보고 싶어 [10]

737 112 29
                                    


La pareja se encontraba en la playa, disfrutando del sol, la arena y el mar. Quackity sonreía mientras hacía castillos de arena, siendo observado por su novio. 

Spreen sonreía por verlo, por tenerlo frente a él, porque era capaz de levantarse y poder sentirlo. Su sonrisa alegre cambió cuando recordó que pronto tendría que decirle la verdad a Quackity, antes de que fuera demasiado tarde. 

Se levantó de su puesto y se sentó al lado de él, sonriendo mientras su novio seguía haciendo castillos. 

—. Éste es nuestro castillo - dice sonriente, terminando de dar detalles —. Tú eres el rey de estas tierras, y yo soy el rey de tu corazón. 

Quackity lo miró burlón, sonriente y alegre. Spreen sonrió por verlo, acercándose para atrapar sus labios en un beso, disfrutando el ritmo lento y cariñoso. 

—. Tú y yo gobernaríamos juntos esas tierras, porque yo me encargaría de desposarte, así, tú y yo seríamos propietarios del otro - respondió sonriente. 

Quackity sonrió alegre, abrazándolo. 

—. Te amo, te amo tanto. Agradezco cada día a tu lado, cada año y cada momento fue maravilloso. En serio le doy gracias a la vida por ponerte en mi vida, te amo tanto - susurro Quackity, abrazándolo fuerte e inhalando su aroma corporal —. ¿Estarás conmigo? ¿En las buenas y en las malas? 

La pregunta duele, porque no podía responder positivamente. 

—. Quackity - nombra Spreen, apartando un poco a su novio. 

Verlo a los ojos azules le entristecía, porque sabía que pronto no podrá volverlos a ver. 

—. Quiero darte una noticia, pero no puede ser ahora, ¿tienes tiempo mañana? - pregunta, acariciando con su pulgar la mejilla del menor. 

Quackity asintió, sonriente. 

—. ¿A qué hora? - pregunta, poniendo su mano sobre la de su novio. 

—. ¿Te parece a las siete? Quiero llevarte a otro lado después de cenar - responde. 

Quackity asintió, volviendo a abrazar a Spreen. El mayor se dejó hacer, recibiendo con aprecio y cariño cada muestra de afecto que le daba su novio. 

La noche del día siguiente, ambos se reunieron en un restaurante de comida coreana. 

Quackity se sintió un poco confundido, pero aceptó comer ahí. 

—. ¿Desde cuando te gusta la comida coreana? - preguntó el menor, metiendo a su boca un poco de barbacoa. 

—. Desde hace un mes, más o menos. Pronto será la graduación, después de todo. Iré a la universidad - respondió, bebiendo un poco de soju para no sentirse tan nervioso. 

—. Sí, ¿qué tomarás? Yo planeo seguir con la danza, pienso abrir una escuela para enseñar el arte de todo tipo de baile - respondió alegre, sonriéndole. 

Spreen sonrió, amaba que Quackity le contara sobre sus sueños, porque encajaba tan bien con ellos. 

—. Yo... me iré del país - respondió, cortando el ambiente ameno con sus palabras —. Mi madre tiene muchos contactos por su trabajo, y consiguió que el director de una universidad en Seúl me diera cupo. Es realmente una gran oportunidad, pero...

Spreen tomó una pausa, soltando un suspiro. Desvió la mirada y agachó un poco la cabeza, no quería que Quackity lo viera, se sentía avergonzado de llorar en ese momento. 

True Love - SpreeckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora