𐚁 SO IN LOVE 𓏲ּ ֶָ֢

CAPÍTULO 10

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—Armin.– Susurró mi nombre, no dejó que Hitch terminara de presentarme.

La castaña y su novio solo observaron como Annie y yo nos quedamos impresionados al vernos, anonados, no puedo explicar lo que precisamente quiero hacer, si salir corriendo de este lugar, o seguir conteniendo estas tremendas ansias de ir directamente a sus brazos y dar ese abrazo anhelado que debí entregarle el último día que se despidió de mi.

Sus ojos tratan de hablar queriendo reemplazar a sus labios, creo entender y a la vez no, solo se que el tiempo se ha detenido para los dos, sin tomar relevancia de los demás, de lo que sucedió en el pasado.

Nada de eso me importa ahora, ¿que puedo decir? La tengo en frente de mi.

—¿Ustedes se conocen?– La voz de Hitch hizo que volviéramos a la realidad de golpe, los ojos de Annie se pusieron inexpresivos y serios como si nada estaba pasando, pero, ¿a caso estaba pasando algo?

No supe que responder a su pregunta, no tiene nada de malo decir que si, pero... Hitch es bastante curiosa con respecto a conocer a una persona, no quiero que pregunte el como nos conocemos y destapar todo lo que he tratado de ocultar durante estos meses.

—Ehh...–

—Algo así. Fue mi médico.– Annie respondió.

—¿Tu médico?– Hitch se sorprendió.

—Había sufrido un pequeño accidente en casa de mi amiga y Armin fue el que me atendió.–

—Si.– Era mi turno de completar la historia —Annie llegó con una fractura en su pierna y en su brazo.–

—De seguro te peleaste con tu amiga.– Comentó en son de broma la castaña. —Por ser la más amigable.–

—Pieck no es ese tipo de amistades.–

—¿Le habrás hecho perder la paciencia?– >Muchas veces<. Aunque quise responder a la pregunta de Hitch, solo me limité a sonreír y apartar mi mirada hacia otro lado.

Annie le tiró su mirada seria y a su vez casi amenazante, de alguna manera había extrañado esa forma tan peculiar de ser, de mirarla con esa neutralidad y toques de frialdad cada vez que sus cercanos bromean con su carácter, aunque sé bien que a ella no le afecta, tampoco es que le hace tanta gracia que se burlen de su personalidad.

—Esta bien, esta bien, me callo.– Dijo Hitch luego del gesto de Annie. —Bueno, entonces, se les hará más fácil convivir en este nuevo trabajo.– Eso me hizo latir más mi corazón, verla directamente a los ojos me hizo perder la noción del tiempo y del lugar. Es verdad, a partir de ahora Annie y yo vamos a estar más cerca. —Médico y paciente se han reencontrado, aunque ahora eso ha cambiado a socios, ¿que pequeño el mundo, verdad?– Irónico de nuevo.

—Así parece.– El momento emotivo comenzó a transformarse en un entorno incomodo, y no se si se sobre entiende, pero espero que Hitch no note la tensión que aun tenemos Annie y yo.

—Y me imagino que tienen mucho de que hablar porque sus caras dicen que hay una historia detrás de la relación de médico y paciente.– Muy tarde, ya lo notó. —¿Nos vamos Marlo? Dejemos que ellos se acomoden en su nuevo entorno.– Puso la misma sonrisa llena de picardía y curiosidad que suele usar cada vez que necesita indagar de algún tema justo antes de marcharse de la mano de su pareja.

Rayos, pero no es como que yo quisiera tratarlo con ella. Y no creo que a Annie le guste que yo vuelva a mencionar el pasado.

Al ya no tener la presencia de Hitch y Marlo en el lugar, nuestro entorno se puso más rígido de lo que ya estaba, sin saber que decir, sin cómo empezar una charla, Annie y yo cortamos cualquier tipo de la lazo la última vez.