La vida de Oliver Jack

CAPITULO 35: CUANDO TODO TIENE QUE TERMINAR.

Cuando volví, Kaz estaba hablando con alguien más, alguien que tenía un olor muy conocido, era... El doctor Henry.
Entraron y en efecto, era él
H– Hola Jack–
J– Doctor Henry, ¿Que hace aquí?–
H– Al parecer todavía me recuerdas–
Trate de escapar de él pero estaba atado a la camilla y con mucho dolor en las costillas.
J– Kaz ayudame, te lo suplico por favor –
H– Espera afuera Kaz –
Cuando salió, cerró la puerta con seguro. Traía consigo una maleta, cuando la abrió, sacó un bozal.
H– No quiero que veas esto como venganza, lo que pasó está en el pasado, pero quiero que sepas que esto es una advertencia–
Estaba amarrado de las dos manos, no podía moverme.
Se acercó y me puso el bozal, el cual no podía ni abrir un poco la boca.
Después sacó una vara pasa corriente, la cual comúnmente se usa para torturar.
H– Solo relajate–
Su sonrisa era diabólica y sin ningún otro sentimiento más que de venganza.
Primero tomo la vara y comenzó a golpearme, golpes repetitivos en donde había sido operado y aunq puedo regenerarme, eso impidió que me regenerara, golpe tras golpe, sin parar. No entendía por qué.
No podía ni gritar por el bozal, golpe tras golpe, sin parar. Después de terminar con los golpes dijo.
H– No creas que he terminado. Descubrí que la única forma en la que se te puede controlar es con electricidad –
Abrió el canal eléctrico de la bara y la encajó en mi abdomen, después subió al cuello. Un gran dolor, ardor y terror.
De tanto sufrimiento, gritos, llanto, suplicaciones, paró los choques electrónicos, después me quitó el bozal. Mi boca estaba cubierta de sangre, había mordido tanto mi lengua que terminé perforandola.
Tomó un frasco de su maleta y guardo parte de mi sangre, fue cuando quise hacer algo. Mordí su mano, perforando con mis dientes filosos su piel. No podía abrir mi boca y, saco de uno de sus bolsillos una barita de metal puro, la puso sobre mi cuello, haciendo que lo soltase.
H– ¡Creo que apesar de esto no has aprendido!–
Me puso el metal en el cuello, haciendo que sangrara demasiado. Traté de soltarme o hacer algo, pero no podía, dolía mucho como para pensar en un plan. Ese dolor era el mismo que sentí al llegar a la ciudad de Lanttan.
Casi me desmayaba por tanto dolor, hasta que entró Kaz, gritó
K–¡Es suficiente, ya déjalo!–
Sacó al doctor de la habitación y se acercó para atenderme lo más pronto posible. Pero no pude y quedé sin fuerzas, me desmayé.

Después de casi tres horas aproximadamente, desperté y Kaz no estaba, al igual que las ataduras, me levanté rápido, me puse mi ropa y salí corriendo  con todas mis fuerzas de ese lugar.
Al salir pensé que no habría otra forma de escapar, a esepcion de destruir el campo, o hackeandolo, pero no tenía mi equipo para hacerlo. Al correr a uno de los bosque retirados, escuché unas voces, venían de cerca de una cueva. Me acerqué y salió un niño de, tal vez 3 años.
J–¿Estás perdido?–
V– ¿Policía?–
J–¿Policía? No, no soy un policía –
V– Venedic –
J–¿Así te llamas?–
V– Si–
J– ¿Hay alguien más contigo Venedic?–
V– Chi–
Tomó mi mano y me llevó más a dentro del bosque, dónde había una casa pequeña echa con madera. Al parecer es una familia.
V– Casa–
J– ¿Esta es tu casa?–
V– Chi–
J–¿Y quién más vive aquí?–
Escuché pasos detrás mío.
B–¡Suelta a mi hermano –
Me enderece y me di la vuelta. Eran otros tres niños.
J– Solo vine a ayudar–
B– ¡Lárgate de aquí!–
J– Está bien, ya me voy–
Venedic corrió a mí y me detuvo.
V– ¡No!, Gatito–
B– ¡Venedic, no sabemos si es malo!–
J– No soy malo, se los juro, acabo de escapar de un policía –
Jasen– Dejaremos que te quedes, pero queremos pruebas–
Barbara –¡¿Que?!–
Jasen– Recuerda que Venedic sabe que es verdad y que no–
Entonces es un telépata.
Jasen– Soy jasen, el mayor, ella es Bárbara, la pequeña es Millie –
Jack– Es un placer, yo soy Jack –
Venedic – Gatito–
Bárbara – no creo que quepamos todos en la casa–
Jasen– es cierto, deberíamos construir una nueva. Busquen ramas y hojas grandes –
Jack– Puedo construirla si gustan–
Barbara –¿Tu solo? Imposible –
Venedic – Gatito fuerte–
Dejaron que construyera la casa. Es una gran ventaja que pudiera manipular las plantas. Bajé el control del collar y con las pocas fuerzas que tenía, hice una cabaña de madera, plantas y rocas.
Jack– Listo–
No tenía muchas fuerzas ni para sostenerme en pié.
Jasen–¿Estás bien?–
Se acercó a mí a ayudarme, pero su olor hizo que viera su pasado.
"Había una hermosa familia, pero solo se veía por fuera, por dentro era un completo infierno, padres alcohólicos, crueles, abusadores. Jasen es el hermano mayor el cuál, maduró muy rápido, ya que él hacía todo el trabajo duro un la casa y sobretodo, cuidaba muy bien a sus dos hermanas. Un día el padre quizo abusar de Barbara, pero Jasen entró y lo detuvo a tiempo. No soportarían ni un día más viviendo con ellos, tomaron sus cosas, el dinero que ahorraron juntos y un arma del gabinete de su padre, para después dirijirse al bosque. Desde ese día, han sobrevivido aquí. Actualmente Jasen tiene 19 años, Barbara 15 años y Millie 7 años."
Jasen –¿Esta bien?–
Jack– Si, perdón–
Millie – ¡¡Eso fué increíble!!–
Entramos al casa, me recosté muy débil, pero no sabía por qué, siempre había hecho cosas grandes con las plantas. Fué cuando recordé que si Norbus no tenía fuerzas, no podría hacer nada de ésto. Necesitaba sangre.
Jack– iré a cazar, no tardo–
Jasen– Te acompañó, no se que tramaras y no te quitaré los ojos de encima–
Tomó un arma y nos fuimos.
Al encontrar un lago, sabía perfectamente que algunos siervos se detenían a beber agua. Y esperamos.
Trataba de buscar uno con el sentido del olfato, para adelantar el proceso de la cazeria, pero nada, estaba desesperado, sin fuerza no podré defenderme de lo que venga.
Jasen–¿Cuál es tu secreto?–
Jack– ¿A qué te refieres?–
Jaén– Venedic te aceptó al instante –
Jack– No se por qué –
Jasen– Venedic tiene la  habilidad de poder ver tu pasado, tu futuro y leer parte de tus pensamientos ¿Qué ocultas?–
Jack– No oculto nada y ya les dije que escapé, solo busco refugio, solo unos par de días hasta encontrar a mi amigo y poder escapar de este lugar–
Jasen– ¿Por qué quieres escapar?–
Jack– Porque quieren utilizarme y experimentarme–
Jasen– Demuestra que tan especial o peligroso eres–
Este niño si que desconfía, pero como juzgarlo, viene de una de las peores familias.
Jack– ¿Estás seguro?–
Jasen – Solo demuestralo–
Y justo a tiempo un siervo.
Solté el instinto de un cazador, garras, colmillos y mirada amenazante. Me acerqué sigilosamente al animal, para después abalanzarme contra él, despedazandolo y bebiendo lo más que pudiera parte de su sangre.
Jasen, levantó el arma contra mí.
Jasen–¿¡Qué es lo que eres!?–
Jack – Baja el arma, no te voy a atacar–
Jasen– Dime ¿qué eres?–
Jack – Dentro de mí, habita un demonio muy poderoso, pero mientras yo tenga el control no pasará nada malo –
Jasen– Es por eso que Venedic te aceptó –
Volvimos a la casa con el siervo.
Barbara cocinó. Cuando estábamos comiendo, Barbara se percató de la quemadura en mi cuello.
Barbara –¿Qué te pasó ahí?–
Jack– Fué un doctor de esos grupos de militares–
Barbara – ¿Y con qué fué?–
Jasen – Déjalo en paz–
Jack– No pasa nada. Fué con un pedazo de metal, de echo no fue lo único que me hizo, también me golpeó y electrocuto–
Jasen–¿Por eso escapaste?–
Jack– Así es, además necesito buscar a mi amigo–
Millie–¿Y en donde está?–
Jasen– A eso se refiere con buscar–
Yo sabía dónde podría estar, pero no podía ir sintiendome débil, necesitaría ayuda.
Barbara –¿De dónde eres?–
Jack– Soy de la ciudad de Lanttan–
Venedic – Ciudad grande–
Jack–¿La conocen?–
Jasen– Hemos querido ir, pero este lugar es un campo minado, nadie sale y nadie entra–
Jack– Podríamos hacer un trato–
Jasen–¿Que tipo de trato?–
Jack– Ustedes me ayudan a llegar a los cuartos de primeros auxilios para ayudar a mi amigo, en cambio, yo los llevaré a la ciudad, con una casa, dinero y comida–
Jasen– ¿Y que pasa si no cumples el trato?–
El collar tenía un botón de emergencia por si algo se sale de control, el cual al presionarlo lanzará un choque electrónico tan grande que podrá detener mi corazón por un minuto.
Jack– Este botón lo podrás usar a tu beneficio, hasta que los lleve a la ciudad, estando dentro me lo devolveran–
Barbara – Aceptamos el trato –

Al día siguiente preparamos armas, en caso de que algo salga mal.
Venedic – Gatito–
Jack – Hola pequeño –
Venedic es un niño muy tierno, pero igual con un pasado horrible...
Jasen– Estamos listos–
Jack – Bien, solo necesito que todos se tomen la mano–
No lo pensaron, Venedic sujetó mi mano, Jasen tomó mi otra mano, Barbara a jasen con Millie.
Nos llevaría más tiempo caminar hasta alla, pero con la oscuridad solo unos par de segundos. Zareg me enseñó a como pasar por la oscuridad y llegar a dónde quisiera.
Al llegar al punto acordado, entre a la sala de un hospital, en un cuarto donde estaba Zareg y, Kaz. No sabía que hacía con él. Estaban ellos dos solos, entré siendo lo más silencioso que pude, al llegar detrás de Kaz, le tapé la boca evitando que gritara y, así fue.
Kaz– Al fin, estás aquí, ¿Dónde estabas?–
Jack– No te importa. Zareg vámonos –
Zareg– ¿Cómo nos iremos, no creo que la oscuridad atraviese esa cosa?–
Jack– Tengo un plan, pero debemos irnos ya. ¿Puedes caminar?–
Zareg – Un poco–
Jack– No te preocupes, yo te cargo –
Se levantó y en efecto, no tenía mucha fuerza solo espero que se recupere.
Kaz– ¿Encontraste la forma de escapar?–
Jack– Si, y si quieres escapar de aquí es hora de irnos–
Kaz– Vámonos de aquí –
Ya íbamos a saltar la oscuridad, cuando entraron muchos guardias y uno de ellos era el doctor Henry.
Henry – Jack, al fin te encuentro, al parecer ya viste que tu amigo está bien–
Jack– No se atreva a acercarce–
Henry – Hijo ¿Por qué no les enseñas su nueva habitación?–
¿¡Hijo!? ¡¡¿Kaz es su hijo?!!
Jack –¿¡Hijo!?–
Kaz– El doctor Henry es mi padre–
No podía creerlo, por eso no hizo nada cuando me golpeó.
Jack– O estás con él o conmigo, tu decides–
Kaz– Vámonos de este infierno –
Soltó una granada y Zareg nos llevó junto a Jasen y los demás. El plan salió prefecto. Sabía que me estaba escuchando.
Hagarramos nuestras cosas y nos fuimos a la salida de la ciudad, dónde el campo soltaba las cargas eléctricas más fuertes de la zona.
Jasen– ¿Este por qué viene?–
Jack– Nos ayudará–
Jasen– Bien, empieza ya–
El plan era, quitarme el collar y Norbus se encargaría de romper el campo con el poder de la gran maldad de contenía está ciudad. Jasen, Zareg y Barbara, harán que pare si llegara a salirme de control.
Al quitarme el collar, Norbus empezó a hacer el trabajo, era una sensación fuera de lo común, el sonido de su poder, sonaba como una canción,pero después, todo empeoró, llegaron el ejército y lanzaron una red eléctrica, ninguno de los dos resistía lo choque eléctricos. Ambos nos desplomamos, pero tratamos de seguir, un trabajo fuerte en equipo. Tomamos todas nuestras fuerzas y seguimos, mientras los demás pelaban contra ellos. Toda contra todos pero, nadie se percató del doctor Henry, llegó con nosotros e inyectó un tranquilizante, pensando en que parariamos, pero no fue así, el tranquilizante hizo que perdiéramos el control, los demás demonios tomaron parte del control, haciendo un gran caos, pero una de las ventajas fué que logramos destruir el campo.
Mi cuerpo cambió demasiado, mi manos, eran enorme garras de color negro, con oscuridad en ellas. En mi espalda, tenía, oscuridad como si fueran tentáculos, atacando a todos. No podía ver bien, las personas parecían luces blancas, los alrededores eran oscuros.
Zareg corrió hacia mí, colocarme el collar, haciendo que todo empezará a volver a ser como antes.
Pero fue entonces cuando llegaron las naves de Lanttan, con mis compañeros, con Matthew, Cody. Estaban a salvo todo este tiempo.
Bajaron cinco naves repletas de soldados armados. Una nave de emergencias, bajó a nuestro recate, pues había sufrido de varias heridas por las "sombras", por la electricidad, quemaduras. Matthew fué quién me atendió, quería besarlo, ponerme feliz, pero apenas podía respirar, me dolía el pecho, la cabeza y al respirar. Era el peor dolor. Aunque no duró mucho tiempo, pues fué una curación casi instantánea. Recupere fuerzas para poder impedir que estuvieran a Kaz, pues al final nos ayudó. Al explicarlo con las pocas fuerzas que tenía, comprendieron, al cuál lo unieron a nosotros.
Después de todo eso. Solo recuerdo que tomé un arma y maté al doctor Henry, después, ya no hay nada.