Comencemos de nuevo, mi amor(segunda temporada)

terminó el infierno

Sus palabras llegaron a oídos del atigrado el cuál aún peleaba con Erick, sin embargo, eso no le iba a impedir que defendiera a su esposa, claro que no. Hizo una leve distracción y llevo a Erick cerca a las dos mininas, no lo pensó mucho y pateó con odio al de ojos avellana, el cuál quedó entre Alma y Kitty.

Erick: — ¡Alma, cálmate! — grito al ver a la gata blanca correr con una espada a su dirección.

Su grito alarmó a Alma, trató de desviar el ataque, moviendo su brazo levemente, sin embargo el impulso que tenía la obligó a atacar involuntariamente a Erick, dejándole un raspón en el brazo. La sangre empezaba a brotar.

Erick — ¡Idiota! — gritó molesto mientras posaba su pata en la herida.

Gato fue al costado de su esposa con una sonrisa maligna en ambos.

Gato: — Que maravilloso equipo, la verdad — reía con descaro.

Kitty: — ¿Qué pasó con su "venganza" se ve a lenguas que era un juego de niños — casi no se le entendía al hablar, pues su risa constante lo evitaba.

Alma: — E-esto no es nada, n-nosotros vamos a lograr nuestro objetivo — trataba de mantenerse fuerte, sin embargo se podía ver cómo sus lágrimas empezaban a querer salir.

Kitty: —Hablas mucho, Alma, sin embargo, hasta ahora no has hecho nada de lo que prometías — explicó.

Alma solo la miró a los ojos, luego a Erick quien estaba maldiciendo en todos los idiomas posibles a su "aliada" ese corte en el brazo no le permitiría mantenerse al margen en la batalla.

Gato: — Consideren un acto solidario de mi parte — tomó la cintura de su esposa en señal de burla a los demás felinos — si se arrodillan  — rió — tal vez tenga compasión y los dejé libre.

La piel de Erick ardía, sentía como su plan iba desapareciendo poco a poco, el ver cómo una vez más Gato lograba su objetivo le hacia querer matarlo a cualquier manera, sin embargo, no era tan tonto, sabía el nivel en el que estaba, sabía que debía encontrar su punto débil.

Erick: — ¿Compasión? ¿Tu? — rodó los ojos con una sonrisa — ¿Acaso tuviste compasión con tu "amada" cuando la dejaste plantada el día de tu boda?

Pensamientos de aquel día volvieron a fluir en las mentes de el atigrado y la bicolor, se supone que había superado esa etapa, entonces, ¿Por qué sintieron un golpe en el pecho?

Erick: — ¿Por qué no respondes? Ah ya se, sabes que tengo la razón ¿Verdad? — dijo recién recuperándose del daño.

Alma: — ¿Y como no la tendrías? Si el de verdad quisiera no le hubiera hecho tal cosa — trataba de defenderse.

Los comentarios de "reflexión" iban a continuar, sin embargo, claramente se podía ver la furia de los dos esposos a través de sus ojos, no había necesidad de preguntarles "¿Estás bien?" Porque claramente si seguían hablando, esto terminaría de la forma que no querían.

Alma: — Además — antes de seguir fue callada por el golpe en el brazo que obtuvo de Erick, quien corrigió la forma de punto débil.

Erick: — Lo mejor será que cambiemos estrategia, de lo contrario creeme que esto terminará mal. Y además — llamó la atención de la gata blanca — ten cuidado, no caigas tan fácilmente en las trampas de "tu amor" — burló pero a la vez amenazó.

Alma se quedó pensativa por unos instantes, no lograba comprender exactamente a qué se refería, sin embargo, le dió igual y decidió seguir el consejo de su "aliado"