capitulo 4

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Después del entrenamiento senjuro se fue a su casa para cambiarse y bañarse, tenía manchas de barro en toda su ropa y pequeños moretones de caídas.

Sen:en que lío me he metido, *será mejor que nadien se entere de esto, si lo descubren pueden llegarme a cortar la cabeza por aprender de un demonio*

Pensaba senjuro un poco nervioso por lo que le podrían hacer si alguien lo descubre.

Senjuro veía que estaba amaneciendo haci que tenía que hacer el desayuno para su padre y para el antes de que su padre se enoje nuevamente.

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Hoy era un día importante, hoy su madre fallecida estaba de cumpleaños, así que recolectaron algunas de las rosas que hay en la finca para llevárselas.

Siempre hacia esto con su hermano mayor, pero el ya no ha estado en su vida últimamente, ni siquiera sabe si se acuerda de él, no sabe si le volverá a contar como era su madre, como eran sus rosas del jardín o el Como antes eran feliz.

Dejando sus pensamientos de lado este decide ir a la montaña donde aguarda la tumba de su madre.

La tumba estaba ubicada el la punta de la montaña, donde había un gran árbol de glicina, que decoraba la tumba con su gran manto morado.

Al llegar limpio la tumba de su madre y con el gran ramo de rosas que traía con sigo, hizo una corona para la tumba y dejó varios objetos antiguos que le pertenecían a la difunta

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Al llegar limpio la tumba de su madre y con el gran ramo de rosas que traía con sigo, hizo una corona para la tumba y dejó varios objetos antiguos que le pertenecían a la difunta.

Este decide contarle a su madre todo lo que ha pasado hasta el momento y lo solo que se siente... después de terminar de hablar hace una reverencia y se despide de su madre marchándose del lugar.

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Mientras que senjuro camina siente que alguien lo observa, más no se asusta porque ya sabe de quien puede ser.

Una mirada, sin duda la reconoce, como podría olvidar aquellos ojos que brillan en la oscuridad, con colores tan hermosos y llamativos.

Sin duda sabe quien es, más no piensa ni un segundo más en acercarse a dicha mirada feroz que lo observa desde las sombras.

Sin duda sabe quien es, más no piensa ni un segundo más en acercarse a dicha mirada feroz que lo observa desde las sombras

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SENJURO ENTRENADO POR UNA LUNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora