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D.A: Después de Anne

A.A: Antes de Anne

—¡Tu puedes bebé!— Anne apretó sus manitas, sus ojos se llenaron de determinación e hizo pequeños sonidos

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—¡Tu puedes bebé!— Anne apretó sus manitas, sus ojos se llenaron de determinación e hizo pequeños sonidos.

Se levantó del pasto, siendo sostenida por unas pequeñas manos.

—¡Eso!— festejaron los niños y Sasha solo tomo unas cuantas fotos.

Anne rió, no sabía que pasaba, pero estaba feliz de que todos estuvieran feliz.

—Okey niños, empiecen a trotar.— Hablo Sasha, cargando a su hija y checando la hora.— Aún tenemos tiempo, el partido está a nada de empezar.

Los niños solo asintieron y rápidamente se fueron a la cancha.

Anne aplaudió, soltando pequeñas burbujas de baba.

—¿Te gusta?— Pregunto Sasha.— Cuando seas una gran alfa te enseñaré a jugar.

—¿Y por qué crees que será un alfa?—La rubia sintió como rodeaban su cuerpo.

—Los bebés Waybright son Alfas.—Respondio, dando la vuelta y besando los labios de Marcy.— Anne es una alfa 100%.

—Yo le cambió los pañales.—Respondio Marcy, besando nuevamente los labios de la alfa.

—¡Ah!— Se quejo Anne, pues ella no recibía besitos.

—Si bueno... Pero...

—Aceptalo Sashy, Anne es una omega desde que nació.—La rubia solo suspiro.

—Aun así, le enseñaré muchas cosas para que no me abandone y me cambié por un alfa tonto.—Marcy rió por los celos de la alta.—¿Escuchaste Anne?— Pregunto al cargar a la cachorra y elevarla.— Yo soy la única alfa de tu vida.

—Sashy, no digas eso.— Dijo entre risas.— Anne aún es bebé.

—Y lo seguirá siendo así tenga 40.

Las dos sonrieron, el momento nadie se los quitaba. Marcy beso nuevamente los labios de la alta, derritiéndose del amor que sentían.

—Te amo.— Murmuró entre suspiros la rubia.

—Yo igual te amo.

—¡Ah!— se volvió a quejar Anne.

"Yo quiero beso ¡Muchos besos!"

Marcy cargo nuevamente a su bebé, besando sus mejillas y haciéndole cosquillas a su pancita.

Anne rió por la acción, le gustaba cuando su mami le daba mimos y cariños.

—Estaremos en las gradas, desde ahí estaremos echando porras.— Murmuró nuevamente antes de besar los labios de la alta.

—Seguro, si quieren algo solo pidan y yo pago después ¿Si? Las amo.— Beso la cabecita de Anne, despeinado el cabello ya alborotado de su hija.

Madres separadas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora