ALWAYS YOU [Takemikey]

03

Descansar, era en lo único que pensaba Takemichi después de salir del hospital por lo que se dirigió a su casa ya que era el único lugar donde podía hacerlo.

Para él no era sorpresa que su hogar de nuevo de encontraba vacía, tal vez su madre ya se había ido a trabajar de nuevo y no se había dado cuenta de su ausencia, agradecía por eso, ya que no quería preocuparla, estaba lo suficientemente ocupada como para que se preocuparse por él.

No tenía que preocuparse por limpiar, ya que todo se encontraba intacto, subió a su habitación y se puso ropa cómoda, suspiro en cuanto vio el montón de prendas sucias en el piso, si había algo que odiaba con toda su alma era lavar, pero lo haría después ya que en ese momento se encontraba sumamente cansado. Decidió ignorarlo por un momento ya lo que más deseaba era dormir.

En cuanto su espalda toco el colchón de la cama, sintió un gran alivio, las camillas del hospital eran incomodas y el rogarle a Hina que fuera a su casa porque sus padres se molestaron si llegaba tarde, lo hizo aún más incómodo. Se quedó admirando el techo mientras se perdía en sus pensamientos, aún le dolía un poco la cabeza, pero era soportable.

Recordó lo que había visto en su sueño, y es que haberse visto de esas maneras horribles en todas esas "imágenes" lo inquietaban, y hasta cierto punto le daban miedo, pero a la vez curiosidad, ¿Por qué se habían sentido tan reales? En espacial ese, ese donde estaba con Mikey, ese donde decía que lo amaba... ¿Por qué? Sin darse cuenta de nuevo cayó dormido, aún pensado en el ¿Por qué?

No pasó mucho tiempo para que otra vez se viera en vuelto en la misma situación, sueños que se sentían como recuerdos o déjà vú's de lo que en algún momento viviría pasaban frente a él, y sí, está vez, también uno se detuvo.

En este, Takemichi pudo observar cómo Mikey lo cargaba, y como se su abdomen salía sangre, Manjiro se veía asustado, estaba llorando y tal vez incluso rezando, pudo sentir el dolor de Mikey, su corazón latir frenéticamente, hizo que su pecho doliera, pero sólo vio eso y nada más.

Despertó exaltado, dándose cuenta de que había dormido toda la tarde, y que, de sus ojos, caían lágrimas sin parar, que ese dolor en el pecho era real, sentía miedo, pero no sabía de qué, ¿Qué mierda le estaba pasando?