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La alarma comenzó a sonar y la rutina de la semana comenzó. Lentamente se sentó en la cama, pero todo su cuerpo dolía...

—Uhg... —gimió [T/N] sin querer mientras se sobaba la espalda baja

—Cielo... ¿estás bien? —le preguntó Nanami mientras él la tomaba de la cintura y la jalaba para sí haciendo que se volviera a acostar a su lado, entonces [T/N] se acurrucó y dejó que esos brazos y piernas la envolvieran

—Me duele un poco el cuerpo... —le dijo [T/N] con la voz ronca

—¿Fui muy rudo? —le preguntó preocupado Nanami...el viernes en la noche [T/N] se había puesto su pijama, pero ya para la tarde del sábado se dieron cuenta que era mucho más cómodo permanecer desnudos...a [T/N] le había incomodado un poco al principio, pero Nanami se encargó de hacer que ella se sintiera muy cómoda consigo misma sin ropa y ahora...ahora disfrutaba del calor del torso desnudo de Nanami contra su espalda también desnuda

—No lo sé, amor... —murmuró [T/N], en serio no sabía si Nanami había sido muy rudo o no con ella...lo único que sabía era que habían momentos en que ella veía puntos de colores luego del orgasmo o que le daban ataques de risa sin saber por qué...y Nanami la miraba con una cara de lobo feroz en todo momento...eso y que estaba realmente cansada...no habían dormido lo suficiente y Nanami en parte había liberado su estrés de acompañar a Gojo durante todo el viernes en [T/N] —No creo... —agregó sonriendo [T/N] viéndolo de reojo, gesto a que Nanami le pareció muy sexy, pero tenía que contenerse...si o si hoy tenían que ir a la tienda y hacer su día como siempre...así que en vez de tirarse sobre [T/N] y hacerla suya nuevamente, comenzó a besarle el hombro delicadamente haciendo que [T/N] soltara suspiros

—Vamos a darnos un baño... —le dijo Nanami en un susurro al oído

—Vamos... —sonrió [T/N] cansada—Ahhhh—jadeó [T/N] al sentir que Nanami la tomaba en brazos y la llevaba al baño, la sentó en la tapa del retrete y comenzó a llenar la tina con agua tibia

—Cielo...si fui rudo...perdón... —se disculpó Nanami notando que [T/N] tenía muchas marcas en su cuerpo, mordiscos en sus muslos, marcas de chupetones en el cuello, pechos y muslos, marcas de dedos en casi todas partes y además ésta se veía muy cansada y pálida

—Yo...también fui muy brusca contigo... —le dijo [T/N] con un hilo de voz notando que Nanami tenía muchos rasguños muy feos en la espalda, costados y abdomen, unos mordiscos marcados en las clavículas y hombros, además de chupetones esparcidos por todas partes, incluso en la ingle, al ver la ingle con algunas marcas [T/N] se puso roja como tomate, realmente había hecho cosas muy pervertidas con Nanami...pero le encantaba

—Ah...no importa...me preocupas tú... —le dijo Nanami tomando el rostro de [T/N] con ambas manos y viéndola atentamente

—Estoy bien...se me pasará... —le sonrió [T/N] y le robó un beso en los labios Nanami le sonrió y luego de que la bañera estuviera con suficiente agua él se metió para luego ayudar a [T/N] a meterse.

Con mucho cuidado Nanami comenzó a bañar a su novia, primero humedeció su cuerpo y luego comenzó a tallarlo, lavó su cabello y le aplicó bálsamo, desenredó los nudos que se le habían formado y [T/N] hizo lo mismo con él...sin que él se lo pidiera, y eso le causó mucha ternura a Nanami, verla concentrada en bañarlo hacía que su corazón latiera rápidamente. Luego de que ambos se bañaran y se secaran Nanami la llevó a la cama nuevamente y comenzó en silencio a vestirla

Sweet OvensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora