Hace mucho, mucho para así decirlo en una cabaña en el medio del bosque nació, un pequeño cachorro, sus padres saltaba de felicidad y ventura asía su hijo recién nacido, este pequeño cachorro era el fruto de un amor tristemente prohibido.
Este peque...
Estoy tan cansado, encima tengo que tomar el autobús para llegar a casa, ya que me suele quedar un poco lejos desde donde vivo, además, sumándole a que tengo que venir a la cuidad para asistir a la escuela, y que bonita escuela, dijo con ironía.
Vivir a las afuera de la ciudad es una completa mier...y mucho más, ojala y viviera en la ciudad no me quedaría tan lejos la escuela, claro y tampoco llegaría tan tarde, como siempre hago, pero no me culpen tomar un autobús y además dormirse tan tarde por andar en la calle pidiendo o robando, ese si no es mi culpa, si no de esos inútiles que tengo de tutores que se gasta el dinero en apuestas.
Aquí nadie ayuda a nadie, tienes que conseguir todo tu solo, si tienes hambres pues busca, si tienes frio te aguantas, nadie te da una mano, menos las personas ricas, personas con plata a ellos los odio se creen el ombligo del mundo solo por tener más que otros, me han mirado de pies a cabeza con asco y repulsión, solo por ser pobre y lo peor es que son ignorantes e indiferentes a los que necesitan ayuda.
Salgo de mis pensamiento cuando ya estoy lo suficientemente lejos de la vista de algún conocido de la escuela decido sacar a Inti de mi mochila.
-Tranquilo amigo- Inti se remueve inquieto y desesperado por salir de la mochila, como dije antes ha estado inquieto y no sé por qué, capaz y tenga hambre- Inti, cuando lleguemos a casa te daré algo de comer si- suspiro y bajo a Inti al piso así por lo menos estira las patas un poco.
Caminamos unas cuantas cuadras, para llegar a la estación donde tomaremos el primer autobús, cuando nos detenemos para cruzar la calle y esperar que el semáforo se pusiera en rojo y así poder avanzar, de un momento a otro sucede algo inesperado, algo que nunca sucedió.
¡Inti empiezo a correr dejándome atrás!, fue tanta la sorpresa que me quede inmóvil unos segundo antes de ir tras él.
Nunca tuve problemas con él, no tengo correa para llevarlo como otros perros, pero tengo la suerte de que Inti es muy tranquilo y siempre está al lado mío cuando camino, no suele alegarse mucho de mí, así que no me preocupo mucho, además a él no le agradan los desconocidos, o más bien las personas, no deja que se me acerquen mucho.
Salgo de mis pensamientos cuando veo que Inti me deja cada vez más atrás, y decido correr detrás él.
-¡INTIII!, VEN AQUÍ A HORAA- grito y salgo corriendo tras de él, pero de repente dejo de correr y me quedo parado como un poste de luz, en medio de la calle.
Porque en ese instante, sentí como si necesitará ir al sentido contrario, como si alguien me llamara a mirar tras de mí, fue un sentimiento extraño, sacudí mi cabeza intentando sacar esas sensaciones rara que me invadieron en ese momento, decidí ignorarlo y seguí persiguiendo a mi mejor amigo hasta una cuadra, y de repente para enfrenté de una tienda que vende carne.
-¡En serio Inti!, corriste para llegar hasta acá.
Quería regañarlo por haber cruzado la calle de ese modo, pero cuando me di vuelta para mirarlo mejor pude ver en sus ojos que de verdad tenía hambre, me sentía culpable, esta mañana salí tan apresurado que ni desayune e Inti no comió su comida, además no tengo el dinero suficiente para poder comprarle carne.
-Lo siento Inti, no puedo comprarte carne, te prometo que cuando tenga mucho, mucho dinero te comprare toda la carne del negocio-miró con tristeza a mi mejor amigo, odiaba ese sentimiento era como pulpa e impotencia, me sentía inútil, deseaba con todo mi ser poder crecer y ser mayor para poder trabajar y darle lo mejor a Inti, para que no nos falte nada a los dos y así poder estar juntos siempre, sin que nadie nos moleste y no tenga que ir a la escuela.
Al parecer Inti comprendió lo que le dije, porque cuando me di la vuelta para seguir caminando a casa el me siguió, pero de seguro él esta triste, ademas puedo sentir que el lo esta.
Y te cuento algo... a mi tampoco me gusta.
Mientras vamos caminando a la parada de autobús, hay veces que ciento que Inti y yo mayormente nos entendemos bien, es como si supiera como me siento y me entiende, es raro ¿no? pero hay momentos en el que él sabe cuándo estoy asustado, triste o hasta contento, es como si estuviéramos conectados, no lose, capaz y son ideas mías.
Pero recuerdo que una vez cuando deje a Inti en casa, porque estaba lloviendo y no podía llevarlo conmigo a la escuela, decidí pasar por un callejón, ya que se medió la grandísima idea de tomar un atajo, para así poder llegar lo más rápido posible a casa, ya que no me gustaba dejarlo solo con Jonh, ya que tenía miedo que lo lastimara o lo dejara fuera de casa y se perdiera.
Cuando de repente vi que unas personas me estaban siguiendo, me asusté mucho, mi corazón latía muy rápido, en eso decidí apurar mis pasos para llegar a casa más rápido, algo que no saben es que suelo asustarme muy fácil cuando estoy solo, pero cuando estoy con Inti suelo ser el mismísimo hulk.
Entonces en ese momento Inti, supo dónde estaba y como me sentía, ya que apareció frente a mí y empezó a gruñir y ladrar a las personas que me seguían, aunque él era un pequeño cachorro, supo donde estaba, en ese momento se me vino la idea de hacer mucho ruido, así que empece a gritar y aplaudir.
Fue tanto el ruido que hicimos que llamo la atención de un policía, que iba pasando justo en ese momento. Las personas que me seguían no tuvieron otra opción más que irse de ahí antes de llamar más la atención, y se preguntaran pero ¿Cómo? si Inti es un cachorro, bueno eso no lo puedo explicar, pero que me salvo me salvo, además yo también hice ruido, empecé a gritar y aplaudir y gracias a eso nos salvamos de una grande.
¡che! no me traten como un loco es lo único que se me ocurrió en ese instante, yo me considerare un genio.
Desde ese momento, Inti estuve siempre pegado a mí y yo a él, me inquieto mucho cuando no lo tengo a la vista o viceversa, hasta pensé que Inti era como flas de lo rápido que llego a donde yo estaba, con esas patas tan tiernas y cortas no me lo puedo ni imaginar.
Lo que sí podría ser que, Inti se haya escapado mucho más antes de que saliera de la escuela por esos llego justo a tiempo, pero no me iba a comer la cabeza, así que lo deje pasar.
Saldo de mis pensamientos cuando veo que el autobús, ya había llegado.
-Corre Inti que el autobús nos deja-miro a mi mejor amigo y salimos corriendo hacia este.
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