#4: Una Verdadera Broma Asesina

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—¡Esto no puede estar pasando!

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—¡Esto no puede estar pasando!

Entre gritos, Dick tomó una silla que se encontraba frente a la computadora para arrojarla a la pared contraria. Preso del estrés y la presión, el mayor de los compañeros del murciélago se sentía perdido en la oscuridad, sin saber que dirección tomar. Aquello lo estaba consumiendo. 

—Tranquilo, Dick —exclamó Tim Drake, aproximándose a su hermano mayor—. Ya los encontraremos.

—¿¡Cuando!? —gritó Grayson mientras se giraba con brusquedad, pero inmediatamente se quedó en silencio al entender lo que había hecho—. Perdón, Tim, pero esto me esta volviendo loco.

—Creo que ya deberíamos prepararnos para lo peor —exclamó Jason, ganándose la miradas de los presentes—. Debemos asumir que Bruce, Alfred, Bárbara e incluso Gordon ya están muertos.

Jason se puso a buscar algo en su chaqueta, observando como Dick se le aproximaba de forma notablemente hostil. Sin embargo, aquel que murio y resucito simplemente cerro los ojos epara esperar lo que ya sabia que ocurriria. Y de inmediato, Dick le conectó un demoledor derechazo que le aflojo varios dientes pero sin llegar a tirarlos. Jason cayó al suelo y apoyó sus brazos en este para no quedar completamente recostado, mientras escupía bastante sangre.

—Nunca vuelvas a decir eso —vociferó Dick, señalando a su hermano con el dedo—. Ellos están vivos, deben estarlo.

—¿Crees qué no quisiera creerlo? —preguntó Jason, sentándose en el suelo y agachando la mirada—. Pero no puedo. Tu ocúpate de tener esperanzas, yo seré realista —exclamó Todd mientras se empezaba a levantarse—. De todas formas, ¿por qué no llamas a los malditos Titanes o a la Justice League para ayudarnos?

—Ellos no están disponibles —dijo Grayson, dándole la espalda a Jason y caminando de regreso a la computadora—. Hay una guerra en el espacio entre los Red Lanterns y los Sinestro Corps. Los Green Lanterns están siendo superados, y llamaron a los héroes de la Tierra para que los ayuden. 

—Que basura —exclamó Jason—. ¿En qué carajos pensaban los guardianes al darle poder a un tipo llamado Atrocitus y a otro llamado Sinestro?

En un lugar que podría definirse como Infierno, las ataduras lastimaban la piel de Bruce. Sus músculos se estaban atrofiando al pasar tanto tiempo en una misma posición, y cada vez le era más difícil sentirlos o moverlos. Frente a él tenían un cristal como los de interrogatorio, permitiéndole ver lo que ocurría en el interior sin que ellos pudieran verlo a él. Dentro de aquél cuarto se encontraba Bárbara Gordón, más conocida como Batgirl. Su traje estaba desgarrado dejando ver la mayor parte de su cuerpo lleno de marcas y golpes. Por días, el que alguna vez fue considerado el hombre más peligroso del mundo tuvo que ver todo lo que Joker y sus secuaces le hacían. Impotente e incapaz de defender a su protegida, tuvo que soportar aquella tortura día y noche. Cada golpe, cada humillación, cada violación.Pero Bruce no había sido el único obligado a ver eso. James Gordón, el incorruptible comisionado de policía, también había sufrido la misma suerte. La diferencia es que Gordon tuvo que verlo desde el interior de la habitación, y soportar los insultos de los mismos criminales que ultrajaban a su hija. 

Batman: Ultima Risa (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora