¿Me hablas a mi?

XIII

|Parque|

Dibujar se había convertido en una pasión, al principio lo hacía por ser obediente, ahora no podía parar.

Uzi estaba a un lado suyo, jugando con el teléfono de N, pues ella era quien ahora no tenía uno.

-Vamos, vamos, vamos -susurraba Uzi.

N estaba muy cómodo, volteó para ver a Uzi, levantó una ceja y agachó un poco su cabeza para poder verla mejor, luego sonrió y volvió a su dibujo.

Estaban sentados en un pequeño parque, para liberar el estrés de la escuela después de clases, había poco sol, avisando que pronto llegaría primavera.

No era una ciudad donde hiciera frío, la mayoría del tiempo era caluroso.

No había más que hierva alrededor y unas cuantas personas.

El albino volvió a mirarla, esta vez la morena lo notó. Del nerviosismo perdió el juego que N tenía, luego lo miró dejando el teléfono de lado.

-¿Qué haces?

-¿Ah? -Miró su dibujo, luego con su dedo intentó que Uzi no le mirara- No voltees.

Uzi se rió y apartó la mano de N.

-¿Qué haces? -se arrastró poco para estar pegada a N y ver su dibujo.

-Aún no lo termino -Alzó la libreta.

-Déjame ver -Chilló intentando alcanzarla.

-No~ -Decía burlón.

Uzi se estiró lo que pudo, aún estando sentada, solo estaban jugando, aunque al intentar estirarse más se resbaló cayendo en el pecho de N.

Como él no se sostenía de nada también se cayó. Terminó acostado en el pasto con Uzi en su pecho y la libreta un poco más lejos de ellos.

-Ups -Exclamó la de ojos morados.

Luego de un corto silencio asimilando lo que pasó se echaron a reír ambos.

Al intentar incorporarse N por accidente, su rodilla chocó con el estómago de Uzi, el cual aún tiene varios moretones.

-Auch -cerró sus ojos tocándose el estómago.

-¡Uzi! -la miró asustado- Lo siento, ¿estas bien?

-Mm, si -Dijo para después soltar un quejido de dolor- Todo bien.

Levantó su pulgar, medio temblando.

-¿Son novios?

Era una voz chillona, suave, pequeña. Los dos voltearon y se encontraron a dos pequeñas niñas.

-¿Ah? -Uzi empezó a colorarse- No, somos amigos -Sonrió nerviosa.

N solo asintió a lo que dijo Uzi, sonriendoles a los niños.

-¿Tendrá un bebé, señorita? -Preguntó una de las niñas- Mi mami se toca el estómago porque va a tener un bebé.

Dijo apuntando el estómago de Uzi, pues ella aún tenía su brazo cubriéndole.

-¡No! -negó nerviosa y levantó ambos brazos- ¿Lo ven? Solo me golpeé.

N miraba divertido la situación.

-Mi mami dice que las niñas se embarazan cuando tienen novio -Sonrió la otra niña.

Ambos adolescentes se miraron, luego regresaron a ver a las niñas. Una tenía trenzas y la otra coletas.

Para N era adorable, para Uzi abrumador.
Las niñas se sentaron.

-¿Son novios? -Volvieron a preguntar.