Capítulo 30: Plática (I)

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El día había pasado en calma, Ryeowook había guiado al recién llegado a la tienda dónde se encontraban hospedados el pequeño Donghae y su abuela, la sra Lee. En esa misma tienda se quedarían ahora los 3 integrantes de la familia Lee.

A pesar de la conmoción en la mañana, Donghae tuvo que enfocarse nuevamente en las clases que impartía a los niños pues él era el profesor encargado de las clases de danza y arte. Así como Sungmin, quien era el profesor de cocina y repostería para los niños. Ryeowook era el profesor de canto y música instrumental, cuyas clases los niños disfrutaban mucho. Jijong era el profesor de marionetas y artes escénicas, adoraba descubrir pequeños actores entre los niños. Y finalmente, Almendra y Minho, los profesores de deportes para los niños.

Todos ellos se enfocaban en que los niños disfrutaran al máximo el campamento de verano y al mismo tiempo descubrieran y explotaran aquellos dones escondidos dentro de cada uno de ellos.

Llegada la noche, los niños y familiares que los acompañaban cenaban juntos en un gran salón, incluso los profesores y personal del lugar se unían a ellos para compartir y pasar un momento de convivencia agradable, con bromas, canciones y risas.

Donghae dió un vistazo a todos alrededor y sonrío al ver como cada niño y niña disfrutaban de la velada, e incluso algunos ya iban despidiéndose pues el sueño empezaba a hacerse presente y una camita calientita con peluchitos de animalitos les esperaba en sus respectivas tiendas.

El castaño se levantó de su lugar y salió a caminar un poco, aprovechando la frescura de la noche, tomó asiento en una banca y su mirada se enfocó en el cielo, específicamente en la luna, su fiel compañera desde que se separó de cierto chico hace 10 años. 

Pasaron algunos minutos cuando de pronto..

- Hola - aquella voz se hizo presente una vez más e incluso el dueño de aquella voz, tomó asiento a su lado sobre la banca.

- Hola - correspondió al saludo con una sonrisa, al igual que el chico que se hallaba a su lado.

Por algunos segundos, sólo sonreían, sin embargo ambos estaban muy nerviosos, ni el uno ni el otro sabían cómo iniciar una conversación entre ellos después de 10 años. Pero fue Hyukjae el primero en romper esa atmósfera de nervios entre ambos.

- Donghae.. uhmm.. - un nueva sonrisa de encías se hizo presente mientras el pelinegro alternaba su vista entre el castaño y el paisaje frente a ellos - .. te ves hermoso - dijo finalmente.

Ambos rieron por lo primero que había dicho el pelinegro, por alguna extraña razón sonó gracioso pero al mismo tiempo Donghae se sintió halagado.

- No sabía que.. que ahora cuidabas de tu imagen y de tu outfit, incluso tu cabello se ve diferente y.. y.. - una vez más sonrieron y risas imperceptibles se hicieron presentes entre ellos - .. incluso puedo ver que ahora te ejercitas más que antes, tienes una buena contextura sin llegar a lo exagerado -

- Jajaja veo que te has vuelto más observador.. - 

- Así parece jejeje - 

Nuevas risas nerviosas nacen y en cuestión de segundos, el silencio los acompaña nuevamente.

- No lo sabía.. lo siento mucho.. - dice de pronto el castaño capturando la atención del pelinegro.

- No te preocupes.. además no tenías forma de saberlo.. - un nuevo silencio se instaló entre ellos, pero con un suspiro Hyukjae hizo aquella pregunta que le carcomía por dentro - .. ¿Cómo podrías saberlo? si.. si solo te fuiste -

Donghae no dijo nada por unos instantes, ¿qué podía responder ante aquella pregunta? ¿Que había descubierto que lo amaba pero entonces también descubrió que su amor no era correspondido? ¿que no tenía la fuerza suficiente para ver cómo el hombre que amaba se iba con alguien más mientras su corazón se rompía en mil pedazos?..

- Te busqué e incluso hice un viaje a Mokpo hace 5 años atrás.. pero simplemente no te encontré - dijo de pronto Hyukjae tomando por sorpresa a Donghae.

¿En verdad lo había buscado? ¿Había viajado a Mokpo sólo para verlo? Si viajó hace 5 años, eso quiere decir que fue en el mismo año que él y su familia se mudaron.

- Lo siento, nos mudamos a una nueva casa - dijo el castaño en respuesta.

- También cambiaste de amigos ¿verdad? - dijo el pelinegro con una sonrisa irónica que no demostraba felicidad por ningún lado. Donghae no sabía que responder ante ello. No es que lo hubiera cambiado, es sólo que..

- No estabas a mi lado cuando más te necesite.. quiero decir.. mi mejor amigo no.. no estuvo ahí - la tristeza se hizo presente en el rostro del pelinegro.

Sus palabras eran como dagas en su corazón, Donghae no quería sentirse mal pero ¿cómo evitarlo?.

- Uhm.. dime ¿te volviste a casar? - preguntó cambiando de tema.

- Te busqué por cielo, mar y tierra pero no te encontré. Si no me habría casado contigo, te lo dije aquella vez cuando aún estábamos en la universidad - nuevas sonrisas pero ahora acompañadas de melancolía se reflejaron en el rostro de ambos.

- Hyukjae.. -

- Donghae.. -

- Uhm.. yo.. -

- Ya no soy Hyukkie ¿cierto? perdí ese derecho hace mucho.. siento mucho no haber estado ahí para ti durante todos estos años. No sé si la enfermedad de tu mamá empeoró o no, pero espero que ella se encuentre bien y no hayas tenido que llorar. Sabes bien que jamás me ha gustado que llores por ningún motivo o razón - dijo sincero el pelinegro.

- Mi madre está bien, gracias.. y no, no tuve que llorar mucho, ella.. ella se recompuso rápidamente y entre Donghwa y yo, nos encargamos de los demás - Donghae para este punto ya se sentía abrumado, sabía que tenían mucho que conversar, que aclarar pero.. apena unas cuantas palabras y dentro suyo un mar de emociones se desataba ferozmente sin poder evitarlo.

- Vivimos y morimos una sola vez, nos casamos una sola vez y.. -

- Nos enamoramos una sola vez - completó la frase Donghae - siempre decías esas cosas por molestarme cuando estábamos en la universidad - dijo con cierta gracia el castaño.

- No es verdad.. el vivir y el morir son únicos, pero el enamorarte, el amar a alguien es único porque cada amor es diferente, no puedes compararlos. El amor que le tengo a mi madre, es muy diferente del amor que le tengo a mi hijo y esos 2 amores son muy diferentes al amor que si.. - Hyukjae no completo su idea sin embargo una sonrisa melancólica reemplazó sus palabras.

- ¿Y tú no te casaste? - fue ahora su turno de preguntar.

- No te encontré - respondió Donghae en son de broma.

- Uy sí.. es que me escondí en medio de la jungla para que cierto pececito no me encontrara - dijo Hyukjae continuando la broma.

Lo cierto era que a pesar del tiempo, ambos seguían manteniendo la misma esencia de siempre en su interior, esa esencia que los unía.


Pasión del CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora