Everything I wanted [ Secuela de A dream Synopsis ]

Capítulo. 5 To Build a home.

This is a place where I don't feel alone
This is a place where I feel at home'Cause, I built a home
For you
For me

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Algunas horas habían pasado desde aquella extraña conversación, todos se habían ido ya y en casa solo quedaban Alison y Alexander quienes se preparaban para ir a dormir, Allie estaba en el baño quitándose lo restante de su maquillaje mientras que Alexander se había recostado sobre la cama, mirando hacia la nada aún con ese extraño sentimiento pegado a su pecho, con aquellas imágenes extrañas aun quemándole las pupilas y ese miedo paralizante creciendo en su interior.

-Estoy rendida- dijo Allie saliendo del baño y caminando serena hasta la cama, dejando caer su cuerpo de inmediato sobre el mullido edredón.

-Ha sido un día largo- replicó él en tono serio.

-Muchísimo, Al, pero ciertamente ha sido uno bueno –

Allie se había acomodado sobre su lado de la cama, mirando fijo a Alexander quien aún tenía la mirada perdida en algún lugar de la habitación.

-Me alegra- respondió tosco

-¿Qué te pasa? ¿Te sientes mal? –

-No...estoy bien-

-Vamos...puedo verlo en tus ojos, Al...¿qué pasa? – su cuerpo se había incorporado y ahora se sentaba sobre la cama, mirándolo fijo, esperando por una respuesta.

-Nada, Alison...solo tengo sueño-

Su tono era hosco, fastidiado.

-¿Hay necesidad de hablarme así? – dijo ella desafiante

-Déjame en paz...solo quiero dormir-

Un suspiro fastidiado dejó los labios de Alison, ella odiaba tener que razonar con Alexander cuando sus emociones lo sobrepasaban, pero sabía que no había más que hacer, que dejarlo así solo haría que -lo que sea que agobiaba su mente- se hiciera más grande y que aquel malentendido que seguramente podía ser resuelto con una conversación incómoda y un beso, se convirtiera en una pelea interminable.

-Alex...- insistió en tono sereno -No voy a dormir si no me dices qué pasa, sabes que hablar es la única solución a lo que sea que pase dentro de esa cabecita tuya...-

El tono paciente y amoroso que ella usaba, esa luz cálida que sus ojos emanaban, y el calor de su cuerpo eran suficientes para causar que Alex se rindiera, para acabar con su acto de seriedad y abrirle la puerta a la mujer que más amaba en este mundo.

-Nada...es solo que...- comenzó dudoso, dejando salir un suspiro de sus labios rosados -A veces pienso mucho y lo sabes...-

-¿Qué ha sido esta vez? ¿El trabajo? ¿Peleaste con alguno de los chicos? ¿Tus papás se encuentran bien? –

-¿Prometes no molestarte? – preguntó él en tono inocente.

-Ehm...puedo intentar, pero sabes que no puedo prometer algo que no está en mi control...-

-Debes hacerlo o no te diré nada...-

-Alex...-

-Es tu decisión, Alison...-

-Dios, que terco eres...- dijo rodando los ojos fastidiada y enternecida -Prometo no molestarme-

Alex asintió y se acomodó sobre la cama para recargar su espalda sobre la cabecera, sus manos errantes jugaban con los cordones del pantalón de su pijama y sus ojos se cerraban como intentando evitar la realidad.