Capítulo 15

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-Entonces no tenemos opción- Soltó la mayor con decepción.

-Lo siento hija, pero no podemos seguir teniendo esa casa, el dinero no está alcanzando y no podemos seguir pagando la renta, por suerte se nos presentó esta oportunidad- Dijo el padre con la misma expresión frustrada de su hija.

-Sí, entiendo, estás seguro que mi tía nos recibirá?- Volvió a cuestionar no tan segura.

-Claro que sí, Eun Ji los tratará bien, me lo aseguró, no se preocupen por eso, solo empaquen lo más pronto posible- Sugirió.

Noori dudaba mucho de eso último, por años habían huido de la familia de su padre, no por miedo sino porque todos solían ser esa clase de personas que creen que el dinero es símbolo de superioridad, algo que los Bae detestaban y por paz mental migraron al otro lado de la ciudad.

-Esta bien, no se preocupen, estaremos bien- Dijo con una sonrisa fingida, si bien sus tías eran su familia, sabía que era como ingresar a un serpentario lleno de víboras venenosas, donde todas se mofaban de ser más venenosa que la otra, pero qué más podían hacer, no podían rechazar la supuesta generosa oferta. Así que con resignación colgó la llamada y dirigió su vista hacia Hoseok quien se encontraba empacando las últimas cosas que poseían.

-Cómo sabias que esto pasaría?- Preguntó.

-Lo supe desde hace un mes, fue muy difícil juntar para pagar la renta y fue entonces que imaginé que si no mejoraba tendríamos que mudarnos- Concluyó soltando un suspiro.

-Crees que esa mujer nos de un lugar como prometió?- Volvió a preguntar el menor tomando un poco de agua para refrescar su cansado cuerpo, producto de un día arduo de empacar.

-Seguramente nos dará el cuarto de servicio y una bodega para nuestras cosas si somos optimistas- Dijo la mayor buscando el número de una agencia para trasladar todo.

-Esperemos que su generosidad sea de buena fe- Replicó Hoseok con voz apagada, ambos hermanos sabían que las cosas se estaban agravando poco a poco, aún así no perdían la fe y deseaban con todas sus fuerzas que sus problemas encontraran una pronta solución.


••••••••A través de tu mirada••••••••


Luego de cuatro horas de viaje en donde no lograron ser capaces de conseguir más que unos huevos hervidos que lograron comprar como almuerzo, finalmente llegaron a la residencia de su tía, un lugar muy amplio, elegante y lleno de naturaleza, cualquiera que lo viera se imaginaría en el paraíso con el gran detalle que esté aún tenía a la serpiente viviendo dentro y no precisamente era su tía Eun Ji.

-Bienvenidos, que bien que ya están en casa, porque saben que esta es su casa cierto?- Les recibió la menor de sus tías, Eun Ji, una mujer bastante amable que a pesar de que Noori tenía un mal concepto de la familia, ella era de las pocas excepciones, por lo menos hasta el momento.

-Muchas gracias tía, perdone las molestias- Se disculpó Noori sosteniendo firmemente su maleta.

-Bien se quedarán en los cuartos de visitas por el momento en lo que conseguimos un lugar para ustedes, sus cosas irán en la bodega, si necesitan algo las llaves estarán justo en la entrada de la casa- Indicó con una sonrisa.

Ambos hermanos asintieron ingresando a la casa en silencio, la casa de su tía era un espacio tan vacío y desolador para ellos a pesar de tener un esposo e hijo que casi nunca estaban en casa, la familia no figuraba ser tan unida como lo eran los Bae, pero que podían hacer más que soportar la idea y someterse a un nuevo hogar. Resignados acomodaron cada una de sus cosas y ayudaron a bajar las demás en la bodega de la familia, muchas cosas tuvieron que venderlas y otras desecharlas, pero se aseguraron de haber conservado lo esencial y necesario.

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