¿Ah que NO te lo esperabas?

MAS leña para esta parilla

CAPITULO VII:

Ahí estaba de pie mirándolo con picardía, podía ver como sus ojos se tornaban de un tono más ambicioso. Dean no la mira hasta que yo centro mi atención a ella.

-¿Cómo era tu nombre?-Mueve un poco su cabello para atrás dejando ver un poco de la piel de su cuello, no le bastaba con tan pronunciado escote que tenía.

Dean como todo hombre se dejó tentar por ese escote.

Pero no fue lo suficiente lejos hasta que mostro un gesto de disgusto.

-Ni te lo eh dicho...

-Por esta escuela corren los rumores muy rápido-Ahora ella se balaceaba de atrás para adelante así cuando iba para adelante se acercaba más a nosotros.

-Una lástima que sea así... me estaba agradando.

-Te agradara más- extiende su mano hacia el sin antes recorrer su ambiciosa mirada por su cuerpo- Solo Daniela... para lo que necesites estaré.

-Tranquila que él es autosuficiente y no necesita la ayuda de una cualquiera- Salió cada letra de mi boca sin meditar con anticipación las consecuencias.

Su brillo ambicioso se transformó de inmediato en una de ira total, cruzo los brazos en su pecho y por primera vez en el día me había visto. Su cabello largo de un castaño desteñido caía sin control alguno por su espalda no dándole un toque muy sofisticado y más con esa combinación tan extraña de colores en su ropa, no era un extraño que te hiciera innovar tu punto de vista sino lo quemaba de raíz... o solo era porque desde que nos saludamos el primer día hace dos años supimos que no seriamos compatibles en nada.

A pesar de que algunas cosas la teníamos en común y detestaba con toda mi alma aquellas cosas, con tan solo mirarnos nuestro humor cambiaba. El de ella era un poco asolapado, siempre les sonreía a las personas y caminaba en saltos sacando medio trasero para verse tierna-sexy pero realmente se veía como una chica que no había aprendido a caminar después de tanto tiempo... solo era un dolor de "culo" existencial para mí, pero no tan duro.

-¿Qué has dicho?-Sonrió con una hipocresía que ni fue necesario mirar dos veces su rostro y ver el deseo de que me quería quitar la cabeza con un machete al estilo Jasón... tampoco tan "la ostia" como Jasón pero sí que sería doloroso para mi ser.

-Que no es necesario que una lambona como usted ayude aquí al caballero presente-Ahora la que tenía porte de patear culos era yo.

-la lambona es otra que se metió a mitad de conversación...

-Si tan solo hubieran tenido una...

Ahora estábamos más cerca de una a la otra con las manos liberadas a los costados dispuestas a arrancar la mayor cantidad de cabello como si fuera una maratón de la que quite más cabello de la cabeza de la otra... ya me había visualizado con el trofeo en mis manos sino hubiera sido por Dean que había tomado mi hombro y enviado de un medio empujón a metros de ella.

-Lo siento... ¿Daniela cierto?

-Si-lo dijo ahora con un tono corto pero empalagoso...

¡MALDITA SURIPANTA!

-Es verdad que puedo valerme por mi mismo y aun así ya tengo a mi guía-Pasa su brazo por mis hombros y contengo un grito de victoria.

¡YO HABIA SALIDO INVICTA PERRAS!

Ahora el rostro de Daniela se había palidecido el doble a pesar de que su rostro siempre andaba con las mejillas rojas como pelotas de una piscina de malla para niños. Tarareo un poco dispuesta a contestar sin verse lametada por el trágico momento, solo lo miro y le sonrió.