High School DxD: El Monarca De La Destrucción.(2)

310 capitulo 310

Mientras Jeanne, Martha, Marie y ahora Georgios evacuaban a los civiles y se preparaban para regresar a los demás, el grupo de Kira preparaba un lugar para esperarlos.

Y lo más sorprendente fue quién estaba con Kira, Ritsuka, Mash, Amadeus y Siegfried.

"¿Por qué estás aquí?" Mash preguntó mientras se giraba para ver a Kiyohime y Elisabeth con ellos.

Kiyohime estaba sentada junto a Ritsuka mientras Elisabeth le hacía una mueca al Berserker, justo cuando parecía estar tratando de mantenerse lo más lejos posible de Kira.

"¿Hay algún problema?" Elisabeth preguntó levantando una ceja.

"¿No apruebas nuestra presencia aquí? Estamos dispuestos a ayudarte en el combate" dijo Kiyohime mientras sostenía su abanico.

"Bueno, eso es algo por lo que estar agradecido, pero..." Mash se movió, no le gustaba lo cerca que estaba la Criada Berserker de Ritsuka.

Al ver esto, Kiyohime sonrió y se volvió hacia Fujimaru.

"Por cierto Maestro..."

"¿Quién? ¿Yo?" Ritsuka preguntó sorprendido, porque nunca antes había firmado un contrato con el Servant japonés.

"Por supuesto que tú. Aunque es temporal, ¿puedes firmar un contrato conmigo? Con estirar el dedo meñique es suficiente", dijo Kiyohime mientras Ritsuka finalmente lo hacía.

"Esta es una promesa mínima, si mientes, te haré tragar mil agujas..." mientras estiraba su dedo meñique, Kiyohime le dio una sonrisa aterradoramente dulce a Ritsuka que tenía escalofríos corriendo por su espalda.

"¡Eso completa el contrato! Solo para que lo sepas... Realmente te haré tragar mil agujas si mientes. ¿Está claro?"

"Claro como el cristal" habló Ritsuka sin tratar de tartamudear.

Intentó buscar ayuda en cualquiera de los otros Sirvientes, pero todos lo ignoraron, incluso Mash, que se retorció.

"Por favor, cuídame de ahora en adelante" dijo el Servant Berserker con una sonrisa, y Ritsuka también sonrió débilmente al sentir que el contrato estaba completo.

"... Hmph. No me importaría ayudarte con eso, cachorro" dijo Elisabeth resoplando.

"Caramba, Elisabeth, llamar a mi amor Cachorro es un insulto", dijo Kiyohime mientras un aura negra comenzaba a abandonar su cuerpo.

"... ¿Acabas de cambiar una palabra ridícula? Bueno, no me importa. No soy un dragón barato. ¡Algún día encontraré un Maestro extra especial!" dijo la Sierva completamente determinada.

"Oh, entonces el cuerno en tu cabeza no es lo único torcido. Buscando un sueño imposible... ¿Tu cabeza está bien?" Kiyohime dijo sonriendo con picardía.

"¡No es un sueño imposible! ¡Es convicción! ¡Estoy convencido de ello! ¡Un día conoceré a un Maestro que es de mi agrado y que me amará!"

"Sí, sí, en tu mente es solo otro día sin nubes"

Mientras las dos Criadas volvían a hablar, Kira se acercó a Siegfried y captó su atención, con un asentimiento de su parte, ambas se dirigieron a una parte más alejada del lugar.

"Creo que podemos hablar ahora" dijo Kira, ya estaban un poco lejos de los demás.

"Sí, nuestro grupo es un poco... animado" estuvo de acuerdo el Dragon Slayer.

"Entonces, ¿puedes explicarme cómo me recuerdas?" preguntó Kira cruzando los brazos, "Un espíritu heroico no debería retener sus recuerdos de otra guerra"

"Yo tampoco lo sé, eso es lo que suele ocurrir, pero de alguna manera, te recuerdo" dijo Siegfried en voz baja.

Incluso él no sabía por qué recordaba los eventos de esa Guerra del Santo Grial, solo recordaba.

"Aún así, solo nos vimos una vez durante esa Guerra, pero pareces saber mucho sobre mí" dijo Kira con curiosidad.

La única vez que conoció a Siegfried fue cuando éste interrumpió su batalla contra Karna, ya que después Siegfried entregó su corazón para salvar al homúnculo Sieg.

"No sé por qué, pero poseo recuerdos del homúnculo que salvé, o más bien Sieg, así que te recuerdo bastante durante esa Guerra" explicó Siegfried.

Kira asintió, el evento de un Servant que literalmente otorga su corazón a otra persona nunca había ocurrido así antes, y la conexión entre Sieg y Siegfried incluso se extendió al Trono de los Héroes. Si consideras eso, es posible que tuviera parte de los recuerdos de Sieg.

"Pero, déjame preguntarte, ¿por qué no apagaste todo esto y golpeaste a Jeanne Alter?" preguntó Siegfried con seriedad.

Debido a los recuerdos de Sieg, el Dragon Slayer sabía de las capacidades del hombre frente a él, de cómo terminó la Guerra del Santo Grial, de haber convocado a un dragón gigantesco que superaba a Fafnir y mucho más.

Para un hombre así, derrotar a la Bruja Dragón sería algo sencillo.

"¿Por qué es algo que Jeanne debe hacer? Incluso si puedo terminar con todo, cuidar de Jeanne Alter es su trabajo, solo la ayudaré" dijo Kira cruzando los brazos.

"Entiendo... incluso después del final de la Guerra, sigues siendo leal a Gobernante, tu honor es encomiable", dijo Siegfried con sumo respeto.

"Así que quiero preguntarte una cosa; cuando ataquemos, me encargaré de los Wyverns, y me gustaría que te encargues de Fafnir", preguntó Siegfried.

Kira solo parecía divertida, "¿Qué pasa, Dragon Slayer le tiene miedo a un dragón?"

"Para ser honesto..." Siegfried parecía estar avergonzado, "No sé cómo gané esa vez"

"¿Qué?" incluso Kira parpadeó sorprendida por eso.

"Solo hay una cosa inscrita en mi memoria. Mi victoria no era segura. Fue una única y pequeña oportunidad, rodeada de un millón de derrotas. Planeé cuidadosamente, me moví con audacia, mantuve una perspectiva amplia y me concentré profundamente en un solo punto, No recuerdo nada más allá de eso", dijo Siegfried encogiéndose de hombros.

Kira parpadeó ante el hecho de que el hombre frente a él acababa de admitir que mató a un dragón por pura suerte, ¡y su suerte era de rango E!

"Además... estoy seguro de que posees algo mejor para lidiar con Fafnir" dijo el Dragon Slayer en voz baja.

Kira se quedó mirando por unos momentos antes de parpadear ligeramente sorprendida y asentir.

"¿Hablas de eso? Muy bien, entonces me encargaré de Fafnir" dijo Kira mientras se preparaba para regresar "Vamos, Jeanne debería estar aquí pronto"

Con un asentimiento de Siegfried, ambos regresaron al campamento.