Luna Menguante

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Sayuri

Al parecer me había salvado de romperme el brazo en la caída, sin embargo aun tenia que cuidarlo si no quería tener problemas con que empeorará

Mi madre me dio un par de sermones sobre que tener el teléfono en la mano y estarlo viendo por tanto rato no era bueno y por eso pasaban los accidentes, ni siquiera lo tenía en la mano, bueno si lo tenía, el caso es que lo estaba guardando en el bolsillo de mi pantalón y no, no escuche el ruido del motor en primera soy algo despistada y en segunda también estoy algo sorda

Si, fue mi culpa pero me desconecto del mundo cuando pienso demasiado en las cosas, y si, tenía que ver con el chico de la mañana koga, pero no podía evitarlo esos ojos eran imposibles de olvidar y su sonrisa, otra vez me estoy llendo por las ramas

El caso es que tengan mucho cuidado al cruzar la calle y no se pierdan en su mente solo para recordar algo

- Sayuri te e dicho mil veces que no camines por la calle sin antes ver por ambos lados, niña siempre te lo repito

- Lo siento, fue un accidente, se me pasó

- Niña que no entiendes que pudiste a ver muerto, por suerte saltaste justo a tiempo - si, le había contado la verdad a mi madre o bueno gran parte de la historia

- Si, tranquilizate tendré más cuidado, lo prometo - sonreí pero mi madre no me crello mucho por me miró espectante así que gire mi vista a otro lado

Y ahí termino la conversación, una vez llegamos a casa fui a mi habitación y termine los deberes qué había dejado suspendidos para dar un pequeño paseo, una vez los termine fui a dormir había sido un día cansado

(.....)

Había llegado a la universidad y no veía a mucha gente, era algo extraño ayer había un montón de gente perdida por los pasillos y ahora todo se encontraba en silencio, seguí caminando al aula y habían un par de personas, me senté en la misma silla qué el día anterior y como no había mucho que hacer saque mi celular y los desbloquee

Fui directos a mi página de libros play libros y seleccione la historia que estaba apuntó de terminar solo me faltaba cuarenta y cinco páginas para terminarlo. Era una historia de amor entre una bruja y un cazador de brujas, me gustó mucho el desarrollo qué tuvieron como pareja y solo podía pensar en que momento me sucedería eso, claro estaba qué nunca a menos que los científicos idearan la manera de transportarte a un libro

Estaba tan pendiente de mi lectura qué cuando mire a un lado koga esta ahí con una sonrisa ladina, parpade y luego apague mi celular

- Hola - fue lo único que salió de mi boca

- Uhm - se limitó a asentir con la cabeza y luego dirigió su mirada a mi brazo, bueno a mi antebrazo qué era el que estaba en recuperación - veo que fue algo grave

- Para nada, los doctores dijeron que lo tuviera en reposo durante un par de semanas - dije moviendo un poco el brazo - estoy bien e pasado por peores cosas - el me miró por un instante, como si me estuviera escaneando

- En serio, lo siento - sonreí y una idea paso por mi mente

- Si lo sientes tanto, por que no me invitas el almuerzo - sugería alzando los hombros y lo mire de reojo

- De acuerdo - tomo una pausa - pero iremos fuera del campus, odio ir a la cafetería de aquí - me quede un momento en shock, esto más que un almuerzo parecía como si estuviera invitándome a salir, claro que no era su intención por que se veía muy calmado cuando lo dijo pero no pudo evitar que en mi mente empezará a formar ideas

- Suena bien -

- Esperame en el estacionamiento - fue su única frase y después de eso el profesor entro en el aula, para ser un chico me dejaba bastante desconcertada, actúa de manera inpredecible

(...)

Estaba en el baño colocando bien la cinta de mi cabello, era difícil atarlo cuando solo una de tus manos estaba en funciones, por el espejo vi a una chica salir por uno de los cubículos tenía un traje de enfermera y lucia su cabello negro azabache suelto, era bastante linda, sus facciones remarcadas eran hermosas

Mire mi reflejo, comparada conmigo lo único especial que tenia eran mis ojos grises, se supone que solo pequeñas partes de ña población tenían de ese color los ojos

- ¿Necesitas ayuda? - gire a ver a la chica, tenía un tono dulce y amigable, mire como se secaba las manos con un papel marrón, supongo de los de la maquina dispensadora de papel

Asentí despacio y forme una pequeña sonrisa, extendí mi mano hacia ella donde tenia el moño, era color turquesa con motas blancas

- Gracias, no es fácil con la mano herida - dije alzando mi brazo, ella se limitó a asentir

- Bueno fue una suerte que tu brazo no este enllesado o sería más complicado el hacer las cosas, ¿Como te va sin el lleso?

- Bastante bien, me gusta estar menos apretada y ver el lleso todo el tiempo sería molesto - dije, la mire por el espejo pero ella seguía acomodando mis mechones - Soy Sayuri Oda por sierto, ¿Como te llamas?

- Soy Kagome Higurashi - dijo y ato mi cabello con el moño - listo, a decir verdad quedo bastante bien - asentí dándole la razón

- Gracias por la ayuda - diciendo eso salí del baño y camine al estacionamiento donde divice a koga frente a una motocicleta, pude reconocer que era de él, nunca olvidaría el hecho de que casi me mata con ella

- Llegaste - pronunció el y guardo su celular - pensé que tardarías un poco más

- ¿Esperas a alguien ademas de mi? - el se mantuvo en silencio y luego negó con la cabeza

- No, solo pensé que tal vez encontraría a alguien por aquí - a pesar que lo estaba diciendo como si nada su tono denotaba incomodidad, mire a los lados pero no divice nada, sin embargo asta yo sabía cuándo detener mi tren

- Koga, será mejor que dejemos esto para otro día, creo que no somos lo suficientemente amigos como para ir de un lado al otro, te veré después del descanso - alse mi mano y di media vuelta, no escuche alguna esclamacion o palabra, así que supuse que lo había hecho bien, darle espacio a una persona también es bueno