𝐌𝐈𝐒𝐒 𝐏𝐀𝐑𝐊

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SeungWan

Hoy era el primer día de clases y tenía que organizar las actividades de la semana para los pequeños, por suerte me había tocado sala de cinco, ya conocía a los niños de años anteriores así que no habían sorpresas al menos que alguien se haya inscrito este ciclo.

Llegué a la escuela como siempre, saludando a mis colegas antes de dar inicio y vi de reojo a alguien nuevo entre nosotros, era una mujer que vestía de forma deportiva, supongo que es el reemplazo de la ex profesora de educación física, quien había pedido licencia por maternidad.

No le tomé importancia, saludé a todos en general, ella respondió amablemente y me serví una buena taza de café quince minutos antes de dar inicio a las clases, su cabello oscuro era muy bonito y era bastante alta usando zapatillas deportivas.

Había tocado el timbre y tomé la lista, hoy me tocaba con la sala de niños más grandes y luego con los de sala de cuatro, quienes ya se comportaban mejor después de pasar por guardería.

ㅡ SeungWan. ㅡ Llamó la directora y yo la miré, ella venía con una carpeta en manos. ㅡ Te toca la sala violeta luego de su clase de educación física.

Yo asentí y tomé el horario que me otorgó, había decidido tomar otra clase para poder comprarme ese adorado departamento que había visto en el centro, sumándole las horas que hacía en otro instituto era suficiente para ahorrar y comprarme mi propio piso, ya no más renta.

La primera clase fue tranquila, pero hubieron interrupciones gracias a los pequeños que jugaban en el patio durante la hora de educación física, no era molesto, pero lograba que los niños dentro del aula se alborotaran por ver lo que sucedía afuera. Se escuchaban ruidos de pelotas, el pitido del silbato, risas también, detestaba el momento en el que decidieron que el patio del medio sea el lugar de deportes.

Durante el receso, los niños eran controlados por nuestras ayudantes, así que me dio tiempo de ir al baño y tomar un vaso de agua en sala de maestros, encontrándome con la profesora de educación física a solas.

ㅡ Hey, hola. ㅡ Saludó ella, me sonrió también y yo elevé mi mano junto con mis cejas en modo de saludo. ㅡ Eres de inglés, ¿no?

ㅡ Sí, así es. Soy Son SeungWan, mucho gusto. ㅡ Estrechamos nuestras manos de manera formal y ambas mostramos una tímida sonrisa. ㅡ Eres la nueva de deportes, ¿no?

ㅡ Soy Park SooYoung y sí, soy de educación física. Creo que la ropa me delató. ㅡ Reímos un poco y nos quedamos viendo unos segundos hasta que el timbre volvió a sonar. ㅡ Bueno, un gusto conocerte, eres la primera persona con la que hablo.

ㅡ Es gusto es mío y bienvenida, espero que te sea leve. ㅡ Le dije con amabilidad y me sonrió en respuesta, no parecía mala onda o algo por el estilo, aunque si se veía más joven que el resto.

ㅡ Muchas gracias, SeungWan. ㅡ Desapareció por la puerta y me mordí el labio en un suspiro. Era hora de la sala violeta, donde todo es un alboroto.

ㅡ ¡Entonces mi mami me llevó a un lugar que tiene forma de bota! ㅡ Exclamaba YeRim, una pequeña cuya su voz se escuchaba hasta detrás de la puerta, todos estaban atentos a lo que ella decía, siempre era el centro de atención. ㅡ ¡Y comimos mucha pasta!

ㅡ ¡A mí me guta eso! ㅡ Exclamó TaeYong, su amigo que no se separaba nunca de su lado. ㅡ ¡Mucho, mucho, mucho!

ㅡ A mí me gustan las papas fitas. ㅡ Contó Tzuyu, una alumna que se había mudado recientemente a la ciudad, pero ya se había incorporado del todo a nuestro ambiente.