Ella cayó al suelo y él le extendió la mano.
-¿Estas bien?
Levantó la mirada para encontrarse a un chico ciertamente atractivo.
-¿Me hablas a mi? -Preguntó.
[24 de Mayo-21 de Junio]
No dejaba de jugar con sus dedos, ¿tenía miedo o estaba nervioso? ¿Qué podía hacer? Solo es un niño.
Miró a su hermanita, dos años menor que él, aunque se parecían, él era ligeramente más albino, y ella más dañada mentalmente.
Tenían las prendas que llevaron toda su vida, en aquel orfanato no había gran variedad, en un momento dejó de jugar con sus dedos y tomó la mano de la niña.
Habían otras dos niñas en esa habitación, una tenía ropa casual y se veía igual de nerviosa, tenía pelo largo y plateado.
Usaba lentes y tenía pocas pecas, por ser tan blanca como la nieve eran notorias, una característica muy tierna a su parecer.
Miró a la otra chica, ella tenía un traje de criada, su cara estaba seria y sus ojos reflejaban miedo, otra razón para temer.
Aquella también tenía el pelo blanco ¿tenían alguna obsesión estas personas con ese tono?
Tomó aire respirando ondo, estaba aterrado pero no quería que Cyn se diera cuenta, no quería asustarla.
Volvió a mirar a la niña de lentes, parecían tener la misma edad. Sonrió tímidamente.
-H-Hola -Intentó llamar su atención.
La chica volteó, aquella diadema que decoraba su pelo la hacía ver aún más linda de lo que él creía.
-Hola -Contestó aquella voz suave.
Quería hablar con ella y preguntarle su nombre, quizá eso los relajaría a ambos, pero la niña de coletas, a lado de la puerta de la habitación los calló.
-El señor James se enojará -Les susurró.
Él bajó la mirada.
-¿Quién? -Preguntó Cyn.
Aquella chica que los había callado volteó a ver a la menor. N se apresuró a tomarla de los hombros para que no fuera a decir nada más.
A él siempre le enseñaron que debía ser obediente.
◈
-¿Tu te llamas...? -Preguntó aquella pelinegra.
-Neith -Sonrió.
Ella -claramente mayor a él- se quejó, miró a la chica de coletas.
-J, ¿no puedo llamarles como a ti? -Preguntó aún quejándose.
¿Había algo mal con su nombre?
J miró a la menor del grupo.
-A ella no, ya tenemos una C.
Tessa miró a la misma persona que J, no estaba realmente interesada en ella. Solo se le hacían curiosos esos dos niños nuevos.
Su padre le había dicho que ellos serían sus compañeros de juegos, estaba emocionada por ello.
Poco sabrían aquellos tres niños de ocho años lo que pasarían en aquella mansión.
Hasta que los mandaran a una escuela fuera de esa ciudad.
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Pito, prólogo cambiado, notarán el tremendo cambio que hice al poner a Cyn como hermana biológica de N y no de Tessa.
Pero x, ahora tendré que revisar los demás capítulos en caso de incoherencias.
¿Tessa pelinegra canon? Ya no lo imagino de otra forma
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