So Mine [Yandere! Uchiha Shisui]

XXXVIII. Rechazo

Elise se sintió enferma mientras miraba al rubio de ojos verdes que se inclinaba hacia ella ofreciéndole una pequeña y costosa caja.

—Lo siento Jhon, pero no me casaré contigo —rechazó suavemente Elise mirando al mencionado—. Nosotros ni siquiera somos parejas como para saltar a tal nivel de compromiso. Apenas y somos amigos, casi más tirando para conocidos —habló suavemente Elise—. Sé que algún día encontrarás a una gran mujer que te amará de igual manera y corresponderá a tus sentimientos, pero esa mujer no seré yo.

—¡Pero Sirene...!

Jhon se sintió traicionado, había planeado tanto este día y había elegido especialmente un programa con alta audiencia y en vivo para presentar este glorioso momento, él esperaba que Sirene correspondiera encantada a su propuesta, ya sea por su atractivo físico y su abundante riqueza o por presión social al haberse declarador en publico y en medios televisivos.

Nunca esperó que lo rechazara.

—Eres un buen hombre, eres atractivo y tienes una gran carrera por delante, así que no te desanimes con mi rechazo. Cuando se cierra una puerta, se abre una ventana. Hay muchos peces en mar, yo soy solo uno de ellos —continuó suavemente Elise y tocó levemente su hombro en señal de apoyo.

—Sirene...

Él nunca había esperado que esta famosa artista fuerte, independiente, dulce y amorosa fuera tan arrogante.

Estaba lívido de ira.

¿No era acaso su propuesta suficiente? ¿Es que acaso algo de las flores no le gustaba, se había equivocado en algo?

¿Él no era suficiente para ella?

—¡Pero Sirene-chan, por favor, dame una razón para rechazarme! ¡Me niego a creer que no somos la pareja perfecta! —exclamó Jhon aferrándose a la muñeca de Elise

—Mi corazón le pertenece a alguien más.

¿"Mi corazón le pertenece a alguien más"? ¡Tonterías! ¡Jhon no podía creer que soltara esas mierdas para intentar zafarse de su confesión! Era tan ridículo que era casi risible, una de las excusas más antiguas en el libro de texto de los rechazos.

—¡¿Es que acaso hay algo de mi propuesta que no te gusto?! ¡Puedo cambiarlo! ¡Para la próxima lo haré mejor!

—No es eso, Jhon. Todo me parece muy lindo y romántico, pero no nos conocemos a tal grado como para pasar toda nuestra vida juntos —Elise hizo una mueca cuando la mano sobre su muñeca se apretó.

—¡Podemos conocernos más! ¡Tenemos todo el tiempo de mundo mientras estemos comprometidos! —habló el rubio con la mano en su corazón mientras la miraba desesperadamente.

—Las relaciones no funcionan así, Jhon —negó Elise intentado zafarse del agarre del rubio—. Ya te lo dije, mi corazón le pertenece a alguien más.

—¡¿Acaso mi propuesta fue muy poca?! ¡¿No alcanza a tus estándares de dinero?! ¡Solo dime qué quiees y te lo daré!

—Jhon, escúchame. No es eso, es simplemente que yo no te quiero como tú me quieres a mi.

—¡Yo te amo!

—No puedes amar a alguien que no conoces, Jhon. Tú no me conoces más allá de mi carrera como Sirene y yo no te conozco más allá de tu carrera como artista, Jhon. No quiero que las cosas cambien, estoy bien con como están las cosas ahora y no necesariamente quiero conocerte de vuelta. Por eso, suelta mi mano, Jhon.

—¡No puedes ser así, Sirene! ¡Me enamoré a primera vista de ti y te amo! ¡Por favor, acepta mi cortejo!

—No existe el amor a primera vista, solo atracción que se desvanece al conocer el carácter de la persona. El amor toma tiempo y trabajo, requiere conocer realmente a la persona que dices amar y no rendirte a la mitad —habló suavemente Elise sintiendo su muñeca dolorosamente cerca de romperse—. No amas realmente a alguien hasta que te lastima y aún así sigues pensando que es la persona más grandiosa del mundo... el amor es acto más violento que existe.