El prado del olvido. ©️

Esa flor

— Aquí tienes. — Se esconde entre el gran ramo de flores que me trajo.-Te recuerdo que un trato es un trato, así que tómalas.

Me extiende el ramo de flores, para yo agarrarlo.

— Gracias, Son las más hermosas que he visto.

Le doy una sonrisa, mientras me embriago entre el dulce olor de los pétalos.

— Como todo buen observador, siempre te he traído las mejores. Pero déjame decirte algo. Encontrarlas no son fáciles, y tú diciéndome que siempre las vez.

— ¡Claro que las veo! En mi memoria.— le guiño un ojo.

— ¿Qué haré contigo realmente?

Se coloca su mano en la cabeza, como muestra de preocupación o mejor dicho, ser un caso perdido.

— Sé que son difíciles de conseguir, ¿pero sabes lo que simbolizan estás flores?

— Eh... No, nunca me lo he cuestionado. Sólo sé que son tus favoritas. Rosas azules.— Se acuesta en el césped.— Y sé que cuándo te las doy, tu corazón palpita.

— ¡Eso no es cierto!

— ¡Claro que si! Mira tu reacción.

Un día de estos, me sacará de mis canas, aunque lo que él dice no es una total mentira. Ya que soy feliz al ver estás flores.

— los poetas usaban esta flor para expresar un amor imposible.— Me siento en el césped y recuesto mi espalda en el tronco del árbol.— ¿Tú qué opinas sobre eso?

— Déjame pensar, mmmm. Creo que somos personas efímeras y por cobardía no hacemos lo que queremos.

— Tienes razón en lo que dices, tal vez yo sea una persona llena de cobardía.

Lo miro al rostro y le tomo de la mano, mirando hacia otro lado.

— Y yo ahora soy una persona efímera de esta vida Layla...

Nos quedamos callados durante un periodo de tiempo, cada uno tiene sus secretos en su interior, y para descifrarlos sólo tenemos que abrir nuestros corazones.

— Se hace tarde Damián, debería irme a casa.— Me levanto y quitó el polvo de mi ropa.— No quiero llegar tarde.

— Tranquila, yo comprendo. Me quedaré un rato más aquí.— Me mira con un rostro de melancolía.— ¿Volverás a visitarme?

— Creo que esa es una pregunta que no se hace.

Le doy un beso en la frente, lento pero lleno de amor.

— Después de todo, es tu lugar favorito...