Casandra

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Una vez fuera, el aire fresco fue un alivio para los pulmones después de tanto desinfectante. Y para la salud mental de Casandra y Nathan fue un bálsamo haber salido de ese calvario llamado hospital. No tendría ese nombre de no ser por ese ultimo encuentro tan prepotente.

Menudo imbécil, si bien ha tenido la mala suerte de enfrentarse a personas así (más de las que hubiera querido) en el ámbito profesional, no significa que este acostumbrada. Pero si se hacía más fácil lidiar con ese tipo de gente: prepotente, engreída, con aires de grandeza que por muy merecida que lo tuvieran no significa que dejen de tener educación. Por mas que Casandra ha sabido sobrellevarlos no significa que le guste.

Y en el caso de Brennan era peor, no entendía como resistía el impulso de romperles el cuello a tantos elitistas superficiales.

- Eso fue más sutil que otras veces. El luto lo estará ablandando al parecer – dijo Nathan irónicamente

- ¿Es peor que esto normalmente? – los tipos como el sí, veían la necesidad de recalcar su posición y más a los que consideraban amenazas para sus intereses.

Soltó un suspiro tortuoso – Nunca pensé que hubiera alguien que acabara con mi paciencia. Ni siquiera mis hermanos fueron tan insufribles.... Y quise cortarles la lengua más de una vez –

Si algo entendía Casandra era de hermanos insoportables. Lindsay no había sido la mejor al inicio (debía agradecerle que sus instintos asesinos se hallan fortalecido gracias a ella), incluso después de limar sus asperezas con la llegada de Daphne, no fue mucho mejor. Si bien se empezaron a comportar como personas civilizadas y llegar a ser ''amigas'', el ambiente siempre estaba tenso.

Daphne solía reírse y decirles que se eran muy similares, motivo por el cual razón no se aguantaban. Que eran muy obstinadas y siempre querían tener la razón en todo. Absurdo, porque las circunstancias siempre le daban la razón a Casandra.... Bueno .... Casi siempre.

A Daphne le daba igual, iba a su aire, le gustaba su posición de hermana menor mimada, malcriada y que siempre se sale con la suya. De cierta forma las tres se comportaron según sus roles impuestos indirectamente, podría ser el motivo por el cual a Lindsay le gustaba hacer todo por su cuenta y no rendirle explicaciones a Casandra, sería como ese hermano que no quiere tener por encima a nadie más.

Pero desgraciadamente no era el caso, Casandra era la mayor y ya sea por un rol o no ellas eran la responsabilidad de Casandra. Eran familia.

- Mis hermanas también me vuelven loca – de nuevo repaso lo que dijo Nathan – Espera ¿dijiste hermanos? ¿En plural? –

Nathan no desaceleró el paso de camino al auto – Si, tengo dos hermanos, Kim y Sage. Kim es el segundo y Sage es el tercero, es la molestia andante... En realidad, los dos son dos molestias andantes – quiso sonar molesto, pero solo sonó divertido

- Eso quiere decir que eres el mayor de los tres –

- Por unos cuantos años – interrumpió

- Y si ese Castiel es tu padre según tu.... Eso quiere decir que son como una especie de familia de asesinos a sueldo... No puede ser cierto, ¿sabes lo desquiciado que suena eso? – no pensó cuando lo dijo, lo cual le gano una risa un tanto fuerte de Nathan que la miraba incrédulo

- ¿Y sabes lo hipócrita que suenas ahora? Tú de todas las personas eres la que menos me puedes juzgar.

Cierto, de todas era que menos. Visto desde otro punto de vista la familia de Nathan era discreta al contrario de la de Casandra que salían todas las semanas en una revista diferente y eran personajes públicos. Pero, aunque sonara disparatado no había mejor camuflaje que ese: a plena vista, los peores depredadores se ocultan ante los ojos de los demás.

Fucked up Family: Red QueenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora