Verdades ocultas

Capítulo 5

- Por lo que veo, la antigua Aria está volviendo. – dice divertido, papá.

- Frank. Bueno eso espero al menos, todos echamos de menos a esa pequeña alborotadora, quien siempre estaba riendo y molestando. – le sigue el juego a papá.

- Papá...

- Sabía que faltando Tyr, Audrey sería la única en poder lograr semejante hazaña.

Papá le besa la sien, y no puedo evitar reír al ver su cara, y apoya su frente en mi hombro, avergonzada.

Papá me mira, y junta nuestras frentes, es un gesto que siempre hacía conmigo y con Tyr, pero a causa de todo, lo dejó de hacer cuando Tyr se fue. No puedo evitar derramar algunas lágrimas, aunque sea doloroso, y aunque tardemos, papá, Audrey, yo, todos los que quisimos a Tyr saldremos adelante, mientras no olvidemos que una vez formó parte de nuestra vida, todo estará bien.

- Creí que mi bebé llorona había desaparecido hace años. – me dice Audrey.

- Te quiero.

Me separo de Audrey, y me doy cuenta de que Mei también está y le sonrío, dándole un beso en la frente. Es verdad que Audrey es muy importante para mí, ha formado parte de mi vida, desde que tengo memoria, pero Mei ha sido mi gran apoyo durante estos años.

Llaman a Audrey, y todos pegamos un salto al escuchar su voz de mando, además del enfado claro que hay en su tono. Cuelga el móvil, y lo estampa contra el escritorio, llena de rabia.

Me disculpo con una sonrisa con Mei, y abrazo con fuerza a Audrey, le pregunto lo que ocurre, ya que ella nunca pierde su temple.

- Es la misma firma. Está ocurriendo lo mismo que ocurrió hace cinco años, Aria. – me devuelve el abrazo con fuerza.

No puedo decir que me sorprenda, entre la carta, lo que hablé con papá, que de repente llegara el abogado intentando colármela, y el ataque a James y Eddie... Dejando un beso en su cabeza, me separo de ella, y abriendo la caja fuerte, saco mi pistola de nueve milímetros. Cojo aire, hace cinco años que no toco ningún arma, pero creo que es el momento.

- Aria, que... - miro a Audrey, quien se tensa enseguida.

- Mei dile a todos que se alejen de las ventanas ahora mismo, y quiero que te quedes con ellos.

- Dime ahora mismo que ocurre. – me pide Mei.

- ¿No has notado nada raro en el abogado esta mañana? No sé cómo se me ha podido pasar hasta ahora.

- Estaba muy nervioso, no paraba de mirar en todas direcciones y temblaba.

- Es ella. – dice papá.

- Dudo de que ella se muestre tan pronto, pero estoy segura de que ha mandado a alguien en cuanto se ha enterado. – saco otra arma de la caja y se la tiendo a papá.

- Aria, sabes que es muy peligroso, si ella logra...

- Eres lo suficiente fuerte como para prohibirle el paso, pero aparte de eso, papá te conozco lo suficiente como para notar el cambio en tus ojos. – le sonrío.

- Veo que hay cosas que ni Tyr sabía. – suspira Audrey.

- Prometo que te contaremos todo, esta noche, Audrey. Ahora necesito poner a todos mis trabajadores a salvo.

Abro el falso fondo de la caja y saco una pequeña caja bajo la sorprendida y extrañada mirada de ellos, al abrir las cajas tanto papá como Audrey se ponen a reír con fuerza.

Ambos se acercan y se ponen un chaleco antibalas, colocándome uno, me acerco a Mei y le tiendo uno, haciendo que se lo ponga asustada.

Hola!! :)

Mmh... La verdad es que no es lo mío presentarme en mis historias, la verdad es que no sé como hacerlo, además de que siendo sincera, ¡me da vergüenza!

Es la primera vez que realmente me estoy tomando en serio lo de publicar y escribir algo y acabarlo, por algún motivo, siempre me detengo en medio de todo.

Me he animado a saludaros, para daros las gracias a quienes os molestáis en leer mi historia, me gustaría que me dijerais si hay algo que no os guste o algo por el estilo, y de nuevo muchas gracias. :)

Este capítulo es más corto que los demás, y por el momento el más corto que hay.

Un abrazo.