Se solicita.

86 7 17
                                    

Capitulo 1

Vivian

Después de pasar una horrible noche por culpa de mis pensamientos, voy directo al aeropuerto.
Corinne llamo en la madrugada, para asegurarse que todo está bien, le dio pánico saber dónde rente una noche.

Me duele tanto dejarla, pero creo que era lo mejor.

Ya había estado en Nueva York antes, cuando tuve que irme de Hawkins por un año. Puedo reconocer algunas calles si quiero.

Se siente bien saber que iré a algún lugar por qué yo quiero, no por que mis padres me mandan para hacer algo que yo no quiero.

El día no está tan soleado, una gran ventaja por qué no sudare, mientras llevo mis maletas de un lado a otro.

En algunos bares se escuchan canciones de algunas bandas, incluyendo las de The Kings.
La banda donde toca Eddie.

Ahora que lo pienso, es un nombre ridículo. Su banda es ridícula, y todos ellos son ridículos.

No se que hago en estos momentos, pero me llegó la idea de poder encontrar un trabajo.
He visitado algunos hoteles y ninguno de ellos está tan barato como para poder hospedar una sola noche.

Estoy mirando para todos lados, la gente choca conmigo y ninguno se detiene para disculparse.

Hay un letrero, me acerco con tan solo ver las palabras "Se solicita" en grande.

Necesitan ayudante general...

No leí lo demás y entre al lo que parece ser un bar lujoso.

Me acerco al barman, aún con mis maletas.

—Hola, ¿Podrías llamarle al dueño de este bar?

El hombre me mira con curiosidad, mientras limpia un vaso con un trapo.

—Creo que no aceptan mujeres.

—Pero necesito el trabajo, de verdad.—insisto.

—No está el dueño.

—¿No podrías llamarle?, Seguro tienes su número.

—Lo siento, pero no.

De pronto, otro hombre sale de una puerta que dice "Solo personal autorizado".

—¿Ya te atienden, señorita?

—No, ¿Podrías llamarle al dueño del lugar?—pido.

—Yo soy el dueño.

Mi vista se dirige al barman mentiroso, quien se ve avergonzado y se aleja solo un poco otra atender a un grupo de personas que han llegado.

—Venía por el traba...

—No aceptamos mujeres.—corta mis palabras.

—¿Por que no?

—Por que solo hay uniformes para hombre.

Una imperfecta verdad #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora