| Don't blame me | Sanzu Haruchiyo | +18 (Terminada)

Seis

Amor...

No sabía nada sobre ello, el único amor que había experimentado en toda mi vida había sido el de mi madre, un amor puro y sincero, pero gracias a Rindou y Mikey estaba conociendo otro tipo de amor, uno que había añorado toda mi vida, uno que me hubiera gustado tener desde niña, el de un padre, porque sabía que ninguno de ellos era mi verdadero padre, pero como me cuidaban, protegían y consentían, era como se comportaba un padre ¿Verdad? Al menos así siempre se habían comportado los padres de mis compañeros de la escuela cuando iba a esta, era el tipo de cariño que siempre había deseado tener y nunca lo había conseguido

Con ayuda de Rindou y Mikey me mantuve lejos de Sanzu y de mi padre, esos dos eran lo peor que me había pasado en la vida, sobre todo mi progenitor, porque cuando nos cruzábamos siempre hacia comentarios desagradables, el pelirrosa por su parte solo me ignoraba, y aunque me dolía su trato, era mejor que el que me daba mi propio padre...

Me encontraba sentada en la oficina de Mikey leyendo unos contratos que Koko había preparado para mi bar y necesitaba que lo leyera y firmara, pero aunque sabía sobre bares y todo lo relacionado a ellos, me alegraba tener al líder a mi lado ayudándome con ello, porque sinceramente me ponía un poco nerviosa tomar alguna decisión que perjudicara a mi bar o incluso a Bonten.

Pequeña- levanté mi mirada hacia el albino- deberías descansar un poco, ¿Por qué no vas a tomar un té?

Pero no terminé de leer esto- hice una mueca

Yo lo leeré, ve- pidió- y si ves a Sanzu, dile por favor que venga

Lo iré a buscar- asentí

No, no hace falta, solo si lo ves, igual le mandaré mensaje, aunque no me contesta y no sé qué demonios estará haciendo- bufó

De acuerdo, volveré en unos minutos- sonreí en su dirección antes de salir de su oficina

Comencé a caminar hacia el ascensor, aunque me desvié inconscientemente hacia la oficina del pelirrosa, pero me detuve al acercarme y escuchar cosas cayéndose dentro ¿Debía acercarme? ¿Y si estaba enojado y lo descargaba contra mí?

Era mi oportunidad para verlo, así que la aprovecharía, después de todo tenía la excusa perfecta, Mikey lo buscaba, y para él, el albino era una de las cosas más importantes ¿Verdad?

Mordí mi labio nerviosa, pero cuando iba a dar un paso hacia la puerta la vi abrirse dejando salir a una rubia despampanante arreglando su ropa y murmurando algo con rostro confundido mientras Sanzu salía detrás de ella acomodando su camisa y se detuvo al verme

Vaya... eso no me lo había esperado, pero no debería sorprenderme ¿Verdad? Rindou y Mikey me habían dicho que él era un mujeriego

Desvié rápidamente la mirada y apreté mis puños a ambos lados de mi cuerpo ¿Por qué dolía de esa manera? Él no era nada mío, no debía dolerme

¿Qué haces aquí?- frunció el ceño y abrí mi boca para hablar pero las palabras no salían, no podía decir lo que quería o terminaría llorando- ¡Habla de una vez niña!

Me sobresalté ante su grito y negué retrocediendo hasta salir prácticamente corriendo de allí, ignorando por completo sus gritos

No me importó alejarme del ascensor ni que me estuviera llamando, solo quería alejarme de él lo más rápido posible, así que corrí hasta que al girar en uno de los pasillos mi cuerpo comenzó a temblar y me apoyé contra la pared deslizándome por ella hasta el suelo

¿Por qué? ¿Por qué ella y no yo? ¿Qué tenía ella de especial? ¿Era porque era rubia? ¿Por qué tenía más pechos que yo? ¿Por qué era más alta y se vestía mejor? ¿Por qué él seguía buscando a otras mujeres y me ignoraba por completo? ¿Acaso no era suficiente?