A Través De Tu Mirada

Capítulo 38

-Estás seguro que el cree que salí del país?-

-Totalmente seguro señorita, yo mismo envié las pruebas- Contestó Joe quien lejos de ser el leal abogado de Yoongi, se dejó vender por unos billetes, para ayudar a Hyori en su venganza, que lejos de tratarse de sacarle dinero a Yoongi, se había convertido en algo mucho más personal y por supuesto Noori estaba en primera fila.

-Bien, entonces encárgate de lo que te pedí, el negocio con los Jeon debe ser un hecho- Indicó con un gran sonrisa dibujaba en el rostro mientras sostenía un sobre en sus manos -Te lo advertí Yoongi, si no eres tú, será ella y estoy dispuesta a aplastarla como la cucaracha que es-

La envidia carcomía el corazón de la pelirroja no concebía la idea de que su mayor enemiga estuviese sanando y rehaciendo su vida, pese a que no fue su culpa, Hyori no tenía ningún reparo en recargar sobre ella todo el peso de la culpa y hacerla totalmente responsable de que Yoongi la despreciase.

••••••••A través de tu mirada••••••••

15 años atrás...

Verano del 2007, Escuela elemental Hyanggyo en Busan

-Véanlo, viene aquí solo para humillarnos, acaso quieres restregarnos en la cara todo tu dinero?- Espetó un chico dos años mayor que el pequeño Jungkook de 10 años que le miraba aterrado en el suelo luego de ser empujado por él y rodeado por tres de sus amigos, comenzaba ha arrepentirse de su decisión de estudiar junto a su hermanastro.

-Yo no te he hecho nada malo, por favor déjame en paz- Suplicó con voz temblorosa.

-Este chico de verdad me esta hartando! Qué te crees he?! El dueño de la casa azul?!- Le gritó tomándole por el cuello de su uniforme escolar, el pequeño Jungkook solo pudo cerrar los ojos para esperar que el puño del chico impactará sobre su rostro, pero en vez de eso logró escuchar quejidos y los gritos ensordecedores de una pequeña seguido de un dolor en su parte trasera al impactar sobre el suelo, abrió los ojos con dificultad para encontrarse con aquella niña sosteniendo una escoba en sus manos mientras ahuyentaba al chico y su séquito con éxito -Gracias...- Logró decir palmeando sus glúteos aún adolorido.

-No importa, solo trata de no quedarte solo en lugares como este- La pequeña a pesar de su corta edad tenia un carácter fuerte y decisivo que cautivó a Jungkook, quien no pudo dejarla ir sin saber de quién se trataba.

-Oye! Cómo te llamas?- Le llamó intentando obtener algo de información de la fascinante chica.

-Noori... Bae Noori y tú?-

-Jungkook... Jeon Jungkook-

-Bonito nombre Jungkook, nos vemos mañana- Se despidió agitando eufóricamente la mano mientras se alejaba rápidamente por el sendero de la vieja escuela, dejando a un pequeño Jungkook impactado, pues nunca pensó que existieran chicas así, mucho menos una de su edad, en su pequeño mundo las chicas eran frágiles y necesitaban ser cuidadas, pero ella era realmente un espécimen fascinante, un ejemplar totalmente idílico.

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-Mira un cachorro! Es muy lindo no?- Se acercó para acariciar al canino que se había acercado a ellos en el parque de la escuela y saltaba a su alrededor con emoción.

-Es muy bonito, se parece mucho a ti- Solto la pelinegra provocando que Jungkook ladeara la cabeza con intriga.

-A mi?-

-Sí, eres muy tierno, como un cachorro, pero tú cuerpo tiene la energía uno- Confesó provocando la risa de Jungkook.

-Cuando nos casemos tendremos un cachorro como este, lo prometo- Soltó derrepente haciendo que la pelinegra le propinase un golpe en la cabeza -Auch!-

-Estás loco, quién dijo que quiero ser tu novia?!- Masculló.

-Tal vez no hoy, tal vez no mañana, pero pronto lo serás- Dijo con convicción.

-Has perdido totalmente la cabeza Jungkook, yo jamás saldría contigo!-

••••••••A través de tu mirada••••••••

Las lágrimas no dejaban de rodar por las mejillas de la pelinegra, sonreía pero su rostro estaba empapado, en un torpe intento de detener su llanto, llevó sus manos a su rostro pero esto solo empeoró su condición, sus sollozos se hicieron incontrolables y llamaron la atención de Jungkook, quien alarmado se apresuró a acercarse a la emotiva Noori.

-Noori, qué sucede? Porqué lloras?-

-Cuándo ibas a decírmelo?! Cuándo eh?!- Le reclamó con incesantes lágrimas desfilando por sus mejillas.

-Espera tú... lo recuerdas?- Le preguntó con la esperanza de recibir un sí como respuesta.

-Ay Jungkook...- Suspiró abrazándole con fuerza y escondiendo su rostro en su pecho -Perdóname... han sido tantos años que yo... realmente yo... lo siento tanto- Jungkook se sonrió mientras sus lágrimas cayeron con complacencia, una paz inundó su pecho, su corazón no le había fallado, era ella... Noori, la chica que tanto había estado buscando, que por años creyó haber perdido y gracias a una corazonada logró encontrar.

Noori lloró tanto como pudo, mientras Jungkook la contenía en sus brazos hasta que esta logró tranquilizarse y poder verle a los ojos sin vergüenza.

-Lo sabías? Todo este tiempo lo supiste y no me lo dijiste...- Le reclamó con los ojos humedecidos, la nariz enrojecida y los labios temblorosos, Jungkook se sonrió ante tal cuadro, nunca esperó ver a esa chica tan fuerte y decidida, quebrarse de esa manera, si quince años atrás no pudo protegerla, estaba dispuesto a hacerlo esta vez.

-Lo supe esa noche en el restaurante, pero me contuve hasta investigar más a fondo y confirmarlo, cuando estuve seguro no supe como decírtelo y tuve miedo- Le confesó tomando sus manos entre las suyas.

-Miedo, de qué?- Le cuestionó.

-Tuve miedo de ser como él, tuve miedo de herirte y convertirme en una tenebrosa sombra que te siguiera el resto de tus días o peor aún, convertirme en el sepulcro de tu amor- Ella levantó su rostro entristecido con sus manos para poder ver de cerca el brillo de las galaxias que adornaban esos negros orbes, eran justo como los recordaba, grandes y tiernos, inspirando compasión y ternura, inocencia y bondad... todo lo que ella necesitaba pero que en su momento no supo ver y se maldijo por ello.

-Él nunca será como tú, jamás podrá igualar al maravilloso ser qué hay en ti, Yoongi fue un error pero tú... tú eres mi destino...- Al decir esto último se aproximó a él para besar el rosa de sus labios y regocijarse en la dulzura que estos contenían. Contra todo pronóstico nunca   esperó que él fuese cumplir su promesa y eso sólo reconfortó su alma, pues tras años de no creer que encontraría a alguien que ocupase el vacío que Yoongi dejó, volvió a ella la promesa del pasado, enseñándole que el destino es tan impredecible pero preciso para recompensar.

••••••••A través de tu mirada••••••••

-De verdad vas a mudarte?- Le preguntó cabizbajo.

-Lo siento Kookie, pero mi padre consiguió un empleo en la ciudad y debemos partir- Le confirmó a lo que el pelinegro dejó caer sus comisuras en profunda tristeza.

-Te voy a extrañar mucho- Susurró devastado.

-Kookie...- Le llamó, levantando su rostro con sus manos -Fue el año más lindo que he tenido, te prometo no olvidarte nunca-

-Y yo te prometo que te encontraré, donde quiera que vayas, voy a encontrarte, lo prometo...- Le prometió entre sollozos.

-Esta bien, es una promesa entonces- Le dijo levantando su meñique.

-Promesa- Confirmó sellando la tierna promesa con el suyo.

Quince años fueron demasiados para que ella olvidara su apariencia más no su promesa, pero no para él, quien la guardo en su mente como una foto fija y escribió con letras de oro esas palabras en su corazón.