Capítulo 18

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-¡Sosa!.- le oigo a mis espaldas.

Miro mi reloj y veo que son las ocho y cinco, mi casa se encuentra a otros cinco minutos, entonces...

¿...Qué pasaría si voy y le demuestro que no soy una sosa...?

Me dirijo a él y le doy un beso suave y tranquilo a comparación con el de minutos atrás, en cuanto termino me voy corriendo, en verdad no tengo ni idea de qué decirle.

Llego al edifico, y me dispongo a subir las escaleras pero mi vista se detiene en la pareja que está discutiendo en el jardín trasero: la pelirroja y su flamante novio ¡el ogro!

Sin darme cuenta una sonrisa aparece en mi rostro, el día no ha podido ser mejor.

Busco en mi bolsillo la llave, y entro en mi piso, no hay nadie en la cocina y tampoco en el salón, hasta que voy en busca de ellos a su habitación, donde los encuentro haciendo las maletas.

-¿Por qué tardas tanto?.- me pregunta mi madre.

-Es que estábamos cuidando a Carlitos...y no me había dado cuenta de la hora.- miento.

-¿Has cenado?.- me pregunta Juanma.

-Sí, ¿y vosotros?.- le contesto con una sonrisa, Juanma siempre se ha comportado muy bien conmigo, es como si realmente fuera mi padre.

-Pues hemos decidido irnos ahora y luego irnos a cenar a algún restaurante y después irnos de camino a la casa de la prima de Juanma, que está cerca de aquí.- me responde mi madre.

-Vale.

-Camila..- me dice.
Odio cuando me llama Camila, me va a decir algo malo o me va a regañar, de eso estoy segura.
...-Que te deje tres días completos, sola, en casa no significa que puedes hacer lo que te dé la gana, ¿lo sabes no?

-Lo sé.

-Segunda cosa: no quiero que traigas a ninguno chico, sea gay, o sea primo del primo del vecino de tu amiga, y tampoco bebidas, ni drogas ni nada de ese estilo, te voy a dejar dinero suficiente para que compréis comida y bebida.
¿Te queda claro?

-Que sí.
Además aquí sólo conozco a Melisa, asi es que es imposible que traiga a alguien más.

-Mucho mejor.
¿Está todo listo Juanma?

-Sí, cuando quieras nos vamos.- le contesta él con una sonrisa.

-Bueno pues vámonos ya, que va anochecer demasiado.
Cuidate y no hagas ninguna travesura mi pequeñaja.- me dice mi madre mientras me da dos besos en la mejilla.

-Digo lo mismo que tu madre, princesa.
Si traes a alguien más no pasa nada, yo soy una tumba.- dice Juanma haciendo como si tuviera una cremallera en la boca.

Oigo el ruido de la puerta al cerrarse, así es que me voy al salón y me tumbo en mi cómodo sofá, y me quedo mirando el techo sin saber qué hacer.

Pero de repente pasa por mi mente...
Lo ocurrido esta tarde.

¿Por qué Javi me besó?

¿Ese beso significa algo?

¿Cómo me comporto con él?

Anónima taquilla 36 [pausada...]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora