Luna Menguante

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Koga

Para ser una chica con un cuerpo atlético, no pesaba casi nada, incluso Ginta era más pesado y era bastante menudo, aclaro que lo llevaba en la espalda y no en brazos

- No entiendo por que a la gente le gusta conducir de esa forma, mi hermano siempre lo hace cuando esta enojado - volteo a verme y yo seguí mirando al frente - ¿Te paso algo, una mala tarde? - tomo una pausa - no es por ser entrometida, pero te aseguro que conduciendo de esa manera no creo que resuelvas los problema - la mire de reojo, solté una risa

- Ja, Oda no creo que me conozcas lo suficiente para saber si mis problemas se solucionas o no se solucionan de esa manera - solté secamente

- Tienes razón, pero aún así me preocupo por la gente de mi entorno, siento las vibras de la gente y la tuya es bastante cambiante e inestable, molesta a mis vibras - aun que sonaba sería no pude evitar reírme

- ¿De que estas hablando? ¿Vibras?, eres algun tipo de hippie o algo así - ella me miró sería y soltó un bufido

- No soy nada de eso, pero si soy bastante perceptiva con las cosas, no me gusta que las personas que no me conocen hablen así de mi - fue como si me hubiera dado una bofetada con mis propias palabras

- Vaya y pensar que parecías más tímida qué temeraria - ella permaneció tranquila

- La verdad soy más de palabras que de golpes, tal vez si sea una hippie, pero por lo menos acepto que lo soy y no reullo de ello - eso fue como un segundo golpe

No tenía la necesidad de contarle mi vida por muy convincente qué fuera y encantará con sus palabras no tenía ganas de contarle mi vida, sin embargo lo hice, tal vez lo hice por el hecho de que no podía hablar de estas cosas con Kagome o Ginta e incluso Hakakku, para ellos era lo suficientemente fuerte o lo suficientemente terco para hablar sobre este tipo de cosas a ellos

- Uhm, tuve un mal día, por eso es que tome la motocicleta - alze los hombros - a veces las cosas malas pueden restar importancia a las cosas que me suceden, es más fácil que hablar

Estuvo unos instantes en silencio y no faltaba mucho para que llegáramos al hospital, solo teníamos que terminas esta manzana y cruzar la calle

- Koga hasta los chicos necesitan hablar de que les molesta, no solo puedes dejarlo irse y ya, en algún momento toda esa frustración regresará a ti y será más doloroso de sobrellevar - suspiro - se que nos acabamos de conocer hoy pero si necesitas alguna persona o amiga para desahogarte puedes hablarme, puedo ser uno de tus pilares - giro su mirada hacia mi y al momento que su pelo se movió por el viento me llego su olor a sitricos - puedo ser tu amiga de confiansa o incluso puedo ser solo una compañía ya sabes sin hablar y todo eso

Su mirada era sincera, mire a un lado y luego fige mi vista al frente

- Lo pensaré, pero gracias Oda -

- No hay problema - con esas últimas palabras cruzamos las puertas del hospital

(...)

Una vez llegamos al hospital unas enfermeras se la llevaron hacia alguna habitación y llamaron a su madre, claramente espere a que ella llegara, estuve media hora esperando cunado cruzó la puerta y empezó a gritar por su hija, solo pude escuchar fracmentos del estado de Oda

- Sayuri Oda esta bien, solo tiene unos leves rasguños en la mejilla derecha y el brazo izquierdo, además de que tuvo un lebe esguince en el brazo

Claro que me sentía culpable, ni siquiera había conocido bien a la chica y estuve apuntó de matar la y para ponerlo aun peor ella se había llenado de valor para hablar sinceramente conmigo, realmente este no era para nada mi día.

Después de escuchar el diagnóstico camine de regreso a donde deje mi motocicleta y fui a casa

Ni siquiera había cruzado el umbral de la puerta cuando mi madre apareció por la puerta de la sala con el ceño fruncido y me miraba seriamente

- Buenas noches - fue lo único que pude pronunciar

- ¿Buenas noches?, en serio koga, no puedo creer que hayas llegado tan tarde, había planeado citas para ti, todas esas chicas morían de ganas por hablar contigo - me quede pasmado, mi madre nunca había hecho algo como eso, a pesar de todo nunca había cruzado esa línea

- ¿Chicas? - alce una ceja - madre ya te e dicho que estoy bien solo

- Silencio, mi hijo no será un soltero para siempre, no puedes encapricharte por una chica koga, eres muy bueno para quedar de segundo, mi hijo no, además no es como si esa chiquilla fuera el centro del universo, los romances son pasajero querido veras que pronto vendrá alguien más y yo haré asta lo imposible por ver que eso suceda - tiempo muerto, mi madre empezó a soltar más comentarios así e hizo qué me estremeciera, ya era bastante malo con cargar la cruz de ser rechazado y ahora también tenía que escuchar que necesitaba a mi madre para conseguir una chica, esto puso mi ego por lo suelos

- Madre

- No tienes que mover ni un solo dedo pequeño, mamá se encargará de que todo lo que quieras sea tuyo y buscaré a la mejor novia para mi hijo, lo juro por nuestra familia - puse los ojos en blanco

-No necesito eso, lo único que quiero es que olvidemos este tema y sigamos con nuestras vidas, madre tengo suficientes responsabilidades para asumir mi cargo en la mafia para perder tiempo con mujeres - ella me miró con tristeza

- Koga deja de hacerle caso a tu padre, ese hombre no puede hacer nada sin mi, si hubieras visto como estuve apuntó de romper nuestro compromiso y el quiso quitarse la vida o no verme más le dirías "no qué el amor no valía la pena". Claramente ese hombre no puede vivir sin mi - suspiro dramáticamente y esa fue mi señal para subir a mi habitación, una vez que esa mujer empezaba a hablar de sus días de juventud nadie podía callarla

Pero en sierto modo mi madre tenía razón, una compañera era un pilar importante para el equilibrio, sin embargo asta papá tenía claro que la mafia ocupaba bastante tiempo de su día y nos ponía en segundo plano, yo no podría hacer eso con mi pareja, pero comprendía qué mi padre tampoco quería dejarnos, ese hombre solo quería enseñarme lo más rápido ser el líder para el poder estar con mamá y eso era un poco vergonzoso

Suspire, creo que estaba empeñado tanto en el amor por que mis padres eran cariñosos entre sí, pero ahora ya no sentía tanto esa necesidad, al parecer había renunciado al hecho de tener una pareja y creo que era para mejor