𝐏𝐒𝐘𝐂𝐇𝐈𝐀𝐓𝐑𝐈𝐂 || @sipelotuda
dónde ____ encuentra todos los días a un chico en el hospital psiquiátrico donde está internada y éste le parece extrañamente familiar.
"Déjame entender el porqué cada vez que nos vemos siento que se acaba el ti...
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O4. Four. 20.03.20 —would you like to enter to 'Parar'? > yes no
Técnicamente no estaba permitido salir de las habitaciones después de las 22:00, algo relativamente temprano para mi gusto, pues mi insomnio me imposibilitaba dormir con normalidad; sin embargo no había puertas en las habitaciones por seguridad, así que fácilmente podrías salir de ellas en cualquier momento.
Todo era muy confuso para mí. Me sentía observada y luego me encontraba con el chico de cabello negro, ya sea en mi mente o en persona.
Ya era frecuente verlo por ahí pero al mismo tiempo extraño... Su persona era extraña.
Por mi mente cruzó la idea de ir a la biblioteca, la cuál descarte inmediatamente, pues ésta sí tenía puerta, por lo que sería difícil acceder a ella.
Solía divagar entre los pasillos cuando no podía dormir, todo se veía muy tranquilo... aunque algo tétrico por la oscuridad de la noche y –a final de cuentas– estaba en un hospital psiquiátrico.
—No puede ser —susurre cuando escuché un tarareo tranquilo salir de la voz de un chico—. ¡Tiene que ser una broma!
—Che, ¿qué onda? —Un chico saludo alegre cuando nuestras miradas se cruzaron... Sí, era el mismo de siempre.
—Oye —empecé, me sentía algo nerviosa, por lo que mis pupilas se movían escaneando todo el pasillo a gran velocidad—... Quiero dejar de verte.
—¿Eh?
—Sí... Es raro; no sé bien quién eres, pero me resulta incómodo verte en todos lados, incluso en mi imaginación y sueños —¿Tal vez me estaba volviendo loca?
—Si te tranquiliza no soy ningún psicópata —acotó—, lo que sí me parece curioso es lo de los sueños —Me dió la razón.
—¿Te conozco? Si te sueño es por algo
—No sé flaca, muchos me conocen —Egocéntrico.
—Es jodidamente molesto lo que haces —suspiré.
—¿Lo qué hago?
—¿Crees que no me doy cuenta de lo qué haces?
—Yo no hago nada, pará flaca —soltó, su voz se empezaba a escuchar algo seca, más gruesa que antes.
—Sólo deja de seguirme y mirarme cada vez que me ves, es algo raro —pronuncié en un susurro.
—¿por qué seguías mi mirada entonces? Sólo pudiste haberla ignorado —sonreí, pero no era una sonrisa sincera obviamente, era de sarcasmo y cansancio.
—Si tu ves a alguien mirándote cada vez que te presentas en un lugar dónde está esa persona ¿no crees que la mirarías tratando de descubrir que esconde?
—¿Vos pensás que escondo algo?
—Tal vez. ¿Por qué sos tan familiar para mí, pero no puedo recordarte?
