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Descargos de responsabilidad: no soy dueño de Harry Potter.

Muchas gracias a todos los que han revisado. Realmente agradezco todos los comentarios positivos. ¡Gracias!

Vaughn ha corregido este capítulo; cualquier error que quede es mío.

emociones tiernas

Harry se despertó e inmediatamente supo dónde estaba. Solo había un lugar que olía así. El ala del hospital.

Por un momento debatió volver a dormir, pero estaba demasiado descansado para que esa fuera una opción, así que abrió los ojos, con la intención de escabullirse de la enfermería en la primera oportunidad.

En lugar de la luz nítida y brillante que generalmente lo asaltaba a primera hora cuando lograba abrir los ojos en este lugar, se enfrentaba a un mar verde. Parpadeó un par de veces para ver si eso marcaba la diferencia, no lo hizo, se apoyó en un codo para tratar de resolver este misterio.

Luego se rió. ¿Cómo pudo haber olvidado a Draco? Era su camisa contra la que había sido presionado con fuerza.

"¿Ves algo divertido?" preguntó Draco, habiendo seguido los intentos de Harry de despertarse por completo.

"No, solo trato de averiguar cuándo Pomfrey abandonó el blanco por el verde", respondió Harry, sentándose correctamente en la cama.

Draco pareció sorprendido por un momento, y luego se rió. Dejando a un lado el libro que había estado leyendo, él también se sentó, permitiendo que la ligera manta que los había estado cubriendo cayera a un lado. "¿Tiene algún sentido que te pregunte cómo te sientes?"

"Nah, estoy bien", dijo Harry con una risita. Se sentía bien tener a alguien con quien bromear. Estar con alguien con quien podrías ser tú mismo; alguien con quien no tenías que estar atento a cada palabra que estabas a punto de decir por temor a provocarles una diatriba si lo que dijiste no encajaba con la imagen que tenían de ti.

Sintiendo que su corazón se llenaba de emociones, Harry extendió la mano y acarició suavemente el pómulo fino de Draco con el dorso de sus dedos. "Gracias", susurró, sabiendo que las palabras eran lamentablemente inadecuadas para expresar lo que quería decir.

"De nada, amor," murmuró Draco, temeroso de alterar el frágil momento, felizmente ahogándose en los expresivos ojos verdes de Harry.

Harry no tenía idea de cuánto tiempo habían estado sentados allí, mirándose a los ojos cuando de repente su estómago gruñó, destruyendo el momento.

Mirando hacia abajo y dándole una mirada, no pudo evitar reírse cuando la risa contagiosa de Draco llenó la habitación. "Creo que alguien necesita ser alimentado," dijo Draco con afecto teñido de diversión.

Harry sonrió con pesar, "Supongo que sí. ¿Qué hora es de todos modos?"

Draco lanzó un Tempus rápido . "A las cinco. No me extraña que tengas hambre, no has comido desde el desayuno. Llamaré a la enfermera y..."

"¿Tienes que hacerlo? ¿No podemos escabullirnos de aquí? Pasará la próxima media hora quejándose y regañando. Estoy bien. Hambrienta, pero bien. ¿Por favor, Draco?"

Draco miró a su pareja y cedió. ¿Cómo se suponía que rechazaría esa mirada? Además, tanto Severus como Pomfrey habían declarado que todo lo que Harry necesitaba era dormir los efectos de la poción, y lo había hecho. Agregue a eso la forma en que la enfermera había estado merodeando, luciendo como si quisiera hacerle algo al moreno, pero incapaz debido a que él estaba tan cerca del Veela, y la decisión de escabullirse fue fácil de tomar.

No es tu compañero habitual de Veela Por: JanaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora