Fue amor | Fito Paez fic

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Buenos Aires, marzo de 1986

Serena Duran era una jóven de unos veinte años de edad, nacida en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.

A lo largo de su vida se había considerado una persona bastante común y corriente:

Estudiaba su segundo año de Ingeniería química en la UBA, había sido una alumna excelente en el colegio, siempre tuvo el mismo grupo de amigas, su familia siempre estuvo presente, pudo hacer hobbies que le gustaron como pintar (y otros no tanto, como los deportes), fué a conciertos de rock, se alcoholizó más de una vez y probó la marihuana (una sola vez, lo necesario para saber que no era lo suyo). Se enamoró y se desenamoró durante la difícil adolescencia que por fin había llegado a su fin...

Pero había algo que nunca había hecho. Nunca había amado. Pero amar del amor romántico, del amor de verdad, de ese que te hace flotar, de ese que te cala hasta los huesos, de ese que tanto veía en las películas que pasaban en la tele.

Aún así, el tema del amor era algo que con el tiempo había dejado de darle importancia. Por su ocupada rutina, porque sus prioridades ahora eran otras, y porque sinceramente hace tiempo no encontraba a nadie que le moviera el piso.

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– Tercero, si la forma oxidada o reducida son gaseosas cuando su presión es una atmósfera. – explicaba el profesor de química inorgánica, mientras miraba a los alumnos a lo lejos, en aquella inmensa aula. – y por último, si la semirreacción intervienen protones cuando su actividad es uno... Bueno, creo que ya es la hora así que por hoy dejamos acá. Nos vemos la semana que viene, y traigan leídos los apuntes por favor.

Antes de que dijera algo más todos se levantaron, rompiendo el silencio que había en el aula minutos atrás, para salir de ahí una vez la clase había acabado.

– ¿Venís a lo de Sofi hoy a la noche? – pregunto Paula alcanzándola en los pasillos, que estaban poblados de alumnos y profesores.

– No sé la verdad, mañana tengo que cursar  física temprano...

– Daaale, hace un montón no nos tomamos un descanso. – la animó. – Además, nos invitó a ver al hermano tocar en el barsucho este de San Telmo. ¿Te acordás que con los pibes del centro de estudiantes estaban buscando alguna bandita para la feria del libro?

Serena lo pensó. Quizá Pauli tenía razón.

Sere estaba en el centro de estudiantes de Ingeniería, y hace ya varias semanas estaban en la búsqueda de alguna banda copada que toque algo de música en la feria del libro que iban a hacer los últimos días de abril en la facu.

– Quizá haga una excepción ésta noche, solamente por cuestiones universitarias. – bromeó mientras salían de la facultad al exterior, dónde había un hermoso día soleado.

– Che, divertirse también cuenta como cuestiones universitarias.

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La noche había llegado, y junto con Sofi Cipolatti, otra de las chicas del grupo de amigas que tenían, ingresaban las tres al bar donde iba a tocar la banda del hermano, Pipo Cipolatti.

– ¿Cómo dijiste que se llamaba la banda? – preguntó Paula por sobre la música.

– Los Twist. – le indico mientras se abría paso entre la apretada multitud.