| Don't blame me | Sanzu Haruchiyo | +18 (Terminada)

Dieciocho

Sanzu me sostuvo con fuerza entre sus brazos mientras el ascensor de Bonten nos llevaba hacia arriba, un viaje que se me hizo interminable, pero estar entre sus brazos se sentía tan cálido y familiar...

No te duermas- pidió cuando cerré mis ojos

Estoy despierta- susurré apoyando mi mejilla en su pecho

¿Por qué sonríes así?- preguntó

Solo estoy recordando algo- abrí lentamente mis ojos para observarlo directamente a los ojos- pensar en eso me hace feliz y el dolor que siento disminuye

¿En qué piensas?- levantó una ceja

Es un secreto- sonreí aún más hundiendo mi rostro en su pecho

No le diría lo que pasaba por mi mente en esos momentos, porque era vergonzoso, pero me había hecho recordar a nuestra primera noche juntos, ese día había sido la primera vez que estuve entre sus brazos, y aunque no fue para nada amable conmigo a pesar de ser virgen, me había sentido bien, contenida y segura, tal y como me estaba haciendo sentir en esos momentos

Cerré mis ojos escuchando los latidos de su corazón y me concentré tanto en eso que no me di cuenta de cuando bajamos del ascensor ni que había comenzado a caminar

¿Dónde está el doctor?- su voz me hizo abrir mis ojos dándome cuenta que estábamos entrando a la sala donde todo el alto mando de Bonten se encontraba bebiendo

¿Qué fue lo que...?- Mikey detuvo su oración al verme en sus brazos- ¿Hana?

¿¡Qué demonios le hiciste!?- gritó Rindou corriendo hacia nosotros

Él no me hizo nada- dije rápidamente

¿Qué mierda pasó, Sanzu?- mi padre caminó hacia nosotros para sacarme de sus brazos- ey mocosa... el doctor te revisará

Estoy bien, no es nada- afirmé cuando me dejó con cuidado en uno de los sofás y un hombre bastante anciano se acercó a mi

Veo mucha sangre- comentó el hombre moviendo un poco mi blusa- pero no heridas

Nadie me tocó- dije orgullosa y gemí cuando rozó mi hombro

Necesito que te quites la camisa- pidió

Abrí mi camisa dejando una blusa de tirantes puesta y apretó sus labios al ver mi hombro, el cual tocó haciéndome quejar

¿Qué demonios sucedió?- los gritos de Rindou, Ran y Mikey se escuchaban en toda la sala mientras sacudían a Sanzu de un lado hacia el otro y él se dejaba hacer

No fue su culpa- dije molesta- ya dejen de agredirlo, solo me golpeé el hombro

No está roto- negó el doctor apretando mi hombro y grité cuando hizo un movimiento fuerte- solo estaba salido de lugar, ya está, solo tendrá que mantenerlo sin mover por unos días

Maldito idiota- lo miré furiosa- cuando me recupere patearé sus bolas

Vamos, vayamos a tu habitación- Rindou apoyó su mano en mi espalda baja y miré a Mikey y Ran que hablaban con Sanzu- no te preocupes por él

Me caí y me golpeé el hombro- dije llamando la atención de ellos tres- Sanzu no me hizo nada, y no resulté herida por un descuido suyo, fue mío, mi culpa completamente, así que no lo regañen ni nada de eso, él me trajo aquí cargada en sus brazos aguantando mis quejidos todo el viaje aún sin tener la culpa de nada

Hanaku...- susurró el pelirrosa

Gracias- sonreí en su dirección antes de salir de la sala junto a Rindou que no dijo nada hasta que llegamos a mi habitación