieron tras un muy mortificante desayuno, Cole decidió tomar una siesta. Él era alguien resistente, sí, pero si permanecía despierto un minuto más empezaría a alucinar.

Así que, como siempre, cerró la puerta para aislarse del mundo y se tumbó en la cama.

Aunque algo era raro. Sentía su rostro arder pero todo lo demás estaba frío. Además sus brazos parecían de acero, rígidos y pesados.

—Perfecto—murmuró mientras se acomodaba para poder dormir—si me enfermo por esto voy a estar muy indignado.

El hombre sabía que el lugar no existía. Lo supo desde la primera vez y sabía que lo más razonable era ignorarlo. Ignorar esa sensación de necesidad. Esa obsesión por encontrarlo. Pero era inevitable, cuanto más lo ignoraba, mas fuerza ganaba su deseo por llegar a él. Cada vez que se repetía "ese lugar no existe" sus ganas de llegar ahí se salían de control.

La fiebre comenzó a subir mientras Cole intentaba dormir.

Empezó a sentir mucho frío y llegó al punto en que casi no podía moverse debido a lo débil que se encontraba. Quiso levantarse para ir por algo de agua pero sus piernas no soportaban su peso. Además de que se encontraba realmente mareado.

Si no existe ¿porque quiero ir ahí? Si no existe, este deseo tampoco debería existir.

Carla y Peter habían salido un par de horas después del almuerzo. Almuerzo en el que Cole no estuvo. Samuel se preguntó si tal vez él tendría hambre, así que salió de su cuarto.

Al llegar a la puerta del cuarto de Cole escuchó un extraño quejido. No de dolor pero parecía molesto. Entró sin tocar.

¿Cómo llegar a un lugar que no es un lugar, si no un anhelo? ¿Cómo dejar de pensar en él? ¿Cómo vivir sin él?

"¿Porqué debo extrañar algo que nunca tuve?"

Cole se retorcía lentamente bañado en sudor frío.

Samuel no tardó mucho en entrar en pánico.

"Me temo que te amaré por siempre y nunca estaremos en la misma habitación al mismo tiempo de nuevo."

—¿Cole?—susurró Samuel poniendo ambas manos en las mejillas pálidas.

Luego tocó la frente y el cuello para comprobar su temperatura. Era una fiebre muy alta.

Samuel corrió a la cocina por un vaso con agua y luego a la ducha para empapar un paño.

Samuel intentó poner el paño sobre la frente de Cole pero este se removió inquieto.

—¡No quiero!—se quejó empujando un poco a Samuel—¡No quiero ir!

—Estás delirando por la fiebre—explicó Samuel con calma mientras le ponía el paño frío en la frente.

—No...no—seguía repitiendo con una voz que a Samuel se le hizo extraña.

—Está bien—le dijo suavemente a Cole cerca de su oído.

Cole abrió los ojos.

No es un lugar. Pero es algo que sí existe. Es algo que puedo tener.

Tiró del brazo de Samuel para hacer que este cayera encima suyo.

Samuel se aferró con fuerza para sentir aún más el abrazo.

Es algo que puedo tener.

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⏰ Última actualización: Dec 02, 2024 ⏰

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