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Regulus llegó corriendo a su casillero.

-Hola Reg.

-Hola.

-Tengo una sorpresa para tí.

-¿Otra? Wow cada día me das algo.

-Y cada vez te daré más. Porque eres... cada vez más perfecto que antes.

-Sí, está bien. Soy perfecto.

-Te mereces mucho más. Déjame consentirte. De pequeño no tuviste nada.

-No fue tan malo.

-¿No ibas a donar eso al museo?- preguntó viendo su libro de hechizos.

-Am, aún sigue ahí. Debo ir a clases. No quiero llegar tarde.

-No, no, primero. Ven.

Lo llevó con una motocicleta violeta.

-¿Te gusta?

-Oh James. ¿A los ogros no les gusta las bolita de queso? Esto me encanta. Es increíble y es morada (violeta). Y yo no te traje nada.

-Ibas a llevarme de picnic con mi comida favorita.

-Es el jueves, ¿Cierto?

-Hoy es jueves.

-Claro que no.

-Claro que sí.

-Claro que no- insistió terco Regulus.

James le mostró su teléfono.

-Lo sabía.

-Si lo olvidaste no importa, cariño.

-No,no, no. Esta bromeando. Sabía que era jueves. Solo hornearé una cosa más y soy todo tuyo.

-¿Y no vas a clases?

-Chico multitareas.

-Y te esfuerzas.

-Me esfuerzo.

-¡Eres el mejor amor! Te amo.

-¡Soy el mejor! Yo también James, adiós.

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Decendents 2//JegulusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora