Un pequeño accidente (+18)

Capítulo Diez

Thea

La expresión de Mark pasaba de ser enojada a dar absoluto miedo, aún permanecimos uno frente al otro como retándonos a decir la primera palabra.

Traía su ropa descuidada como si no hubiera tenido tiempo no de verse bien -como siempre le gustaba lucir- su corbata estaba a medio atar y el cabello despeinado.

-Estoy esperando una respuesta, Thea.

-Hay una explicación, no te hagas ideas equivocadas sobre esto.

-Pasas el día con ese hijo de puta y me estás diciendo que no me haga ideas equivocadas. No me jodas -acorta nuestras distancias y retrocedo-. Habla.

Me apoyo en la encimera de mármol que está detrás de mí mientras intento coger el valor para soltar lo que estoy apunto de decir.

Las palabras empiezan a formarse en mi cerebro, pero difícilmente se forman en mi boca.

-Pasamos todo el día con él porque...

-¿Mami? -la vocecita somnolienta de Asher me distrae.

Mark aprieta la mandíbula y se voltea para ver a mi pequeño.

-¡Vete a la cama! -grita y Asher salta en su puesto-. ¡He dicho que te vayas a la cama, joder!

-¡Mark! -grito de vuelta.

Paso de Mark y corro a Asher que está apunto de llorar, él corre a mis brazos en cuanto estoy cerca. Se acomoda en el hueco de mi cuello.

Lo meso mientras observo a Mark seguir bebiendo como si su vida dependiera de ello.

-Solo tenía mucha hambre y por eso bajé -susurra-. Él me asusta, mami.

-No tienes qué, él solo está estresado -acaricio su cabeza-. Te llevaré la cena a tu habitación, espérame ahí sí.

Se aferra a mí con mayor fervor.

-No quiero que te quedes con él.

-Está bien, es Mark -susurro contra su cabeza, justo ahora pienso que me convenzo más a mí misma que a mi hijo-. No me hará daño.

Con sumo cuidado subo las escaleras y dejo a Mark en medio de su rabia mirándome desde abajo.

Deposito a Asher en su cama, o más bien me acuesto con él ya que se niega a dejarme ir. Como puedo lo calmo antes de volver abajo a arreglar todo este embrollo.

Nunca se está preparado para dar este tipo de noticias a tu pareja.

Bajando los escalones tomo respiraciones cada vez más profundas obligándome a calmarme.

Mi novio está sirviéndose un trago.

-¿Debo esperar más tiempo para que des una puta respuesta?

-No uses esas palabras, por favor -hablo bajo para no volver a alarmar a Asher.

Se toma de golpe el contenido de su vaso, vuelve a servir otro poco y paso por su lado para prepararle algo Asher.

Cierro los ojos y camino junto a él, me equivoco totalmente en pensar que me dejará pasar sin más, ya que al tratar de pasar junto a él me sujeta bruscamente el brazo y me retiene a su lado.

-Quiero una explicación ahora mismo -dice entre dientes-. Thea, no me hagas perder la puta paciencia.

Todo el aliento a bebida alcohólica se cuela por mi nariz, aquel olor me provoca un poco de náuseas.

Jadeo cuando sus dedos presionan más mi carne, con cada segundo de silencio que transcurre su agarre se hace más fuerte.

En un intento de moverme ligeramente a ver si se da cuenta de su error y me suelta solo provoca que su furia aumente y me jalonea.

-Mark, me estás lastimando -me quejo.

-Tú me lastimas más a mí paseándote con él y convirtiéndome en el hazme reír de toda la ciudad.

-Es no es cierto, Mark suéltame y te diré -aprieta mucho más fuerte-. Mark...

La mirada implacable me demuestra que está cegado por los celos y eso nunca es bueno.

-Amor -gimo debido al dolor-. Por favor escúchame...

Vuelve a jalonearme.

-Sabes, ni siquiera quiero oírte -me empuja-. Te dije que no quería verte cerca de ese tipo y no me hiciste caso.

-No es lo que piensas.

-No estás ni de cerca de imaginar lo que pienso -trago saliva y sujeto mi brazo tratando de aliviar el dolor-. Yo lo supe desde ese día. Ese imbécil te comía con los ojos.

-Es no es cierto.

-Como podrías darte cuenta eres tan estúpida para notarlo. Y como no lo haría, con esa ropa diminuta que usas -niego con la cabeza y me sujeta la barbilla-. Ese día él te vio como solo yo puedo.

Una vez soy enviada con fuerza hacia atrás él se empina el trago que sirvió, solo está borracho por eso actúa de esta manera.

-Eso es imposible Mark, él está comprometido -llego a él para tocarlo, pero retrocede-. Amor, por favor tienes que creerme.

-El estar comprometido no detiene a nadie -dice sin ganas-. No soy tan tonto.

-Solo dame un momento para preparar la cena de Asher y te lo diré todo.

-¿Piensas poner a esperar nuestra solución por una estúpida cena?

-Es para Asher...

Sujeta la botella con fuerza y la estrella contra el piso haciéndose añicos en él, se derrama por completo el whisky rociando algunas gotas y fragmentos a mis pies.

-¡Me importa una mierda que sea para ese mocoso! -grita antes de tomar el vaso entre sus manos y hacer lo mismo que con la botella-. Vas a explicarme porque estuviste de zorra con otro hombre.

Todo el miedo que tenía deja mi cuerpo cuando salen todas esas horribles palabras de su boca. Avanzo de manera estrepitosa y golpeo con fuerza su mejilla.