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—Disculpa...¿estabas almorzando? —le preguntó Nanami notando que en la mesita del sofá había dos platos y un tazón

—Si... —le sonrió [T/N] inocentemente

—¿Estabas con alguien? —le preguntó Nanami curioso y [T/N] negó con la cabeza

—No, estoy sola... —dijo muy fuerte para que Sukuna la escuchara y Nanami frunció el ceño, había una sensación extraña...era como si hubiera una maldición cerca, una muy fuerte...pero no se veía nada y [T/N] le miraba con esa sonrisa inocente que por algún motivo desconocido lo dejaba aturdido...en realidad sí sabía muy bien el motivo...sólo no sabía si estaba preparado para aceptarlo...aunque luego de hablar con Ieiri y Gojo sería el idiota más grande de la historia si no aceptara el cómo se sentía...

—¿Que pasó Nanami-san? — le preguntó [T/N] viendo a Nanami, se veía de alguna forma un tanto extraño —¿Estas bien? — le pregunto preocupada inclinando su cabeza a un lado viéndolo atentamente

—B-bueno... —balbuceo Nanami nervioso, pasando una mano por su cabello.

Había ido a la tienda por impuso luego de una discusión que tuvo con Gojo.

La noche anterior y gracias a la conversación que tuvo con Ieiri pudo darse cuenta de que [T/N] si le gustaba aunque no sabía si estaba preparado para aceptar ese hecho...e Ieiri por lo que le conversó, sin querer, hizo que él pensara que Gojo también estaba enamorado de [T/N]...así que esa noche cuando fue por Gojo para encararlo y al no poder encontrarlo, se dio cuenta de algo... inesperadamente él era celoso...celoso e inseguro...nunca se había detenido a pensar o a auto inspeccionarse al respecto porque nunca tuvo la necesidad de hacerlo...pero el pensar en que Gojo había puesto su atención en [T/N] y que ella obviamente también se fijaría en Gojo si él le coqueteaba, le hacía hervir la sangre...entonces cayó en la cuenta de que por eso mismo él fue capaz de dejar a un lado sus preceptos morales sobre la privacidad y comenzó a revisar la conversación que ella y Haruki tenían en el teléfono...ahora todo encajaba a la perfección: por eso sonrió triunfal cuando se dio cuenta que el detective había visto que él y [T/N] iban juntos en el auto y su impulso de poner sus manos sobre los hombros de [T/N] cuando vieron al detective en su oficina...o su necesidad de siempre tener un roce casual con [T/N] cuando iban caminando en la calle...o esa sensación de molestia que sentía anoche al pensar que Gojo podía enamorarse de [T/N] y que ésta inevitablemente escogería a Gojo por sobre él...porque era obvio, Gojo era el hechicero más poderoso de todos los tiempos y además era muy atractivo. Las mujeres siempre le daban su número de teléfono o se lo pedían...podía tener a quien quisiera a sus pies...

Entonces a la mañana siguiente sí tuvo esa conversación con Gojo, lo encontró desayunando con Yuuji en el ala de la academia que estaba abandonada y en donde Gojo mantenía a Yuuji escondido. La conversación que ambos tuvieron fue la principal razón por la que él no fue en la mañana por su café y su baguette...y Nanami sintió un gran alivio al enterarse que Gojo no estaba interesado en [T/N], era otra mujer una de una chocolatería que estaba cerca de la tienda de [T/N]...pero Gojo no sólo le sonrió y le dijo que no le gustaba [T/N], también le hizo ver lo mismo que Ieiri pero fue mucho más directo que ella

—Si te gusta debes decirle...tienes que ser más directo e ir sin rodeos o si no, el detective se te adelantará—le dijo muy serio Gojo cruzándose de brazos y viéndolo con su mejor rostro de superioridad

Sweet OvensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora