17. Lavanda

829 96 32
                                    


"¿Qué le dijo?" envió como mensaje Jaemin antes de entrar al edificio donde trabajaba su marido.

Esta vez no había venido para ver a su esposo sino porque el rubio le pidió que lo acompañara a su oficina para llevarse algunas de sus cosas ahora que su madre parecía querer permanecer en la empresa por un buen tiempo, y él aceptó con la condición de que para antes del medio día debía de estar en su restaurante para comenzar a cocinar.

Además de que podría sorprender a Mark, quien creía, después de lo de esta mañana estaría más que feliz de verlo aunque fuera solo por unos minutos.

—¡Hola! —saludó feliz a Joy en la recepción.

—¡Jaemin! —respondió igual de alegre—, por favor sé un amor y lleva a Mark su encargo de desayuno.

Frunció el ceño, pero se relajó al ver que solo era un termo seguramente lleno con café, temía que algo le hubiera pasado a la comida que le había empacado esa mañana. Cuando recibió el recipiente pudo notar como la mano de la chica tenía pintura roja, pero lo ignoró. De seguro seguían pintando la oficina.

Subió hasta el piso donde se encontraban la oficina de su esposo y de su amigo rubio, todo seguía exactamente como la última vez que se había pasado por el lugar.

Fue hasta la oficina de su esposo y tocó con el ritmo de una canción de los 80's, —adelante— escuchó la varonil voz hablar del interior del cuarto y con una sonrisa entró.

Mark dejó de lado los papeles que tenía y todo su rostro pareció iluminarse al ver al chico parado en la entrada de su oficina, —Chenle me pidió que le ayudara a llevar algunas cosas y me pareció que podría pasar a saludar.

—Y vaya que fue una buena idea —dijo el más alto, levantándose de su lugar para llegar hasta donde se encontraba el otro y poder rodearlo con sus brazos.

Mark levantó a Jaemin para llevarlo hasta su lugar y sentarse con el pequeño en piernas, y mientras le daba besos en el cuello haciendo reír a Jaemin, pero justo en ese momento vibro su celular.

Lo sacó para ver de qué se trataba, era un mensaje de Chenle preguntando si tardaría en llegar y otro de Jeno que había llegado hace algunos minutos.

"Soy sincero :D".

Primero solo sonrió por el mal chiste, pero después comenzó a reír sonoramente, llamando la atención de su esposo quién por curiosidad echó un vistazo al teléfono de su marido para ver que lo había hecho reír de esa forma. Frunció el ceño confundido, era uno de los peores chistes que había leído en su vida, no podía ser cierto que le diera tanta risa al otro.

Observó como respondía el texto, "jajajajaja, excelente chiste, acabas de hacer mi día aún mejor" y esa fue la gota que derramó el vaso, vio el nombre del contacto.

—¿Quién es Jeno? —preguntó tratando de esconder sus celos.

—Es solo un amigo que me manda chistes de vez en cuando —respondió encogiéndose y bloqueando su teléfono, estaba por guardarlo en su chamarra pero fue arrebatado rápidamente por su esposo.

—¿También puedo hacer que tus noches sean mejores? —leyó el mensaje que acababa de enviar Jeno, ahora se veía completamente furioso —¿Eso te parece algo que un amigo mandaría?

Jaemin rodó los ojos con molestia, haciendo que Mark se enojara aún más —no lo dice enserio— mintió como un actor merecedor de un premio Oscar, —incluso es heterosexual y tiene novia— ahora no podía dejar de mentir, pero es que no quería que todo lo que pasó en la mañana se esfumara.

Infieles - ADAPTACIÓN NOMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora