04| SIMPLEMENTE APRENDO RÁPIDO

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Shaenys después del incidente de Pozo Dragón no volvió a hablarse ni con su hermano menor ni con sus sobrinos. Unos por gastarle un broma a su hermano y el otro por no decir la verdad, con Aegon era distinto ya que no hablaban de por sí. Durante ese periodo de tiempo la princesa fue a entrenar una y otra vez con Sir Harwin que veía a la princesa muy concentrada y enfadada al mismo tiempo, el no preguntó no quería meterse en las cosas personales de la princesa, el se limitaba a lo que el rey le había mandado que aprendiera a luchar.

Shaenys mejoró con el tiempo y ya no se peleaba con los muñecos de entrenamiento. Se enfrentaba a Sir Harwin una y otra vez sin descanso, al final del entrenamiento el Sir estaba más cansado que ella y eso que tenía más experiencia.

Una mañana su padre le pidió que fuera a entrenar con sus hermanos y sus sobrinos para observarles, el rey estaba al tanto de lo ocurrido en Pozo Dragón pero no lo que pasó con la reina, Shaenys tampoco quería decírselo bastantes problemas tenia ya el rey con su salud, para cargar con los de una princesa.

Shaenys se acercó a Sir Harwin que estaba sonriendo viendo a los jóvenes Velaryon luchar entre ellos, muy orgulloso.

—Princesa Shaenys—la saludo haciendo una reverencia.

—Sir Harwin—lo saludo—Tenemos suficiente confianza no quiero que me haga un reverencia—Sir Harwin asintió—¿Podemos pelear?—pregunto ella.

—Por supuesto princesa, siempre es un honor luchar contra usted—dijo Sir Harwin sonriendo y ella rio por el comentario.

Ambos se dirigieron a una zona desocupada que nadie utilizaba en el entrenamiento y justo desde ahí el rey Viserys, su padre podía verla a la perfección pelear. Strong la pillo desprevenida y le arrebato la espalda de madera en menos de dos segundos, ella le sonrió y fue a por una que había detrás de ella. Comenzaron a luchar y chocar espadas una y otra vez Sir Harwin y Shaenys se habían acostumbrado a los movimientos del otro debido a los entrenos que ya sabían lo que el otro haría. Una vez que Sir Harwin quedó desarmado por la princesa ella le sonrió y miro con ilusión a su padre, que asintió orgulloso de hija.

—Es increíble lo bien que lucha, princesa Shaenys—comento Sir Harwin.

—Simplemente aprendo rápido—dijo ella mientras se dirigía a observar a sus sobrinos y hermanos.

Aegon intentaba montar un espectáculo pegando a su muñeco de entrenamiento con su espada de madera mientras que las sirvientas o doncellas pasaban al rededor del campo de entrenamiento para sonreírle y mirarle.

—Sabes que ellas te miran por respeto ¿verdad?—le dijo su hermana cortante. Parecía que Aegon quería desnudar a todas las mujeres del reino.

—Pues como deberías de mirarme tu a mi—dijo burlón—Cosa que no haces—continuo y se acercó a su hermana mayor—Y no se el porqué—le dijo y Shaenys rodo los ojos.

—Yo jamás te miraría como ellas te miran, Aegon—contesto ella.

—Lo harás, puedo esperar—dijo el mientras continuaba su entrenamiento.

—Aegon—lo llamo Sir Criston al ver al mayor de los varones distraído.

—Gane mi primer combate Sir Criston. Mi oponente suplico piedad—recordó el más joven al hombre.

—Ahora tiene un nuevo oponente, príncipe guerrero. Veamos si puede tocarme—dijo Sir Criston—Usted y su hermano—dijo señalando a Aemond.

Los dos príncipes atacaron con sus mayores habilidades en la lucha a su instructor, que evitaba cada movimiento como si nada. Shaenys se fijo en las habilidades de Sir Criston que no están nada mal, para su gusto.

BLUE BLOOD | Jacaerys VelaryonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora