Capítulo 8

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Desperté sobresaltada y aún adormilada miré a mi alrededor confundida. Este no parecía ser la mansión de Death, de hecho por el contrario era un lugar pequeño y por así decirlo acogedor...
Me encontraba sobre una cama pequeña, mi cuerpo estaba cubierto por una fina sábana... Cuando me intenté levantar de la cama me arrepentí al instante, pues sentí un intenso dolor de cabeza, soltando una queja volví a acostarme... sentía una extraña opresión en el el pecho... Como si algo malo hubiera pasado... No tenía ni idea de que se trataba esto.
Qué me había pasado? Dónde estaba?
Unos pasos afuera me sacaron de mis pensamientos, dirigí la mirada a la puerta , al abrirse vi a Nat.
-Oh  estás despierta!! -dijo mientras me dedicaba una sonrisa -Cómo estás?_preguntó
-Mejor. _Nat, qué pasó? Por qué estoy aquí? -dije siendo bastante directa.
-No recuerdas nada?
Comencé a recordar... Death, lobos... Ataques... Y oscuridad... Me estremecí y de pronto el miedo me invadió.
-Qué le pasó? -dije rápidamente dándome cuenta de que había sonado un poco desesperada más no me importó.
-Al alfa? ......._asentí rápidamente -N-nada-tartamudeó nerviosa. -Qué te hace pensar que algo le sucedió?
-No tengo idea... -dije extrañada volviendo a sentir esa sensación de hace rato. La mire a los ojos, podía ver tristeza en ellos... -Segura que no sucede nada?
Suspiró -La verdad es que sí .
mi corazón comenzó a latir apresuradamente... Mi respiración se volvió pesada, no sé porque me imaginaba lo que diría.-Tú te desmayaste por el miedo al estar en esa situación, al hacerlo quedaste expuesta, nuestro alfa no se percató de lo que te había sucedido, y Foster aprovecho esa oportunidad, se abalanzó contra ti y... -calló de momento -el alfa se interpuso entre ambos, protegiéndote. Recibió un duerte golpe, tiene innumerables rasguños y una herida bastante profunda en el abdomen -mi respiración se detuvo, no puede evitar que de mis ojos salieran lágrimas -Luego de eso... Llegaron nuestros refuerzos y Foster dió orden de retirada y huyeron como los cobardes que son -dijo para finalizar con odio en su voz.

Un sollozo involuntario salió de mis labios, todo era mi culpa, si no hubiera insistido en venir a la aldea, nada de esto hubiera pasado...
-Eh, eh tranquila Val, lo están atendiendo nuestros mejores médicos, el alfa es muy fuerte verás como se recupera en menos de lo que esperas. -dijo ella.
-No suenas convencida -dije lo que mi mente pensaba al escucharla.  -Donde está? -dije antes de que respondiera un poco agitada.

Nos encontrábamos caminando con paso rápido por los alrededores de la aldea. Con cada uno que daba mi miedo y culpabilidad aumentaban... Por qué? Por qué había insistido en venir? Por qué Death se tuvo que interponer?
-Es aquí -dijo Nat con voz apagada, deteniéndose en una de las casas de la aldea, sin siquiera mirarla entre y... Lo que vi me dejó perpleja, en la fría cama de aquella habitación yacía el cuerpo inerte del alfa, con los ojos  cerrados y su abdomen y brazos se encontraban vendados. Esa simple imagen me rompió, lágrimas salían de mis ojos.
Me acerqué con paso lento hacia él, aún no me lo creía.
-Por favor, Death despierta, no me hagas esto -dije con la voz rota mientras cogía su fría mano. No hubo respuesta -Death, no, nos puedes dejar, tu manada te necesita... Yo te necesito -esto último no pude evitar decirlo, es como si no hubiera control de lo que hacía o decía cuando estaba cerca de él. Lejos de la culpabilidad que sentía al verlo allí mi preocupación y tristeza lo traspasaba, era algo como más profundo. La tristeza que sentía en ese momento no se comparaba con ninguna otra que hubiese sentido. Y eso me alarmaba...

Así pasaron los días. Todo parecía conservar un ambiente lúgubre y melancólico desde que Death estaba así. Descubrí que nos encontrábamos en la misma aldea, al hablar con el encargado de atender dijo que no era lo más conveniente trasladar al alfa de lugar teniendo en cuenta el estado en que se encontraba. Todas las personas alrededor se sentían tristes, ya nadie reía ni festejaba, me dí cuenta de que a pesar del temor que le tenían a Death su manada realmente le apreciaba.
No me moví de su lado ni un minuto, había hablado repetidas veces con el doctor que le atendía y me dijo que aparentemente el golpe que se había dado no había causado graves problemas que podría despertar en cualquier momento... Eso fue hace 3 días. El doctor viene, lo revisa y cada vez que le pregunto es la misma respuesta: Despertará en cualquier momento.

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