CAPITULO VIIII:
Después de tener más que un excelente en la tarea de química me sentía más ligera en todas las variables, En el segundo receso me quede en las escaleras de la segunda planta con Aleja a mi lado.
-¿Es que ella no se cansa de joderte?-Me pregunto Aleja mientras jugaba con el montón de manillas que había en su mano derecha.
-Creo que me eh convertido en su acto de circo favorito-Mantenía la cabeza apoyada en mis manos viendo con cansancio más allá de la segunda planta.
-Deberías tomar en cuenta ese dicho "ojo por ojo diente por diente"- Ahora su atención estaba en su mentalidad Patrick Bateman... que cosas no pensaría en elaborar con Daniela.
-Suena como venganza... Yo ni por el carajo gastare mi tiempo en ella.
Aleja bufa y se pone de pie posando como Superman para una portada.
-No es venganza es castigo-Sonríe victoriosa a su ya planeado plan.
-Me gustaría pero paso-Bajo por los escalones y boto el paquete de galletas en la basura más cercana.
-¡¿Cómo que pasas?!-Grita ella detrás de mí.
-Si paso-bostezo y estiro mis brazos hacia el techo-Desearía patearle el trasero, pero como dice mi papa si te buscan pelea no te ensucies en ella.
-No todos los padres tienen razón-Seguía rogándome que le nos "castigáramos"
Seguía repitiendo no simultáneamente hasta que ambas nos encontramos de nuevo a Deisy y Aleja no espera un momento hasta que se lanza hacia ella gritando-¡DI QUE SI!
-¿Si de qué?-nos mira confundida.
-Le digo que le patee el culo a Daniela- ni se inmuto a observar si habían una de sus amiguitas en la zona.
-¿Por qué no se lo pateas? Patéaselo y listo-Encoje los hombros sin más.
-Tú siempre andas así de relajada.
-En todo- Confirma Deisy con un sonrisa.
-Así que es dos contra una-Volvió el timbre de victoria en la voz de Aleja.
-Esto no es democrático-Me quejo siguiendo caminando con ellas a mis lados.
-Por eso este mundo esta como esta-Chilla Aleja.
-¿Y crees que sangre por sangre está bien?-Les pregunto.
-La película es buena, no me quejo-Dice Deisy.
-NO hablamos de la película-me detengo-Solo no quiero pelear con ella... espíritu pacifista.
-Cuando te conviene-Reclama Aleja.
-Amor y paz perras-Con mi mano les doy el saludo vulcano y salgo antes de que me reclamen tomar represaría ante esto.
Me fui meticulosamente entre pasillo cuando la campana sonó, no quería toparme ni a Daniela ni a Dean, llegue antes que nadie a la clase de literatura...
Estuvo interesante, Un gran debate sobre los movimientos del siglo XIX. Claro que mi argumento a favor de lo que paso en esta época fue victorioso con mi grupo, choque las palmas con todos y les desee que estuvieras igual la otra clase.
Salí del edificio y ya todos se estaban yendo para sus casas o para en bares o unos simplemente se quedaban para hacer clases extracurriculares. Me puse los audífonos mientras esperaba a Aleja en la salida del parqueadero pero no se avecino en todos unos quince minutos.
Mire de nuevo mi celular y no habían señales de vida de Aleja, pause la música y la llame.
-¡Mil Disculpas pero no puedo acompañarte!-Grita Aleja en la otra línea.
-¿Por qué?- me altero momentáneamente... no tenía ni un centavo para recargar la tarjeta del autobús.
-No me acorde de que Jackson tenia entrenamiento y me había pedido que lo acompañara.
-Eres una desertora-Le susurro indignada.
-No te pongas así, mira te daría el auto pero aun no tienes pase...
-Ya no me lo recuerdes desertora por un jodido hombre.
-No es cualquier hombre...
-Eso lo veré en algunos años... Adiós sino se me hace tarde.
Subí el máximo volumen de mi celular cuando volví a poner la música y más cuando seguía la canción Bonfires. Paso tras Paso cantaba dentro de mí, faltaba aún mucho camino como una media hora, suspire frustrada... ¿Por qué tuve que haber gastado mi dinero del transporte? Solo por ser buena amiga y no recibir eso de parte de ella.
Pase el semáforo cuando un auto se comienza a orillar cerca de mí, me siento asustada y aumento la velocidad de mi andar. A pesar del alto volumen que salían de los audífonos se escuchaba el pito del auto a mi lado... sabía que no debía mirar pero de alguna manera mire a mi lado y el dueño de ese auto era Dean.
Doy un suspiro de alivio y me detengo para tomar la cantidad de oxigeno que me había negado de recibir por la preocupación de hace unos segundos, vuelvo a mirar a la ventana del auto y Dean murmuraba algo... para escucharlo me quite un auricular acercándome.
-Casi dejas un cadáver en la cera-Me quejo.
-Te estaba llamando hace unos dos minutos, no es mi culpa que andes así de distraída.
-Solo estoy frustrada... eso es todo.
-Espero el porqué de tu frustración con ansias.
-Aleja no me dio el aventón... la chica que estaba conmigo en el receso.
-Así que estas como un hongo de camina a tu casa...
-Si algo así...
-Pues yo estoy disponible para el aventón- Me guiña.
-No subo a autos con desconocidos-Cruzo mis brazos para mostrar indiferencia pero realmente me emocionaba un poco estar en el auto de Dean.
-Sabes que soy tu vecino Dean y yo sé que tú eres Sam... no somos tan desconocidos.
-Igual...
-Sammy no te hagas rogar-Zafa su cinturón de seguridad y sale del auto, al volver a verlo tan alto de frente me hizo volver a sentirme como un hobbit.
-Es bueno caminar...
-No a estas horas-Concluye Dean tomándome de mis hombros para dirigirme al asiento del copiloto.
Pero me detengo al pie de la puerta.
-Es bueno caminar-repito de nuevo como idiota lo de hace poco.
Dean me gira hacia él y me acorrala de nuevo pero esta vez frente del auto.
-Sammy se otras cosas que son mejores que caminar-Pasa su mano por debajo de mi camisa haciendo que por reflejo mi espalda se enderezara.
-Yo solo quiero caminar...
Trago en seco al sentir la piel de Dean contra la mía... me sentía tan santa paloma al estar así con él. No sabía qué hacer si empujarlo y dale una bofetada por descarado o solo susurrar mediocremente que se detuviera.
PERO EN MI ESTADO ACTUAL ERA IMPOSIBLE ALGUNA DE LAS DOS.
Mordí un poco mi labio y mi cerebro de un milagro supo que sería lo mejor en esto
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¿Ah que NO te lo esperabas?
Любовные романыSiempre me cuestione, ¿Por qué siempre las personas perdían la cabeza cuando estaban enamoradas? Nunca lo había sabido sino hubiera sido por él. Lo supe desde que lo vi desde la ventana de mi habitación, mis hormonas levantaron la bandera de su nuev...